𝑳𝒆 𝑽𝒂𝒍𝒔𝒆 𝒅'𝑨𝒎𝒆́𝒍𝒊𝒆 - 𝑽𝒆𝒓𝒔𝒊𝒐́𝒏 𝑷𝒊𝒂𝒏𝒐

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-¡Jamás pedí que te preocuparas por mi Gabriel!
-¡Deja de ser tan testaruda Nathalie! ¡Si me preocupo por tí es porque no quiero que nada malo te pase!
-¡No necesito de tu compasión y lastima, bien me las he arreglado estos años sola y esta no es la excepción!
-¡Ahora resulta que todo lo que he hecho por tí no significo nada! ¡Perfecto! ¡Haz lo que quieras no me interesa!
-¡Bien!

Con un portazo Nathalie salió del atelier hecha furia, sus pensamientos estaban asesinando a Gabriel que no se percato de cierto rubio observando desde la planta alta.

Odiaba escucharlos discutir, lamentablemente eran cada vez mas recurrentes e hirientes con el tiempo. Adrien intentaba que hicieran las pases pero cuando creía haberlo logrado una tela mal ordenada o el exceso de llamadas arruinaba todo su esfuerzo entre ambos. Los amaba pero estaba cada vez mas agotado que solo anhelaba poder detener todo este estrés que lo carcomía por dentro.

Con cuidado y a paso lento el rubio llego a la puerta del atelier, estaba a punto de tocar cuando unos refunfuñones lo alertaron que tal vez no era el mejor momento, haciendo caso omiso a su sentido común toco la puerta, inconsciente tres veces como había acostumbrado a escuchar toda su vida adquiriéndolo como propio.

-Estoy ocupado Nathalie.

La voz de su padre lo estremeció un poco, podia notar lo molesto que estaba pero la sensación de tristeza también lo podía experimentar.

-Padre soy yo, ¿puedo pasar?

Todavía temeroso espero segundos como si fueran eternos, un silencio cada vez mas extenso iba apagando la esperanza de modelo; unos momentos mas abrían bastado para retirarse si no hubiera sido por un tosco "adelante" de su padre.

Sin mayor escándalo entró tranquilo al atelier. Su primera impresión fue densa, muy pesada, como si una batalla campal hubiera dado lugar. Una atmósfera tan intensa, ocupando cada rincón y espacio con la amarga lágrima del abandono. Volviendo la mirada por el lugar se fijo en el escritorio de Nathalie, papeles regados por su mesa, una taza de café casi vacía manchada con su labial rojo, un pañuelo ensangrentado escondiéndose del mundo; intento olvidarlo fijando su atención en el podium de su padre pero lo que vio fue peor: sentado en la escalinata su padre estaba inmóvil, diseños regados por todo el piso mientras Gabriel observaba uno en particular.

-¿Padre? - jamas lo había visto tan devastado -¿Que sucedió?
-Nada Adrien - sin siquiera hacer contacto visual su mano se desplomo a su costado con el diseño en mano.
-¿Que sucedió entre tú y Nathalie?

Mismo melancólico silencio. Adrien no quería meterse mas de lo debido pero sentirse así de oprimido lo estaba matando. Sabia lo difícil que podia ser su padre con respecto a sus sentimientos, sobre todo si se trataban de Nathalie. Aunque siguieran negándolo el rubio sabía que existía alguna química entre los dos adultos, pero eran tan obstinados y orgullosos para hacer sus declaraciones , o aceptarlos primeramente.

Un poco arrugado los dobleces del papel en sus manos saco a Adrien de sus pensamiento, entre un rojo escarlata se divisaban lineas en paralelo, una abertura en un costado y el desnudo de la espalda mas allá de lo socialmente aceptado.

El color favorito de Nathalie

Indagó hasta encontrar lo que era obvio, tan resplandeciente como el vestido un mechón rojo se adosaba pulcramente por el costado de la mejilla plasmada, en ondas jamas vistas pero seguramente igual de hermosa en la vida real como en el dibujo.
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El ambiente en la cocina no era distinto al del atelier, aunque la imagen dolía un poco mas. En la isla de centro se encontraba cierta azabache, una nueva taza de cafe descansaba sobre el meson enfriándose con el ambiente mientras era sostenida por una de sus manos, con la otra masajeándose el puente de la nariz y equilibrando exitosamente sus lentes. Algunos pañuelos arrugados a su costado manchados -al igual que el de su escritorio- con sangre; sin embargo no todos, algunos blancos como si no hubieran sido ocupados, lágrimas secas lo mas probable.

Tell Me With a Song [20 stories, 20 songs] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora