𝑰𝒏𝒕𝒐𝒙𝒊𝒄𝒂𝒕𝒆𝒅

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El frío estacional no fue impedimento para que la semana de la moda en Milán fuera todo un éxito para el gran diseñador francés Gabriel Agreste. Unos cuanto contratiempos por la ventisca días atrás hizo que perdiera toda su esperanza en llegar a tiempo para probar, modificar, ensayar y tomar un ultimo suspiro antes del gran desfile, pero la audacia de la azabache a su lado lo soluciono todo, como siempre.

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Sin duda no sería Gabriel sin Nathalie, de eso estaba seguro. Ella era su refugio y mente, su inspiración cuando todo estaba tan vacío como su alma, e incluso la única mujer - aparte de su esposa - que llego a ganar un pedazo de su corazón. Las semanas se convirtieron en meses en los cuales el diseñador se negaba a tomar en cuenta ese extraño sentimiento que no había experimentado exactamente 4 años atrás, después de la muerte de su esposa hasta que una tarde cuando la ciudad parisina estaba cayendo en un atardecer digno de la ciudad del amor el sentimiento se hizo mas fuerte que nunca al punto de no poder apartarlo de sus ojos y corazón.

Hasta el día de hoy cree que el cansancio de esos últimos días en vela le habían jugado una mala pasada aunque muy dentro de él sabe que no lo es; recuerda vagamente el olor a chocolate caliente proveniente de la cocina y las risas de la plata alta que curioso no pudo evitar subir a inspeccionar porque tanto alboroto. Cuando se dio cuenta que los ruidos provenían del cuarto de su hijo un sentido de orientación lo despertó intrigado por las dos voces que podia distinguir: la de Adrien, tan aguda, infantil y efusiva como siempre; y una dama, también aguda pero totalmente diferente a la anterior, mas pausada y suave, Nathalie, así era ella. Con el debido cuidado de no interrumpir sea lo que sea que estaban haciendo se escabullo hasta llegar a la puerta antes de ver todo mas claro. No sabe si fue por los rayos del sol que traspasaban el gran ventanal de la habitación o las pequeñas luces vintage que Adrien había pedido pero la calidez que existía en ese cuarto desbordaba por todas partes. Los ojos grisáceos inspeccionaron cada parte hasta centrarse en las risas nuevamente; en la cama, acostados uno al lado del otro Adrien estaba acurrucado en Nathalie mientras veían una película, los tazones de chocolate caliente vacíos estaban al costado en la mesita de noche aun dando un ultimo olor al dulce aroma. La alegría que emanaba su pequeño hijo era algo que no veía desde los 4 años cuando todo sucedió y Nathalie fue quien le devolvió una de sus cosas favoritas en la vida. Desde entonces supo lo que estaba pasando: se estaba enamorado de ella.

Las cosas fueron cada vez mejorando para ambos, se les veía mas cerca uno del otro, Gabriel no hacia nada sin consultar primero con ella y Nathalie agradecía tener tiempo extra para pasar con su rayo de sol. Todo fue estupendo hasta que las difamaciones salieron.

"Gabriel Agreste se acuesta con su secretaria"
"Nathalie Sancoeur, el reemplazo de Emilie"
"Escándalo de la semana: ¿Gabriel Agreste y Nathalie Sancoeur comprometidos?

El esfuerzo del diseñador por acercarse a su asistente y amiga fueron desechados completamente. La azabache sufrió mucho por todas esas críticas que no llego a presentarse a trabajar durante una semana entera. Si bien ambos sabían que eran mentiras - mas aun porque no eran nada - los demás seres humanos no se molestaron en ocultar sus miradas de indiferencia e incluso disgusto cuando veían a la secretaria en algún evento junto al diseñador. Nathalie cada vez se fue alejando mas y mas hasta volver a su frío y calculador perfil profesional empleado/jefe. Gabriel odiaba verla así, solía esconderse en las pasarelas, evitaba todo contacto físico con él e incluso hizo teletrabajo desde su departamento por un tiempo, pero la gota que rebalso el vaso fue cuando un día la encontró llorando. Ver como las lágrimas descendían sobre sus mejillas y sus brazos se aferraban mas a él en un intento de que no la dejara destrozo todo por dentro y la furia se hizo masiva. Al día siguiente organizo un punto de prensa para aclarar todo; solo basto media hora para que todos los medios de comunicación eliminaran la información falsa y desmintieran lo publicado por ellos mismo.

Tell Me With a Song [20 stories, 20 songs] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora