"Dices mi nombre como si conocieras mi lado oscuro.
No puedo ganar contra el sabor de las lágrimas que lloraré.
Una granada lenta esta explotando.
Fue mi error...
Entonces, ¿por qué no la detengo?
Estoy a tiempo de detenerla.
Es como si una parte de mí la quisiera.
Por eso no estoy huyendo de ella."
(Ellie Goulding & Lauv - Slow Grenade)
...
El mundo no es como queremos, tuve que lidiar con ello desde que era pequeña, el helado se derrite, los cuentos se acaban y las lágrimas se secan. No importa cuánto lo intentes, nada es eterno, mi mamá no lo fue, y los moretones tampoco, después de unos días desaparecían, por ello mi padre los volvía a dejar alrededor de mi débil cuerpo.
Cuando eres pequeño el dolor es un parpadeo, pero conforme vas creciendo se convierte en los recuerdos de tu infancia y las pesadillas de tu adultez. Después de la adolescencia, la voz se me fue, sentí que ya era muy tarde, había perdido, no, me robaron una parte de mí. Me arrebataron las risas, los juegos y las travesuras correspondientes a la inocencia de cualquier infante.
Cuando creí que la vida ya era lo suficientemente terrible, descubrí mi última sentencia. Ella tenía el cabello largo y negro como un princesa, la piel blanca como la leche caliente en una mañana fría y la sonrisa astuta que tiene una persona cuando sabe que es encantadora. Me gustan las mujeres.
Y la mano que cubría mi boca, se volvió aún más pesada, me dolía el alma y el corazón. No había sentido tantas ganas de llorar desde aquella ocasión en que mi padre había tomado su cinturón más grueso para destrozar la piel de mi espalda. La mirada de aquel ángel hizo que las cicatrices ardieran, como si fuera un recordatorio de la felicidad que nunca alcanzaría.
"Eres un defecto". Mi padre lo decía tantas veces, no tenía idea de la profundidad de aquellas palabras. Sí, yo, ante los ojos del mundo, era algo que no funcionaba correctamente. Tuve esperanza, los errores pueden arreglarse, ¿no? En esta sociedad en la que yo era diferente, podría encajar si me forzaba, ¿no?
No.
Lo intenté, acepté a cualquier chico que mostrara interés, pero los besos me sabían a vacío. ChanYeol era guapo, amable, considerado y dulce, ¿por qué mi corazón no se aceleraba? ¿por qué no tenía el deseo de tocar su piel? No me moría por rozar mi labios con su mejilla y cerrar los ojos con calma.
Tuve que huir, empecé a poner excusas para no salir con él, en una fiesta, borracha y adolorida le pedí a MinHo que me besara. ¡Tenía que sentir algo! ¡Algún chico tenía que reparar lo que sea que estaba mal dentro de mi! ¿Cómo le voy a explicar a papá que a su hija se le iba la respiración por otra chica? No saldría viva de esa casa.
"Desagradable, soy desagradable." Cuando aquel chico me respondió con tanta tranquilidad que era gay, la envidia me hundió. Lloré de coraje, yo también quiero decirlo, ¿no lo merezco? Estoy cansada, la única vez que he vuelto a sentir algo, ¿y me dice que esta mal?
Lo insulte. "Tiene cura", le dije, aún sabiendo que yo no la había encontrado.
📷📷📷
ESTÁS LEYENDO
El Enemigo de Mi Hermano | ChanBaek
FanfictionBaekHyun ha regresado de su viaje, decide retomar su vida y seguir adelante junto a sus amigos y sueños. Sin embargo, todos sus planes se ven en riesgo cuando los problemas de amistad y amor de MinHo lo alcanzan indirectamente. Atrapado en un pasado...