Desde muy niño me atemoriza la oscuridad, la noche y muchos sitios que sin explicación me asustaban, les contaba a mis padres, mis profesores y amigos que algo de algunos lugares me daba un miedo inexplicable, mis padres, no hacían caso y con un abrazo o un beso querían calmar mis temores, mis amigos iban más allá, me trataban de gallina o de niño mimado.
Solo a los doce años puede ver a aquello que le temia, mas chico solo era un temor pero nunca llegue a ver o escuchar nada , pero a los doce en mi salón de clase planeamos una salida al campo, el bus nos llevaría hasta cierto punto, nosotros caminaremos unos 3 o cuatro kilómetros y el bus nos recogería al otro lado del camino que cruzaba un pequeño bosque, el lugar aunque apartado de la ciudad era muy visitado, por eso elegimos un miercoles, el dia que menos personas habían en el lugar, nuestros planes era pasar en el bosque la mayoría del dia y en la tarde salir al encuentro del bus, claro que iban tres profesores con nosotros.
A la hora de sentarnos almorzar, en un paraje muy lindo, hasta esa hora todo en mi había transcurrido en calma, pero aquel lugar me generaba un miedo indecible, mi piel se enfrió y la respirar me faltaba, cuando le fui a decir lo que me pasaba a un profesor, pude ver el horror, un hombre alto con ropa como de mecánico ahorcaba a varios niños, estos lloraban y suplican, mirándome con sus ojos llenos de temor, esperando que pudiera ayudarlos, no aguante mas aquel horrible episodio y según me cuentan me desmaye, desperté en la clínica mis padres muy preocupados.
Le conté a mis padres lo que había visto, cuando intentaron abrazarme les dije que no que esa no era la solución que algo me pasaba, mi padre al ver esta actitud se quedó pensativo y dijo que preguntaría a una persona que sabia del tema, tres días después mi padre llego con una señora a casa de una edad indescifrable, a ratos parecía una anciana y en otros una joven, me tomo ambas manos entre las de ella y sonriente con una sonrisa que hace que tu alma descanse, miro a mis padres y les dijo su hijo tiene un don, puede ver la maldad del mundo y de las personas aunque aun no sabe como usarlo yo puedo guiarlo en este sombrío mundo.
Mis padres se mostraron recelosos y yo quede mudo aunque lleno de temor sabia que la mujer tenia algo de razón, también la mujer vio la duda en mis padres, asi que les ofreció una prueba de ese don que tenia, pidió el teléfono prestado y llamo a alguien al parecer un policía, a los pocos minutos este llego a casa, la mujer explicó a mis padres que si estaban de acuerdo el señor que era un jefe de policía nos llevaría al bosque donde vi aquel tenebroso suceso y verían cual era mi don, si no encontraban nada, simplemente necesitaba un médico.
Mis padres llenos de dudas y viendo mi cara de preocupación aceptaron, fuimos al bosque donde vi aquello y al momento de. estar ahí pude ver de nuevo la escena, vi como aquel hombre los asesino y los enterró al lado de unas grandes piedras, mientras esto ocurría la mujer me abrazaba con cariño y me susurraba al oído todo estará bien, señale el lugar donde veía aquella escena y donde enterró sus pequeños cuerpos, el policía preparado con herramientas para excavar, dio unas cuantas paladas y encontró algunos huesos humanos, llamo por su radio, mis padres y yo nos fuimos del lugar, junto a la mujer, el policía esperaría a sus compañeros y a algunos médicos forenses.
En camino a casa la mujer les contó a mis padres y por ende yo escuché, ese era mi miedo, aquellos temores no eran mas que las visiones de aquella energía malvada, cada ser humano derrocha energía, sea buena, mala de felicidad o tristeza y eso era lo que yo podía sentir y ya en esta ocasión ver.
El policía nos contó que encontraron los cadáveres de seis niños, habían desaparecido en el transcurso de 4 años, con pruebas de ADN identificaron a cada uno e informaron a sus respectivas familias, la triste noticia, el policía estaba muy triste por no tener ni una pista del asesino, pero estaba en estas elucubraciones cuando se quedó mirando fijamente, me preguntó si yo le había visto la cara al hombre, le dije que si, trajo de la jefatura un gran libro y me enseño un millar de fotos después de tres días de creer que no estaba en las fichas de la policía, lo identifique, curiosamente era el mecánico donde la policía llevaba sus coches, el policía me propuso ir dentro de su coche y verlo desde dentro, solo para identificarlo en realidad, era el.
La policía se puso alerta pero no tenia una prueba para enjuiciarlo así que decidieron ponerle una trampa necesitaban un niño para que cayera, me ofrecí a ser el sebo, aunque mis padres no querían, yo no pensaba ceder.
Efectivamente el plan era que yo pasara en la tarde cuando el estuviera cerrando el negocio, así lo hicimos y efectivamente al verme solo y aquello tan solitario, me agarro a la fuerza y me entró en su camioneta, cuándo me tenia con sus manos pude sentir toda su maldad y veía a cada una de las personas que mato, no solo eran niños, también mujeres violadas y asesinadas, cuando la camioneta se encaminaba al sendero, tres coches de la policía nos detuvieron, lo acusaron de secuestro a un menor, esto en mi país puede dar hasta 10 años de cárcel, pero la policía quería más.
En las noches soñaba con el lo veía en su celda lleno de odio pero también de temor, un día llamo a su abogado y le dijo que confesaría sus crímenes que yo no lo dejaba en paz, todas mas noches lo visitaba dijo.
Confesó diez asesinatos y tres violaciónes fue condenado a pena de muerte de esto ya hace muchos años, yo aprendí a vivir con mi don de niño y adolescente me fue difícil manejarlo, pero de adulto lo uso para ayudar a las personas.
POSDATA :Yo se que es difícil de entender que pase algo asi pero yo lo vivo, día a día...
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