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Desde ese día no puedo resumir más que: cada día intercambiaba miradas con él, miradas que cada vez se volvían más largas, profundas, penetrantes e significativas. Un día me llené de valor y al pasar a su lado lo rocé y le dije "Upps" él simplemente me miró y me dedicó una sonrisa traviesa.

Una noche en el Facebook me dije a mi misma "Agrégalo" Si! Lo agregué y a los 10 minutos me aceptó la petición. Busque en la información su MSN, pero fue demasiado tarde, él me agregó primero, obviamente lo acepté. Luego yo le hablé.

- Hola - saludé tímidamente.

- Hola, quién eres?.

- Ejejeje, tú me agregaste - respondí a su interrogante.

- No, TÚ me agregaste primero al Facebook, luego me sentí tentado a agregarte al msn - escribió el vía msn.

- Bueno, cierto. Soy _______ Rodríguez, estudio en tu cole. Mucho gusto - dije yo, finalmente identificándome.

- Ah ok, yo soy Niall Horan, un placer conocerte. Cómo estás? - preguntó él, irónico cómo el no sabe que yo sé mucho más que su nombre.

- Bien, realmente bien. Y tu?

- Me alegro. Bien, igual que tu, supongo. Y en que año estudias?

- 3er, 3er año - respondí a su pregunta.

- Que bien, y eso que me agregaste? - una pregunta que realmente no sabía cómo responder.

- Bueno, tú sabes, curiosidad - respondí, rezando que se tragara mi respuesta.

- Tu sabes quién soy yo, verdad?

- Si no, no te hubiese agregado - un poco de sarcasmo tal vez rompería el hielo, no?

- Cierto - dijo él.

Ese día hablamos bastante, sobre nuestros gustos, cosas que hacemos, el día a día, básicamente de todo. Fue bastante agradable, debo decir. Las siguientes semanas seguimos hablando por mensajes de texto y msn, pero en el colegio nada, solo cruzábamos miradas. A veces me pregunto si realmente sabe quién soy yo o si me reconoce.

Un día, recuerdo que fue miércoles, estábamos de casualidad ambos cursos libres en el patio. Mientras caminaba por el patio con Mia vi a Niall hablando con la directora, más bien, recibiendo un regaño. Cuando un llamado me tomó por sorpresa.

- Srita. Rodríguez - me llamó la directora, quería morir. Cómo me iba a llamar frente a Niall, este no era mi día de suerte.

- Srita. Rodríguez! Venga acá - insistió. Recordé en ese instante que mi uniforme no estaba correctamente arreglado y tenía un lazo morado en el cabello, color que no estaba permitido.

- Rodríguez! Venga, la estoy llamando! - me dirigí hacia donde estaba ella, y Niall, respectivamente.

- Si, profesora?

- Rodríguez esa camisa no está bien arreglada - dijo ella con un tono acusador.

- Si profe, ya me la acomodo - le sonreí con cara de pocos amigos e hice ademán en irme.

- Si, y ese lazo no es de los colores permitidos. Ay Rodrígez, no me haga quitárselo!

- Tranquila profe, ya me lo quito - le dije.

- Está bien, Rodríguez - dijo finalmente.

Al irme miré a los ojos a Niall, me miraba como si ya me conociera, como si yo tuviera algo que ver con él, me fui arreglándome la camisa y quitándome mi lazo. Mia me estaba esperando a escasos 5 metros de mí, la miré y nos dimos vuelta, cuando supimos que estábamos lo suficientemente lejos de ellos dos hablamos.

- Viste como te veía?! - dijo mi mejor amiga.

- Si! Cómo si me conociera. Que bello Mia, que bello!

Fuimos a donde estaban nuestras amigas y les contamos el anterior accidente. Todas rieron y se sorprendieron bastante. Esa noche al llegar a casa, luego de hacer los deberes me conecté. Sorpresa.

- Ajá Rodríguez! Cuidado con el lazo! Ya sabe, si no se lo quita, la tenemos que expulsar del colegio! Jajajajaja, te vi mientras te regañaban - me habló él, al apenas yo conectarme.

- No, ni modo, jajajajaja, estabas ahí cuando me regañaron. Jajajaja, es que ya me tiene la vida hecha cuadritos con eso del uniforme - respondí yo, siguiéndole el tema.

- Ni me digas! A mí también, insiste en que mi cabello es teñido y quiere que me lo ponga oscuro. Que debo ir a pintármelo, jajaja.

- No! Horan, si te llegas a cambiar ese color, te mato - le dije a él, con un poco de picardía.

- Y si tú te llegas a quitar lazos como ese, te mato.

- Ok, es nuestro trato.

- Ok, lo es - acordó él - Mira _______, mi primo me está pidiendo la computadora. Hablamos luego, si?

- Si, tranquilo.

- Chao, Rodríguez - se despidió.

- Hasta luego, Horan.

Gracias al destino (niall y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora