DESTINO (Hajime Iwaizumi x ti)

DESTRUCCIÓN.

NARRA HANAKO.

Miré a Ushiwaka, quién me miró fijamente.

Ushijima: ¿Por qué has venido? Estás interrumpiendo nuestro entrenamiento, Hanako.

Sentí como si me pegaran un hachazo, de pronto me faltaba la respiración.

Estaba siendo realmente cortante conmigo.

¿Acaso le he hecho algo malo?

El silencio reinó el gimnasio.

Hanako: ¿Qué... qué dices Wakatoshi?

Me quedé helada mientras le miraba, a pesar de tener tanto carácter, yo, en aquel momento, me había quedado sin palabras, frente a su mirada me sentía pequeña e insignificante.

Ushijima: Creo que he sido claro. (Dijo duramente)

De pronto una rabia inmensa se apoderó de mí.

Hanako: Bien, quédate tranquilo, no pienso volver a molestarte.

Y tal y como entré al gimnasio me retiré de él a paso acelerado ya que de mis ojos amenazaban con salir lágrimas de rabia.

Y entonces salieron, en cuanto salí de aquella escuela me eché a llorar, comencé a caminar aceleradamente por las calles mientras de mis ojos brotaban gruesas lágrimas, yo me las limpiaba, pero volvían a salir de nuevo de pronto la voz de alguien hizo que parara en seco mis pasos.

Iwaizumi: ¿Hanako-san? ¿Qué es lo que sucede? (Con tono de preocupación se acercó a mí)

Yo sin previo aviso me acerqué a él y le abracé, hundí mi cabeza en su cuello con la intención de cubrir mi rostro.

Los brazos de Iwaizumi de forma insegura rodearon mi espalda y dieron pequeñas caricias con la intención de relajarme.

Me encantaría poder deciros exactamente cuánto tiempo estuvimos así pero ni yo misma lo sé.

Cuando por fín estuve tranquila de nuevo, me separé de él lentamente.

Hanako: Dis-disculpa Iwaizumi... (Dije entre pequeños sollozos) creo que necesitaba de alguien conocido.

Iwaizumi: No te preocupes. ¿Quieres explicarme qué sucede?

Hanako: Wakatoshi... Eso pasa...

De repente, mi móvil empezó a vibrar.

Contesté.

Hanako: ¿Tendō?

Tendō: Han-Han... ¿Estás bien? Saliste volando del pabellón...

Hanako: Sí... Lo estoy ¿Por qué no iba a estarlo? Como si no conociera a Ushijima.

Tendō: Ushiwaka es así de tosco, me preocupaba que te hubiera afectado de más.

Hanako: No te preocupes, lo entiendo. (Traté de ponerle una voz alegre)

He dejado de entenderlo, en realidad.

Tendō: ¡Perfecto!~ ¡Espero verte pronto Han-Han!~

Hanako: Sí...

Entonces colgó.

Yo miré a Iwaizumi, quién hizo un gesto para que le seguirse.

Y lo hice.

Me llevó a una cafetería con aspecto acogedor y familiar.

Que con aquel clima frío daba una sensación cálida a cualquiera.

Hanako: Iwaizumi... No sé por dónde empezar a disculparme por... (Me cortó mientras yo hablaba)

Iwaizumi: No te disculpes, Hanako.
Ha debido de pasar algo malo y llorar sirve para sacar lo que llevas dentro.

No pude evitar sacarle una sonrisa.

Hanako: Es solo que no quisiera se una molestia.

Iwaizumi: Ni se te ocurra volver a decir eso Hanako, o empezaré a pensar que eres tonta con Tontooru. (Yo me reí)
Vaya, menos mal que aún te ríes (sonrió) pide lo que quieras Hanako, yo invito.