CAPÍTULO 1: "Reencuentro".

610 57 2
                                    

Pov. Narradora:
Era jueves, un día normal en la vida de Bakugou Katsuki. Su rutina era la misma de siempre: Levantarse, bañarse, vestirse, desayunar y cepillar sus dientes para irse al trabajo, y luego de salir de la oficina, quizá visitar al "pelos de incendio" y a la "ojos de mapache", quienes estaban casados y vivían bajo el mismo techo... Bakugou no tenía pareja y tampoco había alguien que le interesara, para él todos en el edificio eran iguales.
Salió de su apartamento, tomó sus llaves y se fue. No había nada fuera de lo habitual en la ciudad donde vivía, por lo que nunca se detenía siquiera a mirar a las personas que pasaban por ahí. Caminaba con las manos en los bolsillos, el ceño levemente fruncido y a paso tranquilo, pues siempre llegaba temprano y hasta con tiempo de sobra; era de los mejores en el lugar donde trabajaba y de los más atractivos, a pesar de que sabía sobre ello, no "aprovechaba" Para conseguir pareja o simplemente salir con alguien. Dentro de su trabajo no tenía amigos, su círculo se reducía al "bakusquad", pero su amigo más cercano era Kirishima, y aunque no lo admitía, era su mejor amigo y aliado.
Entró al edificio y mostró su tarjeta de acceso, una vez que el verificador sonó y dio el foco verde, el elevador se abrió y pudo ingresar.
Las horas se le hacían eternas, pero en cuanto acabó de revisar unos documentos que le había pedido su jefe, tomó su mochila y la colocó en su hombro. Salió y comenzó a caminar hacia un parque que estaba cerca de ahí, no había nada que atrajera su atención, hasta que escuchó una voz atrás de él.
—Hola Bakugou.— Al momento de escuchar, volteó a verla sorprendido. ¡Era ella!
—¿Na-Nagashi?
—Veo que me recuerdas, ¿cómo haz estado?— Preguntó con una ligera inclinación de cabeza, las manos en la espalda y una pequeña sonrisa se formaba en sus labios. Con la misma cálida voz de siempre.
Llevaba el cabello suelto a la altura del codo, una blusa blanca de botones y una falda que le quedaba poco arriba de las rodillas color azul marino, con zapatos de piso azul cielo.
Se mantuvieron así, mirándose por algunos segundos hasta que el rubio volvió a la realidad y desvío la mirada, con un leve sonrojo que quiso ocultar.

Pov. Bakugou:
Está igual de hermosa que desde la última vez. No ha cambiado nada físicamente, y veo que emocionalmente tampoco.

Pov. Narradora:
Bakugou se detuvo a ver sus ojos, esos ojos que tanto adoraba desde que la conoció. Llenos de inocencia y timidez, con un pequeño brillo que la hacía resaltar y verse el doble de bella de lo que era, hasta que ella dio un lindo parpadeo, para luego sentarse en la banca que tenían en frente y comenzar a hablar.
—¿Cómo te ha ido?— Dijo una vez que ya estaban los dos sentados.
—Bien. ¿Y a ti?— Intentaba sonar desinteresado.
—Igual, ¿tienes pareja?
—No.— No devolvió la pregunta por miedo. Tenía miedo de que su respuesta fuera en afirmación y le quitara las pocas ilusiones que le quedaban con ella en el sentido sentimental.
—Yo sí, desde hace un año.— Dijo tranquila, aunque no sabía que le había hecho sentir una punzada en el pecho al oír su respuesta. Pero lo que le intrigó un poco fue su expresión, pues normalmente cuando estás con alguien que amas sonríes ¿no?, pues no. Ella al inicio había formado una sonrisa diminuta y después había bajado la mirada.
—¿Pasa algo?— Volteó hacia ella con el ceño levemente fruncido. Su tono le decía que algo no estaba bien.
—Pues, verás... Es; un poco controlador. Le molesta que salga sin decirle antes o que esté con un hombre que no sea él.
—¿Y tú estás "bien" con eso?— Se había enojado un poco al escuchar su confesión, así que trató de disimular.
—Mmm... ¿Quieres hablar de otra cosa?— Se notaba a kilómetros que su objetivo era evitar el tema.
—¿E-Estás casada?— Sentía su corazón latir con fuerza, y se insultaba mentalmente por haber preguntado eso sabiendo que el resultado quizá podría lastimarlo, y hacerlo perder las esperanzas.
—... No. Tampoco estoy comprometida.
De manera inconsciente, dio un pequeño suspiro de alivio, aún le quedaba tiempo.
—¿Has hablado con el "bakusquad"?— Dijo un poco emocionada.
—Sí.
—¿Cómo han estado?, supe que Mina-chan y Kirishima-kun se casaron. ¿Es cierto?
—Sí, hace unos meses.
—¿Qué hay de Sero y Kaminari?
—Sero sigue siendo el de la sonrisa rara.
—¿Kaminari y Jirou-san siguen juntos?
—Ajá, desde segundo grado.
—Y...— Vio su teléfono y se alarmó un poco.— Amm... No quisiera dejarte, pero me tengo que ir. Masao me espera.— Dijo poniéndose de pie, lista para marcharse.
—Ajá, adiós.— Mencionó "sin interés".
—Te veo luego, ¿te parece aquí?
—Si si, ya vete.— Expresó con tono de fastidio.
Él se quedó ahí por algunos minutos más, deseaba pensar y reflexionar sobre sus sentimientos y sobre ella. ¿Le diría que estuvo enamorado, o se lo guardaría para sí mismo?

Jamás dejaré de amarte. [Bakugou x OC].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora