Mi Salvador

PENULTIMO Capítulo 17

Sergio llamó desde el reclusorio para ver a Belén, ella estaba en dudas pero decidió ir a verlo para de una vez cerrar ese capítulo...

Belén: Hola.

Sergio: Hola hija (tomo su mano).

Belén: ¿Para qué querías verme? (retirando su mano).

Sergio: Para pedirte perdón, a ti y a tu mamá, se que no saldré de aquí y no quiero que me perdones para que vengan a verme sino para estar tranquilo yo, se que les hice mucho daño.

Belén: No dudo que estés arrepentido pero el que tiene que perdonarte es Dios, no quiero ser egoísta pero para mi es muy difícil perdonarte, le hiciste mucho daño a mi mamá, cada dia sufría porque creía que algún dia la ibas a matar, siempre eran insultos, golpes, la obligabas a estar contigo y yo no podía hacer nada y moría de nervios y angustia y a ti no te importaba, jamás te importo mi mamá y menos yo, nunca me trataste como a una hija (llorando) la dejabas destrozada y si tenía que ir a que la curen teníamos que mentir.

Sergio: Hija...

Belén: Hija nada, pero un día me cansé de mentir, quería salvar a mi mamá y llego ese ángel que tanto esperábamos, Pablo nos salvó y no solo eso, le dio el amor que mi mamá merecía y me dio ese lugar de hija, ahora y gracias a él se lo que es tener un papá y aunque te duela Pablo para mi es mi papá, lo siento Sergio pero no puedo seguir aquí.

Belén se fue y Sergio se quedó llorando, la vida se encargó de darle su merecido, encerrado y solo....

Fuera del reclusorio...

Pilar: ¿Como te fue hijita?

Belén: Abrazame mami.

Pilar: Ven princesa, todo estará bien.

Belén: Má, no pude perdonarlo ¿soy tan mala?

Pilar: No eres mala, estás dolida pero con el tiempo podrás perdonar aquí adentro (tocando su pecho).

Belén: Le dije que para mi, mi papá era Pablo.

Pilar: Es lo que sientes y no esta mal, te adoro y lo sabes.

Belén: Te amo má.

Más tarde en casa de Pablo...

Pablo: Hoy me fue muy bien, pude sentir las piernas.

Pilar: ¿De verdad? Mi amor.

Belén: Vas a poder caminar.

Pablo: Aún están muy débiles y no puedo pero sentirlas fue un gran avance.

Pilar: Pronto estarás de pie, estoy muy segura.

Belén: Antes de que nazca la bebé.

Pablo: Ojalá.

Recámara...

Pablo: Amor, ven.

Pilar: ¿Que pasa? (se recostó a su lado).

Pablo: Perdoname por todo este tiempo que te trate horrible.

Pilar: Ya te dije que no tienes que pedirme perdón y no me trataste horrible, solo no querías hablar, se bien lo que es que te traten mal y tú jamás lo hiciste.

Pablo: Te extrañe mucho.

Pilar: Y yo a ti no sabes cuanto.

Pablo se acercó a ella lentamente y la beso, sus lenguas enseguida comenzaron a jugar, extrañaban esos besos tan dulces y calientes a la vez, Pablo mordió el labio inferior de Pilar...

Pilar: Extrañe tanto tus besos y tus caricias.

Pablo: ¿Estas? (acariciando su muslo).

Pilar: Ajá.

Pablo: Pili, te deseo, quiero hacerte el amor pero mis piernas...

Pilar: Ssshhh (puso su dedo en los labios de Pablo) no digas nada (lo beso).

Pilar le quitó su única prenda que era el bóxer y luego ella su camisón y su panty quedando completamente desnuda, se puso encima de él a horcajadas y beso sus labios, sus besos viajaban por todo el cuerpo de Pablo, volvió al vientre, bajo más y se detuvo y lo miró, volvió a bajar y beso la erección de Pablo, lamiendo, succionando, besando y Pablo se estaba volviendo loco, se aferraba a las sábanas y apretando los labios para no gemir fuerte, Pilar paró se acomodó encima de él haciendo que entrara en ella y comenzó a mover sus caderas, Pablo tomó los senos en sus manos jugando con los pezones, sabia que eso le gustaba, Pilar cerró sus ojos y comenzó a gemir, bajo a besar sus labios y Pablo atrapó un pezon con su boca, Pilar se movía más y más sintiendo ese fuego llegar, Pablo le apretó el trasero y ya sentía venirse cuando Pilar comenzó a mover su cuerpo gracias a un hermoso orgasmo, se recostó a su lado y se quedaron abrazados recuperandose....

Pilar: Te necesitaba tanto.

Pablo: Y yo a ti, estuviste tan bien, donde estaba escondida esa Pili.

Pilar: Tú la desataste, contigo me atrevo a lo que sea y me encanto.

Pablo: A mi también y mucho (sonrió picaro) eres perfecta y amo verte así con esa pancita.

Pilar: Te amo (lo tomo del rostro).

Pablo: Y yo a ti princesa (la beso).