Ame por fin decidió madurar, el bosque ya no se encontraba en peligro así que decidió ir a visitar a su mamá que justo iba saliendo para visitar a Yuki, ya bien vestidos van a la ciudad, pero pasan por un supermercado para comprar algunas cosas para...
Un nuevo día comenzaba, me levante tan rápido que me aturdí, desayune, hice mis necesidades mañaneras y ya cambiada tome la bicicleta y fui a la florería, todavía era temprano y la verdad ayer no quedamos en vernos a una hora especifica, solo esperaba que el chico fuera a la tienda pronto, la semana pasada le había comentado que los sábados y domingos trabajo desde la mañana todo el día ya que esos días a las personas se les da por ir a visitar a sus familiares, no hace falta ser super inteligente para darse cuenta que el papá de Ame esta... bueno, ustedes saben, me gustaría preguntarle más pero creo que es mejor así.
Fuera de la tienda se encontraba el varón sentado en la entrada descansando, me disculpe por hacerlo esperar y lo invite a subir al vehículo, luego podría abrir la tienda, se notaba que él no era de levantarse temprano, se sentó en la parte de atrás y se recargo en mi espalda, yo sonreí y empecé a pedalear, la casa no quedaba lejos, era a solo dos cuadras en la misma calle. Fuera de la casa, me detuve y le pedí a mi acompañante que bajara de la bicicleta, aun adormilado el hizo caso a mis palabras, estacione la bici en la entrada y con las llaves que se me fueron entregadas abrí el lugar, el lugar estaba limpio. Suspiré con nostalgia al recordar que a Hitomi le encantaba la limpieza, Ame camino hasta la sala donde se recostó en el sofá grande que había en la casa, inspeccione el lugar mientras anotaba en una libretita, algo que faltara en la casa, si es que hacia falta arreglar algo, algunas cosas que podría vender, etc... la casa se conformaba de una sala, un baño grande con tina y dos lavabos, una habitación grande, una habitación pequeña, la cocina, un patio mediano donde había un almacén para las cosas de limpieza y jardinería, además de las bellas flores que Hitomi cuidaba, el comedor también era la sala... algunas partes de la casa necesitaban limpieza y arreglo.
Luego de revisar todo de pies a cabeza y anotar lo necesario, volví hasta la sala donde estaba mi acompañante durmiendo... de seguro se levanto temprano para nada, lo mejor sería dejarlo dormir.
-Oye Ame...- él me respondió con un pequeño gruñido -iré a la tienda, ya necesito abrir si quieres puedes quedarte a dormir pero si quieres puedes ir a la habitación pequeña, allí la cama ya esta hecha y esta limpia, allí dormía el hijo de Hitomi, pero puedes ocuparla, cuando estés bien despierto puedes ir a trabajar, mira esta es la llave de la casa- el abrió un poco su ojo derecho mientras se levantaba para ir al cuarto y observo la llave -te la entregó para que cuando salgas cierres bien- el tomó la llave y la guardó en el bolsillo de su short y se encaminó al cuarto a dormir, yo salí de la casa y con la bicicleta volví hasta el local, limpie un poco y coloque el cartel de abierto.
POV Ame
Luego de que ___ me dejará seguir durmiendo en la casa, quedé en un sueño profundo... estaba yo corriendo en mi forma lobo corriendo por un campo de flores, y ella era mi destino, se encontraba lejos y por eso corría, estaba cerca de llegar cuando el sonido de la puerta me despertó, no fue exactamente el sonido, sino el olor... ese no era el olor que emanaba la chica que intentaba conquistar, luego del sonido dos voces se escucharon.
-Genial, esta abierto... como se le ocurre! soy su hijo! este lugar y esa maldita tienda deberían ser míos! sabes cuanto hubiese ganado si los vendía?! pero se lo dio todo a esa maldita mocosa... ni siquiera es de la familia- comentó una voz masculina que no conocía, pero el olor de la cama era similar al del intruso así que según las palabras anteriores, el debe ser el hijo de la anciana -pues si yo no tengo este lugar nadie lo tendrá! esa muchacha no ganará nada si la casa esta destruida-
-E-espera amor! no vayas a hacer ninguna locura!- una voz femenina y un aroma a cerezas con un sentimiento de miedo inundo mi olfato bien desarrollado, todavía somnoliento me levante y salí de la habitación, haciendo ruido con la puerta para que sepan que estaba aquí, ahora este sería mi territorio y ellos lo estaban invadiendo. Me dirigí a la sala donde el hombre tenía un palo largo en mano, creo que lo llamaban bate y veía hacia mi dirección con enojo, todo estaba en silencio hasta que la chica habló -si vez amor? hay alguien en la casa, lo lamento mucho ya nos íbamos- ella se reverencio e intento tomar el brazo de su esposo pero este se negó esquivando el agarre. La mujer empezó a llorar, estaba muy alterada... momento... eso que huelo es una criatura? pero de donde viene?... mi mirada se poso en la chica, me acerque a ella y me agache frente a su estomago, coloque mi oído en su vientre y definitivamente hay algo allí.
-Esta preñada?- pregunté ignorando al hombre que me miraba atento, luego su vista fue dirigida a la mujer, estaba sorprendido, ella se tomo el vientre y asintió, mientras se tranquilizaba, el señor dejo caer el palo y se acerco a la joven para abrazarla, yo me alejé un poco para darles su espacio.
-Por que no me lo dijiste?- preguntó desconcertado.
-Yo... ya no quiero estar contigo- el señor deshizo el abrazo y la tomo de los hombros para verla a los ojos -voy a irme a casa de mis padres, ya no puedo estar más contigo, por mi bien y por el de mi hijo, eres un desgraciado y definitivamente la peor persona que conocí en mi vida!- la chica se liberó y corrió afuera de la casa, mientras el otro solo estaba en su lugar viendo a la puerta abierta en silencio. Vaya... eso fue inesperado, el señor apretó fuertemente los puños y se fue corriendo tras la chica.
Observe el reloj colgado en la pared... las 10:27... ___ debería estar trabajando, y no creo que esa pareja vuelva. Revise la casa mientras me restregaba por algunas paredes para dejar mi olor marcando mi territorio, el lugar era bonito y espacioso, fui al baño y luego salí de la vivienda y cerré la puerta con la llave, mire a los alrededores, no me acordaba como era el camino de vuelta a la tienda y había tantos olores que no podía ubicarme... Podría irme y perderme, o podría quedarme aquí hasta que ___ venga... Ingrese nuevamente en la casa, y me dirigí hasta el patio, el pasto todavía tenia roció por las lluvias de verano y olía a humedad.
Como sería tener cachorros? y sin darme cuenta me quedé dormido.
POV ___
Ya era el medio día y hora de almorzar y Ame no había venido, puse el cartel de que salí a comer y me encaminé a la casa de H... cierto... ahora es mi casa, cuando llegue lo busque en la habitación pero no estaba, busque por la casa pero no estaba, me asomé por una ventana y lo vi recostado en el césped del patio, me acerque hasta el y lo llame por su nombre, el me extendió su mano, inocentemente pensé que era para ayudarlo a levantarse pero el me tiró sobre el y me aprisiono con un abrazo y empezó a dar vueltas por el lugar, hace tiempo no me divertía así, reí por su comportamiento de niño chiquito, cuando dejamos de girar yo estaba encima de él.
-Tus cordones están desamarrados- me dijo en un susurro, yo regresé a ver mis zapatos y tenía razón, que bueno que no me tropecé.
-jaja lo siento ya sabes que soy torpe- me faltaba el aire de tanto reír, el sonrío debajo de mi, nos quedamos viendo un rato a los ojos en silencio, pero como si un impulso fuera me lancé hasta sus labios para besarlo lentamente.
-Sabes? tu sacas un yo diferente- comentó luego de corresponder a mi beso y separarnos por falta de aire.
1364 palabras
Más o menos así es el cuarto del hijo de Hitomi, pero sin la television y computadora, pero todos los libros y reproductor de música allí. ヾ(￣▽￣) Bye~Bye~
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