15. Vas a odiarme

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Calum y Mike entraron a la casa de la hermana mayor del moreno entre risas. Ambos con un par de bolsas en las manos, cargando vasos desechables y cervezas, aparte de sus respectivos regalos (cabe decir que Calum insistió mucho en llevar el más grande). Pero, la felicidad no les duró mucho, en el segundo en el que dejaron las cosas sobre la barra de la cocina se encontraron con Julia, quien les dirigió una triste sonrisa. Mike sintió su cuerpo temblar, poco antes de tensarse ante la simple idea de que algo estuviera mal.

- ¿Qué pasa? - inquirió Cal tomando la mano de su hermana - Julia ¿está todo bien? ¿Rosie...?

- Es Luke - respondió ella. Ambos chicos sintieron su pecho comprimirse de inmediato, el nerviosismo no tardó en recorrerlos y sus manos iniciaron a temblar. Michael estaba seguro de que si no se controlaba saldría corriendo en busca del chico.

- ¿Owen...? - inició el moreno, dirigiéndose a su mejor amigo, quien no tardó en tensar la mandíbula.

- ¿Dónde está? - cuestionó él, viendo como Julia abría y cerraba la boca, como si dudara entre decírselo o no.

- En el sillón del jardín - musitó. Mike salió corriendo después de eso, alcanzando a escuchar levemente lo que la madre del muchacho decía a continuación - ¡Pero no quiere que lo molesten...!

Cuando llegó afuera fue que lo vio, hecho un ovillo, tirado de lado sobre el sillón, su mochila a sus pies y su cuerpo entero temblando, casi podía jurar que lo escuchaba sollozar. Se mantuvo ahí de pie por un par de segundos, tratando de regular su respiración y encontrar las palabras para no tomarlo por sorpresa o empeorar su reacción. Temía ver aquel par de ojos, descubrir la verdad y ser incapaz de controlarse, temía asustar al rubio y hacerle más daño del que ya le habían hecho.

- ¿Lu? - musitó, acercándose a él despacio. En el segundo en el que Luke unió miradas consigo, sintió su corazón romperse, vio la sangre seca en su labio, el futuro moretón que se pintaría alrededor de su ojo, justo donde un golpe se alcanzaba a percibir; pero más que nada, vio sus ojos, tristes, rotos. Quiso correr y atraparlo entre sus brazos, decirle que todo estaría bien, que él estaba ahí y lo cuidaría como pudiera. Pero no lo hizo.

Sabía perfectamente que no podía, que si se dejaba llevar llenaría su cara de besos, sus manos acariciarían su espalda y terminaría sin querer soltarlo, y no podía hacer eso, no frente a la familia del rubio, no frente a Cal, tenían que mantener apariencias. E incluso si fuera capaz de hacerlo, podía ver en la mirada del menor el miedo que le tenía al tacto, está vez había sido algo más, no solo otro puño de golpes, lo presentía, y temía tener la razón.

- ¿Qué te hizo? - murmuró lo más tranquilo que pudo, encaminándose al sillón. Luke no tardó en sentarse con una terrible mueca en su cara, haciéndole espacio para que le hiciera compañía. El mayor lo hizo, sentándose justo a su lado y esperando a que el rubio hiciera el primer movimiento, no queriendo incomodarlo.

Cuando un sollozo escapó de sus labios y sus ojos volvieron a encontrarse lo supo, la forma en la que realmente no quería decirle, como tenía tanto miedo, cada parte de él temblando, cada segmento suyo roto.

- Hey - saludó el moreno, solo poniendo sus manos sobre los hombros del menor, dos rápidas lágrimas bajaron por sus mejillas, mientras cerraba sus ojos con fuerza. Tacto. Necesitaba mover a Calum, necesitaba sacarlo de ahí - ¿Qué sucedió, Lu?

- Y-yo...

- ¿Puedes traerle un té? - intervino, estando seguro de las reacciones siguientes. Cal asintió y se dirigió de vuelta a la cocina, dejándolos solos una vez más.

Estiró su mano abierta, dejándola flotar sobre el regazo del chico, una vez Luke la tomó con la suya, sin entrelazar dedos, suspiró. Ahora sabía que estaría bien, que aún era capaz de confiar, de tocar, que nada de lo que Owen le hubiera hecho lo había dañado tanto como para no ser capaz de tenerlo cerca a él. Porque lo sabía, no tenía que ser un genio para estar seguro de que había sido el pelinegro el que le estaba causando el dolor...una vez más.

Meant To Be Secret - MukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora