Capítulo 42

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-Es mejor que eso lo hablemos cuando estemos todas, créeme.-me contestó un poco tímida.

-¿Valee?-no soné muy convencida, la verdad.

-Es lo mejor.-dijo mirando hacia la pared, como si estuviera convenciendo se.

-Tranquila.-le dije cogiéndole de la mandíbula para que me mirara.-Lo entiendo.

-Agg. ¿Cómo puedes ser así?-pregunto cogiéndome la cara con sus dos manos.

-¿Así como?-me reí por su pregunta.

-Así de especial.-contesto acercándose más. Ni si quiera le conteste, uní mis labios con los suyos, sintiendo de nuevo como la adrenalina se prendía por todo mi cuerpo. Con un poco de temor y nerviosismo comencé a moverme, sus labios generaron una sonrisa perfecta.-No me vas ha hacer daño Chloe.-susurro apartándose un poco.-Así que, ven aquí anda.-nada más decirlo me arrastró más hacia ella, causándome una sonrisa. Sus labios comenzaron a moverse más rápido, me costaba un poco seguirle ante tanta velocidad.-Adoro tu timidez.-volvió a decir cogiéndome por las piernas y colocarme encima suya. Ni siquiera dije nada y volví a besarla mientras ponía mis manos acariciando su cuello. 

-Hey Chloe ya_.-la voz de Eva resonó por toda la habitación, nos separamos enseguida.-Oh, dios, lo siento.-dijo tapándose con una mano los ojos y dándonos la espalda. 

-Eva, ya esta tranquila.-le dijo Stefani mientras se levantaba de la cama. Nada más decirlo, se dio la vuelta mirándome con los ojos bien abiertos y mordiéndose los labios.

-¿Que pasa?-pregunté al ver que no iba ha hablar.

-Oh, es verdad.-contestó moviendo un poco su cabeza para centrarse.-Tus familia acaba de llegar.

-¿¡Qué!?-pregunté exaltada, levantándome de golpe de la cama.-¿Donde?

-En el despacho de Sarah, te están esperando.-me contestó Eva con una gran sonrisa. 

Sali corriendo de mi habitación, ni siquiera me importaba que aun tenía el pijama puesto. Baje las escaleras como pude y salí al exterior. En dos minutos ya me encontraba enfrente del despacho de Sarah, respire profundamente y abrí la puerta con nerviosismo por todo mi cuerpo.

Mis padres nada más verme se levantaron de las sillas, expectantes de mis siguientes movimientos. Cerca de ellos, mi hermana se encontraba apoyada en la mesa con los brazos cerrados y mi hermano, dios, como había cambiado.

-Ho_hola.-dije con la voz quebrada. Segundos después mis padre corriendo hacia a mi con los brazos bien abiertos, con alegría recibí ese abrazo tan esperado. 

-No puedo creer que estés aquí ahora mismo.-dijo mi madre sin separarse.

-Yo tampoco.-le dije aferrándome mas a ellos.

-Pero mírate, estas hermosa.-dijo mi padre con lagrimas al separase junto a mi madre. Los mire bien, parecía que no había pasado el tiempo para ellos, estaban exactamente igual.

-Gra_gracias.-mire por encima de ellos, mi hermana se encontraba expectante.-Ho_hola.-le dije acercándome a ella, pero ni siquiera me contesto, un fuerte abrazo lleno toto mi cuerpo. Sus lagrimas salían como si de una tormenta se hablase.

-No sabes lo que te he echado de menos.-dijo mientras se secaba las lagrimas. Por el universo, ella si que había cambiado, sus facciones estaban más marcadas, hasta había cambiado de look.

-Y yo a ti, Annie.-le dije limpiándome también las lagrimas.-¿Todavía sigues con el idiota de Tom?

-No.-me contesto riéndose.-Lo deje hace años.

Nada Es Lo Que PareceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora