Núm 8 de la trilogía de Núm.8- Primera parte.

Cap 19

Capítulo 19: La esperanza es lo último que se pierde

Ahora tenía más dudas que antes al ver a mi enemiga. ¿Por qué tenía mi aspecto? ¿O cuál es su historia? ¿Qué poderes tiene? ¿Por qué quería controlar todas las dimensiones? Etc. Me quedé mirándola, intentando analizarla. Whisp, puso las manos a la altura de su cintura y de ellas salió una especie de humo negro. Cuando hizo eso, la parte esclerótica del ojo se volvió negra, su iris brillaba de color rojo granate. El suelo se empezó a llenar de sombras hasta que tomaron apariencia y salieron del suelo con volumen.

- Ch-chicos... -dije con miedo en la voz.

- Os presento a mi propio ejército, los he ido coleccionando en cada dimensión. -dijo Whisp como si se tratasen de figuras coleccionables. -Por cierto, grandes guerreros que merecen la pena.

- ¡Eres un monstruo! -la grité.

- Por lo menos yo no los maté. -sonrió.

Wow, menudo ataque verbal. ¡Auch! Ahí me dio en el blanco, porque yo maté sin querer, al estar descontrolada. Cuando dijo eso me quedé callada mirando a mis hermanos que bajaron la mirada.

- No me provoques -dije señalándole con el dedo índice.

- Aww, que mona. ¿Por qué crees que lo hago? -respondió Whisp levantando una ceja.

Definitivamente cuando quiero puedo llegar a ser muy tonta. Estaba utilizando la misma táctica que Ruby, provocarme para que me descontrole. Respiré hondo y miré a las sombras que estaban preparadas para atacar. Había un poco de todo, elfos, gigantes, hadas, demonios... mucha variedad, pero todos eran guerreros. Whisp, levantó la mano derecha para dar una señal a su ejército.

- ¡Ahora! -gritó extendiendo el brazo hacia delante que anteriormente tenía doblado, para señalarnos.

El ejército de sombras empezó a gritar y a cargar contra nosotros. Los soldados de la comisión empezaron a disparar, pero traspasaban las balas las sombras. Era inútil dispararlas, eran... invencibles. Es como intentar tocar a un fantasma, lo mismo. Ahí me dije a mi misma que estábamos perdidos, no podíamos luchar contra ellos. Aunque con magia se pude hacer algo, digo yo. Me concentré y activé mis poderes, tenía los ojos rojos y la energía corría por mi interior. El resto de los chicos también se prepararon como pudieron, Vanya se quedó detrás de todos sin saber que hacer. Me elevé en el aire con la energía roja, que ya os describí, y volé por encima del ejército arrasando con todos los que podía. Cinco fue teletransportándose como pudo desarmando a las sombras. Diego al no poder lanzar sus cuchillos, fue esquivando los ataques del enemigo y desarmándolos también. Alison no tuvo ningún problema, pudo utilizar su poder perfectamente. Klaus pues... no pudo hacer gran cosa, se encargó de recoger las armas que Diego le lanzaba para que se defendiese. Luther noqueó a varios y estropeó el arma de algunos guerreros sombra. Los soldados de la comisión estaban muertos la mayoría, no podía defenderse de ellos. Cuando vi que todos mis hermanos estaban a salvo y lo tenían bajo control, me desvié y me dirigí hacia donde estaba Whisp. Claramente había que acabar con la cabecilla del grupo para poder derrotar a las fuerzas oscuras del todo. Whisp, parecía esperarme. Fui volando hacia ella, la agarré del cuello y la choqué con la pared de la comisión. Whisp, volvió a reír divertida por el espectáculo que ella misma había montado.

- ¿Por qué haces esto? -la pregunté enfadada.

- Eso no es de tu incumbencia, de hecho, te daría igual. Lo único que tienes que hacer es superarme.

Levantó la mano y lo acercó muy cerca de mi cabeza, movió los dedos desprendiendo el mismo humo negro y brillante. Utilizó magia negra, estaba manipulando mi mente. En ese instante, me metió una alucinación en la cabeza. La solté el cuello inmersa en la visión.