Menos mal

Capítulo 6.

Alessandra.

Han pasado dos meses desde aquel día que me quedé durmiendo en los brazos de Marcos. Y por si os preguntáis cómo nos despertamos, pues bueno un poco tímidos pero bueno ya hemos dormido varias juntos así que no pasa nada.
A ver, no penséis nada raro, cuando Anais tuvo que volver a Bilbao por el tema de su abuela, fueron esos dos meses, y como yo estaba sola, pues Marcos se ofreció a quedarse conmigo hasta que Anais viniera y yo pues como una persona inteligente acepté la propuesta. Hay veces que íbamos a su casa y otras a la mía y eso fortaleció nuestra amistad.

En esta semana tengo como un examen tipo de diseño, no sé si me entendéis a las personas que han entrado este año en las oficinas, nos hacen unos exámenes por si estamos preparados para seguir. Sandra nos lo tiene que hacer porque lleva ahí ya unos cuantos de años trabajando. Y tengo que estudiar varias cosas, esto me recuerda a cuando estaba en la universidad que fue el año pasado, todo el día estudiando, del cuarto al salón del salón al baño. Así todo el día.

@alessandrabianchi

Subo la historia en un ratito libre que me tomo de descanso y sigo estudiando. Al menos es algo que me gusta porque sino vaya tela. Estoy aquí con mis queridos decorados básicos, nótese la ironía, cuanto me tocan el brazo.

- Hola pequeña ¿estudiando? - pregunta Marcos mientras me da un beso en la frente.

- Ni te lo imaginas Marcos - digo estresada, mientras le abrazo.

- Ale ¿desde qué horas llevas estudiando? No me vayas a decir que hace poco porque sé que es mentira, sal de casa y da una vuelta para desestresarte.

- Pues no sé cuanto llevo aquí Marcos, esto me está superando un poquito y estoy muy agobiada. - Digo echándome sobre la mesa.

- Ven vámonos, necesitas salir de aquí y yo sé donde llevarte. - Propone y yo niego con la cabeza.

- No Marcos, porfi tengo que estudiar mucho.

- De eso nada, vete a cambiar y no acepto un no así que corre.

- Bueno vale, solo porque eres tú eh pero hay que volver pronto que tengo que seguir.

- que si pesada, corre ya que no quiero esperar. - Me dice mientras sale de mi habitación.

- Pero bueno y eso por la cara tonto.

- Te quiero pero venga que no tenemos todo el día. - Me grita.

- Que pesado que es - digo bajito.

- Te he escuchado Ale.

Al final me pongo unos vaqueros grisáceos, un jersey blanco y una chaqueta sin mangas negras. Cojo un bolso azul acolchado y voy hacia donde se encuentra Marcos.

- Ea, pues ya estoy - digo cuando llego al sofá donde se encuentra sentado.

- Pues perfecto vamos.