Siempre y cuando estemos juntos (EN EDICIÓN)

2

Ginny y Luna estaban con ella mientras la señora Weasley y su madre cuidaban de Margareth, y el señor Weasley y su padre buscaban a Harry en todos los bares. Había perdido al bebé por mal formación. Margareth sólo sabía que su mami estaba mal porque el bebé estaba enfermito...era tan inocente.

—No se que decirte, Mione...— Dijo Ginny acariciando la mano de su amiga—, espero que Harry se lo tome bien...

—No seas tonta, Ginny— calló Hermione mirando el techo blanco del hospital—, Harry no lo tomará bien y beberá de nuevo.

Ginny apretó los labios y miró a Luna en busca de ayuda.

—¿Quieres que te traiga a Meggie un rato, Hermione?— preguntó Luna igual de soñadora que siempre.

Hermione dio una especie de gemido en forma de «Sí», dándole suficiente a Luna para buscar a la niña pelirroja de ojos azules.

—¿Cuando crees que...?— Preguntó Ginny, buscando las palabras suficientes para decirle la verdad a su amiga.

—¿Le diré a Meggie que me separaré de su padre?— Concluyó Hermione mirando el techo—..., No lo sé, Ginny, pero es que es tan inocente y frágil que me dan ganas de que siga en ese mundo hasta que tenga noventa años...

—Los críos crecen, Hermione— Dijo suavemente Ginny—, Margareth no tardará en darse cuenta de lo que Harry hace, o en qué pasa con sus hermanos. Por desgracia, heredó tu cerebro.

Hermione no respondió. En cierta parte, Ginny tenía razón: Margareth no tardaría en abrir los ojos. Tal vez era igual a su padre físicamente, pero era igual a Hermione en pensamiento y actitud. Mientras Ginny acomodaba las almohadas de Hermione, Luna llegó con Margareth delante suyo; la niña corrió hasta la cama de su madre y la abrazó como pudo.

—Mami...— sollozó sobre el pecho de Hermione.

—Todo está bien, Meg— Mintió Hermione acariciando el pelo de su hija—. Todo está bien...

«Mentirosa», pensó viendo cómo Ginny miraba a Margareth «Mi hija jamás sabrá quién es su padre, mucho menos que me separaré de su padrastro».

Si bien Margareth no era hija de Harry, él siempre había estado para ellas dos, y más aún cuando Ronald la abandonó en el altar y se enteró que estaba embarazada apenas un mes después. Harry y el resto de los Weasley y amigos de Hermione la aceptaron sin problemas, pero Ginny fue la mas problemática  porque Harry se enamoró de Hermione y la dejó mucho antes de proponerle matrimonio. A pesar de que Ginny y Hermione no tenían la misma relación de antes, Ginny estaba siempre para apoyarlas, sólo por su sobrina Margareth. Hermione nunca eliminó la posibilidad de que los Weasley solo aceptaban su relación con Harry porque Margareth Weasley estaba de por medio.

—¿El bebé está bien, mami?— preguntó inocentemente posando su pequeña mano en el vientre plano de Hermione.

—No, mi amor— Dijo Hermione, tratando de contener las lágrimas para que Margareth no sufriera por su dolor—, los doctores dijeron que iría a dormir mucho, mucho tiempo hasta que esté en con tu otro hermano.

Margareth levantó la cabeza y miró a Hermione seria,¿Por qué tenía que ser tan malditamente inteligente? ¿No podía ser parecida a ella físicamente, pero igual a Ronald en pensamiento y actitud?

—Ya sé dónde están mis hermanitos, mami— Dijo después de ver a Hermione a los ojos.

Hermione temió lo peor, solo tenía cinco años...era demasiado joven para saber la verdad. Pero, para sorpresa suya, Margareth sonrió con tristeza.

—Están con Merlín y Dios, aprendiendo a hacer magia y protegiéndonos— Dijo.

«Por los pelos...», pensó Hermione asintiendo.