Lee Dong-hyuck, un adolescente diagnosticado con una enfermedad incurable que le impide salir del hospital.
Jung Sung Chan, un adolescente poco sociable pero con un don para el béisbol.
Ambos jugaban en el mismo equipo pero desconocían la existenc...
Sungchan se acerca hacia el escritorio y deja el libro sobre este, pero en ese momento la puerta se abre.
Entra un chico, bajito de altura y con el pelo castaño.
Disculpa, creo que te equivocaste de habitación. Hye-jin está a 2 puertas a la derecha – Le informa Haechan mientras lo mira serio.
Deja que la puerta se cierre sola y se dirige hacia su cama, se sienta y le extiende el libro.
¿Te gusta Hye-jin? Es que a ella siempre le llegan visitas – Dice Haechan con la mirada fija en el.
Sungchan lo mira con pena y le empuja suavemente el libro.
De hecho, soy Jung Sungchan, soy tu crewmate y vine a entregarte el libro con los apuntes – Le dice Sungchan con una sonrisa nerviosa.
Haechan cambia rápidamente su expresión a una de alegría, agarra el libro y lo abraza mientras mira a Sungchan.
Oh en ese caso ¡Muchas gracias! Es que siempre dejan los apuntes en recepción y nunca vienen a verme. Eres el primero en venir – Dice Haechan.
Los ojitos de Hae comienzan a reflejar pequeños destellos brillantes, quizás de la emoción de ver a alguien nuevo o porque, por primera vez en su vida, había visto a un chico con unos ojitos y una sonrisa tan pura.
Sungchan al escucharlo cambio su mirada a una de pena, pero rápidamente la cambia a una de confusión.
Eso es raro, quien deja los apuntes en la recepción. Es mejor que los entregues vos mismo, además de que conoces a tu crewmate – Dice Sungchan con confianza.
Hae sonríe abiertamente y se acomoda en su cama, eso sí, nunca soltó el libro.
Sungchan al ver que Hae se pone cómodo, decide sentarse en la silla que está al lado de la cama, dejando su mochila en el suelo.
Hae comienza a hojear el libro con una mirada muy atenta, pero con una sonrisa plasmada en su rostro. Sung lo mira fijamente, pero se distrae por un destello de luz que se refleja en la estantería, al ver esto se alarma un poco y rápidamente va a cerrar las cortinas para evitar que pase algo malo.
Hae se le queda mirando atentamente, mientras que él esta cerrando cada cortina de la habitación.
Eh, es que estaba entrando mucha luz y me molestaba a la vista – Explica con cierta desconfianza en su voz.
Cierra la última cortina, se dirige hacia su asiento y baja la mirada.
Hae sonríe tímidamente y lo mira.
Ya sabes de mi condición ¿no? - Menciona con seguridad.
Sungchan levanta la vista y se miran fijamente.
Me lo contaron en la escuela, no quise incomodarte ¿Te hice sentir mal? – Declara Sungchan avergonzado por lo que su rostro se pone rojo y baja su mirada hacia sus manos.
Hae se ríe abiertamente lo que provoca que la persona a su lado alce su mirada con asombro.
¡No te sientas mal! Solo quería saber cómo sabias, es que era muy evidente que te contaron sobre mi – Confirma Hae.
Hae ríe fuertemente mientras que Sungchan sonríe al verlo.
No me tengas lastima ¿Sí? Pero creo que por sentirte mal te voy a ofrecer algo que te hará sentir mejor y que no podrás rechazar – Le dice el bajito.
Sungchan lo mira atentamente, mientras Hae le sonríe.
Te ofrezco ¡Mi amistad! ¿Qué te parece? - Manifiesta Hae.
Hae sonríe mostrando sus lindos dientes. Sungchan se ríe y sonríe mientras le extiende su mano.
Trato hecho querido amigo – Le dice Sungchan mientras se dan la mano y la sacuden amigablemente.
Eres el primer amigo que tengo, me siento emocionado. ¿Vas a venir seguido a verme? – Pregunta Hae con mucha emoción.
Tratare de venir cada vez que pueda – Informa su nuevo amigo.
Sungchan se levanta de la silla mientras mira la pantalla de su celular.
Hae comienza a hojear el libro nuevamente.
Te tienes que ir ¿Verdad? Ya es tarde – Dice Hae aun en su cama.
Sungchan levanta su mochila, se la coloca en un hombro y lo mira.
Si, ya es tarde. Puedo venir en unos días, ¿Necesitas algo? – Pregunta su amigo.
Hae sonríe, agarra un papel, escribe algo en el y se lo extiende. Sungchan lo agarra y lo guarda en el bolsillo de su pantalón.
Solo eso necesito, gracias por venir hoy – Dice Hae mientras hace una pequeña reverencia desde su cama.
Hae le sonríe, Sungchan le devuelve la sonrisa y camina hacia la puerta. Antes de abrirla se da la vuelta y mira a su nuevo amigo.
Hasta en unos días querido amigo – Anuncia Sungchan con mucha alegría.
Sungchan sonríe y agita su mano, Hae repite el acto.
Hae sigue agitando su mano hasta que su nuevo amigo sale de la habitación. Su sonrisa delataba claramente que Sungchan le había caído muy bien, tenia un nuevo amigo cosa que hace mucho no pasaba.
Hae estuvo muy alegre lo que quedaba del día, podría ser porque finalmente pudo conocer a alguien que acepto ser su amigo o porque esos ojitos brillantes y esa sonrisa tan pura habían hecho latir aceleradamente su lindo corazoncito. Nuestro Hae por primera vez en mucho tiempo se sintió feliz.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
