Entre el cielo e infierno

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CAPÍTULO 6


Pov por Rose

Demetri me dejo en la madrugada en la puerta de mi casa. Tuve que bajarme rápido del coche para que no se dieran cuenta los vecinos que venía en él. Mi cambio de ánimo era tan notorio que no podía esconderlo. Tampoco buscaba hacerlo, por eso a la hora del desayuno mi madre no perdió tiempo para preguntar:

¿Dónde estuviste anoche?

Mis hermanos me miraron con expectativa, ellos también querían saber, pero ninguno se atrevía a preguntar de forma tan directa como lo haría ella.

—Estaba conmigo, Sra. Anne.

Y Rogelio, mintió sin que se lo pidiera.

—Te quitare el plato de comida si vuelves a mentir por Rose.

Rodé mis ojos. Cuando tenía que ser rápido en las mentiras el cerebro no le daba, ahora que no estaba necesitando su ayuda, mete la cuchara hasta en la sopa.

—Mamá solo fue a dar una vuelta con unos amigos.

—Ahora tendré que quitarte el plato a ti por mentir. No me creas estúpida, Rose. Tú eres el ser más asocial y antipático que he podido conocer. Tu circulo se limita a Mónica y Natasha, ¿tienes más amistades aparte de ellas?

—Hace tiempo que Nat no me escribe —Recordé la última vez que me escribo—. Mónica está perdida, como siempre.

—Bien, cuando decidas decirme la verdad y estes abierta a una conversación fluida, te escucharé. —Tomo asiento una de las sillas de plástico y comenzó a comer su tostada—. Hoy iré con tus hermanos a la iglesia, ustedes dos deberían venir también.

Rogelio me miro con aquella expresión de horror y aburrimiento, así que tuve que intervenir.

—La iglesia se estremecería con solo colocar un pie allí. Así que creo que Rog y yo pasamos de ello.

—El padre Rafael dará la misa hoy, podrían venir —Sugiero mi hermana que no le molestaba ir con mi madre a cuanto evento hicieran en la iglesia.

—Ya mi hermana lo dijo, la iglesia se incendiaria con solo ver que pasara ¡Es una pecadora!

—¡Andrés, no digas eso! —Mi madre reprendió a mi hermano menor—. En algo estoy de acuerdo, ambos deben acercarse más a Dios.

—¿Entonces las personas que no van a la iglesia están más lejos de alcanzar el paraíso?

—Pues bueno...

—Relacionas la visita a la iglesia con la cercanía de Dios. Eso me deja ver que el Dios, del que tanto buscas estar cerca, es un Dios que discrimina y no ama.

—¡Rose!

—Espera, que aún no termino. Esa comparación que haces es la percepción del ser humano y la unimos a la creencia de Dios, pero ¿Quién sabe lo que en realidad piensa Dios? Ninguno de nosotros tenemos la espiritualidad suficiente para escucharlo o estar delante de él. Es más, el día en que mueras, no iras al cielo.

Anne se quedó sin palabras, sus ojos me miraron con una chispa de horror buscando que una luz divina aclarara mis pensamientos y me arrepintiera de cada palabras que había dicho. Yo, no me arrepentiría de nada.

—Mi hermana se volvió loca —Dijo Andrés burlándose—. Pecadora.

—Cállate. —Lo golpeo Athena.

Before AetérnumDonde viven las historias. Descúbrelo ahora