Gracias al destino (niall y tu)

9

Ya en casa ayudé con los preparativos de la cena, cuando estuvo todo listo subí a mi habitación. Me bañé, me vestí y me arreglé. No estaba lista cuando alguien llamó a mi puerta.

- Hija - susurró mi padre - Niall está acá.

- Ok, gracias.

- Baja cuando estés lista, te estamos esperando - dijo mientras se marchaba.

Una vez que estuve lista bajé al comedor, vi sus miradas. Niall tenía una mirada de dulzura y sorpresa y mis padres de puro orgullo.

- Hola, _______ - dijo tímidamente Niall.

- Niall! - dije mientras terminaba de descender por las escaleras.

Se sintió como la primera vez que nos vimos, fue muy lindo, además, mi madre había puesto una música instrumental de fondo, la cual tenía el volumen perfecto, bajo, pero se hacía notar.

Al terminar de bajar, Niall y yo nos abrazamos, mi papá luego nos invitó a sentarnos en la mesa. Ya allí hablamos un montón, a mi padre le cayó bien, eso creo.

Luego de la cena, cuando ya estábamos hablando todos, Niall se aclaró la garganta.

- Sr. Stefan - inició Niall - Yo antes era un simple chico de último año; frío, un tanto sin corazón. Pero conocí a su hija, de manera muy peculiar, por cierto - me miró y me dedicó una sonrisa muy tierna, luego volvió a ver a mi papá - Yo la quiero mucho, porque me ha alegrado. Pero la quiero como algo más que una amiga. Y por eso le quiero decir esto frente a su familia. Amo a _______ Rodríguez y le pido permiso para ser su novio, porque estoy seguro que la podré hacer feliz - concluyó, esperanzado.

Mis mejillas se tornaron color rojo intenso, quería morir de la pena; pero esa pena tierna. Lo quería mucho.

- Oh, Niall - dijo mi padre - Lo que has dicho ha sido bastante sincero, parece. Espero que puedas cumplir con lo dicho - me miró y me sonrió - Adelante, hijo, tienes mi permiso.

- Gracias, señor.

En eso a mi mamá se le corrió una lágrima, fue a buscar un vino y brindamos. Luego de un rato subimos a mi habitación.

- Ay Horan, estás loco - dije entre risas.

- Sí, pero loco por ti - dijo mientras acariciaba juguetonamente mi cabello.

- Ya somos novios oficiales, no?

- No, aun no - dijo él - Todavía faltan mis padres, mañana.

- Lo bueno es que no tendré que hablar.

- Sí, claro - dijo él antes de romper en carcajadas.

La pasamos entre juegos y caricias hasta que a las 9 pm. Vinieron por él, se despidió con un beso muy tierno. Al irse mis papás me hablaron.

- Hija - dijo mi madre - Él roza la perfección, estoy orgullosa.

- Yo también _______, yo también - afirmó mi padre.

- Gracias, no saben cuando aprecio su apoyo, los amo.

Subí a mi habitación y me preparé para dormir, cuando ya estaba en mi cama entró mi mamá al cuarto.

- _______? - preguntó ella sentándose a mi lado.

- Si, mamá?

- Hija, mañana tu padre y yo debemos ir en un corto viaje a Brasil. Regresaremos el domingo - estaba acostumbrada a estos viajes de negocios, cuando pequeña iba con ellos, pero ya más grande prefería quedarme en casa.

- Ok, mamá - dije mientras le sonreía - Está bien.

- Sí, pero como ahora tienes novio la cosa es diferente. No nos decepciones, por favor - dijo mientras me daba un beso en la frente - Cuídate hija, nos vamos a las 4 am. Te amo.

- Te amo mamá, buenas noches.

A la mañana siguiente desperté y efectivamente no había nadie en la casa. Desayuné tranquilamente y luego procedí a darme un baño. Luego quise prender el televisor pero sonó el teléfono. Fui a contestar.

- Si? - dije.

- Amor! Buenos días. Cómo amaneciste?

- Bien, muy bien - dije sonando convincente - Y tu?

- Genial. Te pasamos buscando a las 2, te parece?

- Sí, claro. Niall tengo algo que decirte.

- Si, amor - contestó con preocupación en su voz.

- Mis papás se fueron, no llegarán hasta el domingo.

- Ah! - dijo, sentí alivio en su voz - Pues, mejor aún!

Hablamos un rato largo, como a las 12 comencé a arreglarme, tenía miedo de que algo saliera mal. Los padres de Niall, los Horan, tienen mucho dinero; es decir, sé que mi familia tiene algo de buen vivir, pero ellos era algo exorbitante. Yo vivía en una buena urbanización, pero ellos vivían en una colonia de irlandeses, todos extranjeros o descendientes. Intenté vestirme acorde, no muy casual pero tampoco muy formal.