Capítulo 24

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Sábado por la tarde y la reciente pareja se dirigía a la playa. Esta vez, habían decidido ir solos, es por eso que fueron a ella a un horario cercano al atardecer.

La playa mulgogi no era una muy famosa ni conocida, no tenía personal que ayude a limpiarla o personas que ofrescan bebidas o comida, por eso mismo era una playa limpia a pesar de no tener encargados en su limpieza.

Yeonjun y Soobin se adentraron a ella con los pies descalzos, había una pocas personas a lo lejos ya que ellos, entraron por una zona alejada de la turística, la zona cerca de la cueva.

—Soobin vamos, eres muy lento.

Lo único que llevaban consigo era una toalla y un cambio de ropa, para Yeonjun irían a nadar y jugar en la playa pero para Soobin, irían a comprobar si es verdad lo que el libro decía.

Había descubierto también por qué el poco apetito de Yeonjun cuando recientemente se convirtió en humano y por qué ahora parecía tener el apetito de una persona adulta. Según el libro, el estómago de los tritones/sirenas era pequeño por lo que al convertirse en un ser terrestre no sólo sus piernas se transformaban, si no que su cuerpo entero ejercía cambios como el crecimiento de estómago, el que puedan sentir los cambios de temperatura, entre otras cosas.

Yeonjun jalaba a Soobin hacia el mar, el menor había dejado con antelación sus cosas en la cueva porque al parecer, nadie había visto o explorado esta.

Yeonjun traía puesto una camiseta del mismo color que su cabello y unos shorts negros, Soobin tenía una camisa blanca y unos shorts rojos, algo simple pues esas prendas estarían húmedas más tarde.

Yeonjun fue el primero en tocar el líquido salado, iba a adentrarse más a este de no ser por la mano de Soobin en su muñeca.

—Yeonjun espera, recuerda que ya no eres un tritón, ya no puedes respirar bajo el agua.

Había olvidado ese pequeño detalle, formó una pequeña O con sus labios recordando que perdió su habilidad, asintió para confirmar que no intentaría respirar bajo el mar.

Se sumergió hasta que el agua llegase a sus rodillas, estaba fría y eso causó que suelte un suspiro. Soobin le seguía por detrás imitando la acción de Yeonjun cuando sintió la baja temperatura del mar.

—No me alejaré mucho, no se nadar ¿tu puedes?

Tal vez parecería una pregunta torpe, Yeonjun jamás había nadado con sus piernas por lo que por obvias razones no debería saber nadar, sin embargo, el libro decía que al transformarse no perderían la contumbre de nadar y la adaptarían a sus extremidades inferiores.

—Eso creo—avanzó más hasta que el agua llegó a su mentón y usó sus piernas moviendolas de adelante para atrás para no caer hasta las profundidades, al parecer si sabía nadar. Tomó un bocado de aire y Yeonjun desapareció de la vista de Soobin. Realmente se veía feliz con la simple sensación de tocar el agua de nuevo.

—Yeonjun...—el mayor no salía a la superficie, llevaba un rato dentro del mar—Yeonjun no me asustes ¿donde estas?

El pelirosa salió del agua en frente de Soobin asustandolo—aquí estoy, no te preocupes, no me voy a ahogar—besó sus labios rápidamente.

Soobin seguía cerca de la orilla con la diferencia de que estaba sentado en el agua mojando sus shorts y una parte de su camisa, Yeonjun parecía un profecional nadando y buseando y es que vamos, claro que lo era, a nadando toda su vida. El sol bajaba cada vez más, el agua y el clima se hacían un poco más frías, las familias y personas fueron recogiendo sus pertenencias para al final, abandonar la playa dejando a dos jóvenes en el mar solos.

Merman | Soojun Donde viven las historias. Descúbrelo ahora