El auto se detuvo frente a esa enorme mansión de color blanco con Rosa. Para sorpresa de Sasuke, había un mayordomo para recibir al rubio, quien al verlo lo saludo.
El un tanto desconfiado, camino con cautela por el lugar. Pensando que quizás el rubio era de esos Alfas, así como lo eran sus padres, que fingian ante la sociedad ser buenas personas, cuando en casa eran lo que eran unos asquerosos sádicos con instintos primitivos y deseos de pisotear a los débiles.
--¡Naruto-Sama, bienvenido! -- grito una Omega castaña a recibir al nombrado, quien para sorpresa de Sasuke, tenía el mismo collar que las del hospital.
--¡Bienvenido Naruto-Sama! -- a la par llego otra joven de cabellos rojizos para saludar al rubio y agarrar el maletín que este tenía.
--Hola hermosas, ¿todo bien en la casa? -- al ver que ambas jóvenes asintieron, camino a la cocina.
--Hola Naruto-Sama, ¿qué tal estuvo su dia? --.
Sasuke al ver a esa joven de cabello rubio hasta la cintura, pensó que era la pareja de este, pero al notar el collar que ella tenía en el cuello, supo que no.
--Todo bien Ino, por cierto, dejenme presentarles a Sasuke, el vivirá a partir de ahora con nosotros, por favor tratenlo bien -- pidió, al señalar al azabache.
Obteniendo este la mirada de las tres Omegas, que al verlo le regalaron una sonrisa de lo más sincera y dulce.
Se sintió incómodo por eso, por lo que sin dudar desvió el rostro a un lado.
-- Vamos Sasuke, acompañame a comer -- pidió Naruto al señalar un asiento cerca de él en aquel enorme comedor.
Sorprendiendo a Sasuke al ver como las Omegas acomodaban los platos para que ellas pudieran acompañar al rubio a comer.
Un tanto desconfiado se acercó, pero lejos de todos. Aun estaba a la espera de que ese Alfa sacará las garras y él estaba ahí para rebanarle la garganta, con los dientes si era necesario.
Naruto no dijo nada al verlo portarse tan arisco, de echo lo entendía y por ese mismo motivo no lo juzgo.
--Lamento decirte esto Sasuke, pero como verás, ahora que estas bajo mi cuidado --. No sabía como tratar el tema, por lo que inició como creyó prudente. Más no se espero las palabras del azabache.
--Me compraste, dilo tal cual es --. Naruto bajo la mirada al escuchar eso, sabía que aunque había deseado hacer una buena acción, una compra es una compra y eso no se podía cambiar.
-- Bueno, si, una compra, a lo que quiero llegar es que no se si has visto, pero los Omegas que están bajo mi cuidado, tienen mi marca en la muñeca --.
Fue en ese momento que Ino, karin y Tenten le mostraron su muñeca, viendo el mismo remolino que tenían esas dos Omegas que lo atendieron en el hospital.
-- La marca de compra para un animal -- las palabras que soltó, dejaron a las Omegas enojadas. Pero por educación y comprendiendo a Sasuke no respondieron.
-- Lamento que sea así Sasuke, pero por desgracia no puedo dejarte salir si no la tienes, es para tu cuidado, me creas o no -- las palabras que soltó el rubio, calmaron un poco a las jóvenes, que empezaron a comer para que no se enfriara más la comida. Eliminando ese pesado ambiente que se estaba creando.
El azabache ya no dijo nada, sólo comió, deseando que la comida tuviera veneno y pudiera morir de una vez por todas, dejando ese mundo asqueroso y podrido en el que le tocó vivir.
Para su mala suerte o quizás no, la comida estaba limpia y rica. Por lo que devoró todo lo que tenía su plato al ser la primera comida decente que habia probado hace años.
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SECRETOS QUE NOS LLEVARON A LA DESTRUCCIÓN
Fanfic¿En qué momento los Omegas pasaron de ser, compañeros de vida a simples putas que podías comprar por unos simples pesos? Esa es una pregunta que se hará Sasuke Uchiha. Misterio, secretos, memorias perdidas y un amor que hace años se enterró en el o...