𝑺𝒐𝒏𝒓𝒆𝒊𝒓 - 𝑽𝒆𝒓𝒔𝒊𝒐́𝒏 𝑨𝒄𝒖́𝒔𝒕𝒊𝒄𝒂

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El baile más esperado por los alumnos del Français Dupont estaba a una semana de llegar, el gran baile de invierno. Todos estaban mas que entusiasmados, las luces, brillos y sesiones fotográficas eran un sueño para cada estudiante que con ansias esperaban esta temporada del año. Durante la clase la señorita Bustier toco el tema, a lo que todos empezaron a susurrar entre ellos emocionados.

- Atención clase, se que el baile es algo que llevan esperando todo el año, pero como saben, necesitamos ayuda de sus padres. Cada año pedimos voluntarios para que nos puedan ayudar con la decoración, recepción y chaperones durante la gala - todos estaban centrados a cada movimiento que la maestra daba - el año pasado fue el turno de los padre de Sabrina, Mylene, Kim y Alex, este año los elegidos son los padres de Alya, Nino, Marinette y Adrien.

Cuando su nombre resonó por toda el aula un enorme sentimiento de tristeza lo invadió, de algo estaba claro y no habría como cambiarlo: su padre no vendrían ni en un millón de año. Los rasgos decaídos de Adrien eran más que evidentes y daban la respuesta que sus amigos necesitaban antes de preguntar.

- Espero sus respuestas para mañana chicos, nos vemos - diciendo esto todos los alumnos se levantaron de sus asientos para dirigirse a la salida, excepto los 4 nombrados anteriormente; la señorita Bustier que solía ser la ultima en salir para verificar todo antes de cerrar se dio cuenta que el grupo de muchachos no tenia la intención de levantarse de sus asientos - ¿Todo bien chicos? - la mirada de Marinette se centro en la atención de la maestra que indicando disimuladamente con sus ojos señalo a Adrien cabizbajo - Adrien ¿que pasa? ¿no te gusto que hayas sigo elegido este año?

- Claro que si profesora, es solo... que... no creo que mi padre pueda venir. No, él no vendrá - queriendo esconder su rostro casi desmoronándose se recostó sobre la mesa.

- Tal vez yo puedo hablar con él Adrien, no pierdo nada intentándolo - dijo la maestra dandole animo con su mano sobre su hombro a modo de reconfortarlo.

- Gracias pero no creo que lo pueda convencer.

- ¿Y si hablas con Nathalie? - la dulce voz de Marinette hizo que todos la miraran avergonzándose de inmediato al ser el centro de atención - Digo... bueno... ya sabes... siempre nos dices que la única persona que puede convencer a tu padre es ella,  si hablas con ella puede que lo convenza de venir y si no, tal ve pueda reemplazar a tu padre.

- ¡Tienes razón Marinette, gracias! - abrazando a su amiga salió rumbo a encontrarse con su tutora, de alguna forma u otra tendría que ayudarlo.

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Al llegar a casa el rubio no compartió ninguna palabra con su tutora, algo que extraño por completo a la ejecutiva, Adrien solía abrazarla cuando iba a recogerlo ademas de contarle sobre su día en el instituto, pero el silencio sepulcral que se dio durante todo el trayecto fue demasiado pesado como para preguntar. Antes de llegar a la entrada Nathalie detuvo a Adrien para que girará y la viera a los ojos.

- Se que algo te sucede Adrien, y quiero que me lo digas ahora antes de que entremos a la mansión - la mirada del rubio estaba escondida en su abrigo. La idea de su amiga era genial pero había un pequeño problema, a Nathalie no le gustaban las fiestas por lo tanto que ella fuera en lugar de padre ya no era una opción - Adrien.

- Hay una gala en el instituto y le toco a mis padres ir a ayudar - Nathalie no sabía que decir, estaba al tanto de esta festividad por los reiterados recordatorios del rubio delante de ella casi todos los días, fue difícil convencer a Gabriel para que accediera en dejarlo ir, pero esto se salía de sus habilidades persuasivas.

Tell Me With a Song [20 stories, 20 songs] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora