Gracias al destino (niall y tu)

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El tiempo fue pasando rápidamente junto a él, ya llevábamos 5 meses juntos. Estábamos ya de vacaciones, el ya se había graduado del colegio y yo pasaría a 4to año. Nuestra relación era hermosa, realmente estábamos enamorados. Nuestras familias nos adoraban, era algo común que yo me quedara algunos fines de semana con los Horan y él algunos con los Rodríguez. Mis papás nos tenían plena confianza.

Un sábado por la mañana estaba en mi quinto sueño cuando llegó mi madre y me despertó, con la misma emoción que una pequeña en la mañana del 25 de diciembre.

- HIJA, HIJA, HIJA!!!!! - gritó ella con excesiva alegría.

- Mamá - dije en medio de un gruñido.

- _______! - dijo mientras me zarandeaba - Despiértate!!! DESPIÉRTATE!!

- Mamá! Que pasó?!

- Baja, ya! - dijo inmensa en su emoción.

Luego de haberme desperezado un poco y puesto más presentable, la obedecí, bajé a la sala y estaban allí mis padres.

- _______, tu mamá y yo queremos decirte algo - dijo con profunda voz mi papá.

- Si?

- Hija - dijo mi madre conteniendo la emoción - Estoy embarazada!

Apenas dijo eso se puso a brincar como loca. Un momento, esperen, mi mamá embarazada? Esperando otro hijo? Ella tiene 37 años, mi padre 40. Esto no lo podía creer.

- Es en serio? - dije un tanto confundida.

- Si, hija, completamente en serio - dijo mi padre con una gran sonrisa - No te llena de alegría?

Me detuve un segundo a pensar un poco más las cosas, no eran tan viejos para tener un hijo, además, siempre soñé con tener un hermanito menor. Logré entender la euforia de mis padres.

- Bueno - dije aun en shock - Será mi primer hermano.

- Si, hija! Si - dijo mi madre.

Luego de digerir un poco el asunto llamé a Niall y vino enseguida. Cuando le conté se puso muy emocionado y entabló charla con mi madre, tal y como si ese bebé fuese también su hermano. Al cabo de un rato subimos a mi habitación.

- Nialler?

- Si, _______?

- Te gustan los niños pequeños, verdad, bebé? - pregunté sumida en su dulzura.

- Si - contestó mientras sus ojos se llenaron de un hermoso brillo - Nunca tuve hermanos menores y los bebés me parecen hermosos. Muy bellos.

- Yo tampoco tuve chance de ser hermana mayor.

- Ahora sí - dijo mientras acariciaba mi mejilla.

- Nialler, cuando nos casemos cuantos bebés quieres tener? - pregunté tiernamente.

- Cuantos tú quieras, _______.

- Si por mi fuera, el equipo de fútbol completo, así jugarían - respondí sarcásticamente, Niall no aguantó la risa.

- Jajaja - dijo entre risas y más risas - Sería perfecto, amor.

Esa noche Niall la pasó en mi casa, nos acompañó mientras mis padres planeaban una fiesta para el anuncio del bebé. La cual sería cuanto antes posible, dentro de 2 semanas. Entre los invitados estaban, obviamente, los Horan. Al día siguiente, en la mañana hablé con Niall.

- Niall, me acompañas a comprarme el vestido - pregunté, necesitaba un vestido para la fiesta, me apetecía comprarlo hoy.

- Sí, amor - respondió amablemente - Pero vamos en mi carro.

- Está bien.

Partimos rumbo a las tiendas y compramos un hermoso vestido. Sería una fiesta en una isla del Caribe. Nuestras familias se alojarían en el mismo hotel, también partiríamos rumbo a la isla en el mismo avión. Nosotros llegaríamos a la localidad 2 días antes de la fiesta en sí. Hablamos del viaje en todo el camino y el paseo. Él insistió en pagar mi vestido, no es que me molestaba mucho, pero no me gustaba ser tan dependiente.