Amarnos completamente, cuando nadie ve.

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Había comenzado a sentirse horrible, asquerosa consigo misma. Treinta y siete años, casada, con tres hijos. Aunque, a ella le importo un carajo su esposo. Actualmente, y desde hacia años, ella había perdido su amor por aquel hombre. Durante los primeros dos años en dentro del hospital, siguió teniendo sentimientos por su esposo, aferrándose a la idea de que tal vez un dia todo mejorase. Pudiesen ser la familia, que ella siempre anhelo, pese a que fue literalmente comprada por aquel hombre. Pese a haberle tomado un profundo miedo a su esposo, siguió teniendo la esperanza de que la trataría con amor y cariño, como al principio de su relación. Pero, luego de dos años, dejo de tener sentimientos hacia ese hombre. Ese amor, fue sustituido odio. Ese miedo, fue sustituido por rencor. Al principio, pensó que fue debido a que ya había perdido completamente las esperanzas en 'poder tener una relación normal. Enji, simplemente la había dañado demasiado. Tanto a ella como a sus hijos. Por sus estupideces, uno de sus hijos había fallecido. Aquello había destrozado a la mujer peli blanca. Rei hacia dos años, que entendió que ella simplemente no podía amar a ese hombre. Y ella pensó que simplemente perdió su amor por él, pero no fue como ella creía. Todo el amor que ella tenia para darle, todo el amor que ella le daba, ahora se lo estaba dando a otra persona. Midoriya Izuku, un niño de tan solo once años, estaba recibiendo el amor que alguna vez pensó dirigirle a su marido. ¡Reprimió sus sentimientos, deseando escapar de aquella loca realidad a la cual se comenzaba a enfrentar! Ella no paro de recriminarse una y otra vez, preguntándose si estaba volviéndose aún más loca que antes. Y con razón, ¿Saben? Ella no tenia la culpa de pensar aquello. ¿Cómo reaccionarían ustedes, al darse cuenta de que se enamoraron de un niño al que casi le triplicas en edad? Once y treinta y siete, una diferencia de veintiséis años. La mujer se desvió y reprimió aquellos sentimientos por dos años, por obvias razones. No podía estar con un niño, era algo completamente inmoral y perjudicial para ambos en prácticamente todos los aspectos. Cuando Izuku fuese un héroe profesional, ósea, dieciocho años, ella tendría cuarentaicuatro años. Sería malo para él a largo plazo. Entonces, sabiendo esto, ¿Por qué seguía realizando aquella acción?...

Izuku, estando entre los brazos de Rei, correspondía al beso que la peli blanca le dio. Se sentía, en pocas palabras... ¡Increíble! Ella sentía lo mismo que él, era una locura completa, pero una locura que le dio una inmensa felicidad.

-*Se que esto esta mal, ella es una mujer mayor y madre de tres hijos, tengo solo once... *

Tras unos quince segundos, se separaron, jadeando muy levemente en busca de aire. Quería sentir aquella increíble sensación otra vez, por lo que, en un rápido movimiento, beso nuevamente a Rei. Sorprendiéndola ligeramente, aunque no dudo y lo correspondió.

-*No puedo evitarlo, me gusta esto, me gustan sus labios. No se si es por que come pocky todo el tiempo, pero, sus labios tienen un gusto dulce a fresa...*

Era un completo inexperto en esto, Rei también lo era hasta cierto punto. Nunca hubo realmente, algún tipo de amor completamente real en su relación. Por lo que, besos y ese tipo de acciones amorosas, eran bastante raras para ella. Solo sexo, sexo sin prácticamente amor. Solo hubo sexo con la esperanza de tener un hijo fuerte, realmente no le importo el sexo con su esposo, no lo disfruto. Nunca le disgusto, porque lo hicieron solo cuatro veces, y de ahí tuvo a sus hermosos niños.

-*Esto, es malo, Izuku es solo un niño...*

Uso su lengua, estrellándola con los labios del peliverde. Por instinto de su propio cuerpo, permitió que sus labios se abrieran, dejando que la lengua de la peli blanca entrase en su boca.

-*Si se que todo esto no estaba bien, ¿Por qué no me detengo?... *

No sabia si lo hacia bien, si a ella le incomodaba, solo se dejo llevar. Usando también su lengua, jugo con la de ella, era raro, pero le agrado.

Mis llamas no te lastimaran.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora