Introducción

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Su vida, como la de la mayoría de las personas, no era perfecta.

Y aún así, Sasuke no se quejaba, la aceptaba al fin y al cabo. Sobre todo tras el complicado divorcio de sus padres hace unos años atrás.

Aparentemente, lo peor ya había pasado. Las peleas, las tensiones, y las constantes angustias por aquel matrimonio inestable había finalizado tras la separación legal acordada entre sus progenitores.

Hoy en día, claro, su padre a penas los visitaba, sólo cuando se hacía un lugar en su ajetreada agenda, llamaba a sus hijos muy esporádicamente, limitándose simplemente a cumplir con la cuota alimentaria y demás obligaciones que debía mantener de acuerdo al divorcio; y su madre, por otro lado, ya se había recuperado anímicamente, salía con amigas, y había vuelto a enamorarse.

Hasta ahí estaba todo genial. A Sasuke le hacía feliz verla entusiasmada y radiante de alegría, que bien sabía se debía a ese nuevo hombre en su vida.

Su nombre es Minato Namikaze, viudo desde hace más de seis años y, también, padre de dos adolescentes.

¿Sus nombres? Naruto, de 15 años (su misma edad), y Menma, de 17.

Honestamente, desde que ambos presentaron formalmente a sus respectivos hijos, Sasuke no había llegado a congeniar con ellos de ninguna forma. Se había llevado una muy mala impresión de esos "idiotas" como los declaró en ese entonces. A su hermano mayor, Itachi, tampoco les agradaba del todo, pero por respeto a su madre, se esforzaba por aparentar frente a ellos. A él, en cambio, no le salía muy bien fingir "tolerancia" cuando en realidad sentía desagrado y molestia de sólo tenerles cerca.

Pero bueno, todo era soportable siempre y cuando los tuviera que ver de vez en cuando.

Sin embargo, nunca imaginó lo que iría a suceder tiempo más tarde...

Una tarde, cuando su madre volvió de una cita con su nueva pareja, le informó, emocionada hasta las lágrimas, que Minato le había propuesto matrimonio.

Esa noticia había sido como un muy fuerte y doloroso golpe directo al medio de su cara.

Porque aguantaba que fueran novios, pero no un matrimonio. Sabía lo que ello significaba: tendría que convivir con esa familia, y no sólo eso, sino que además deberá adaptarse a nuevas reglas que no tenía ni ganas de acatar.

Ni de broma veía esta situación como una forma de agrandar su círculo familiar, sino más bien como un gran problema a futuro.

Pero, por primera vez, su madre no daría el brazo a torcer frente a sus "caprichos adolescentes". Ella se enamoró del padre de esos chicos, y por ello aceptó casarse con él. Llevaban 1 año y medio siendo pareja y hace tan sólo 3 meses decidieron dar el siguiente paso.

Así que, le guste o no, Sasuke no podrá hacer nada para evitarlo.

Así como tampoco podrá impedir que su mundo se vuelva un completo caos desde que empiece a formar parte de los Namikaze de manera oficial. Lamentablemente, después de la celebración, tendrá que mudarse con ellos en la casa de Minato, por el hecho de ser más espaciosa y cómoda para la convivencia.

Sí, la poca estabilidad emocional que creía tener hasta ahora ya tenía fecha de caducidad.

Para su mala suerte, sus días empezarán a basarse en muchos conflictos familiares, incorrectos amoríos, desilusiones, profundas inseguridades, engaños, y sobre todo, reiterados dilemas que no sabrá ni cómo manejar.

Dilemma [AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora