Dilemma [AU]

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A penas estuvo fuera de la oficina de la Directora Tsunade, a quien ya había tenido el agrado de conocer recientemente en conjunto con su madre, cerró la puerta, y suspiró agobiado.

No pensó que tuviera que llevar a cabo una reunión con ella a penas llegara a la escuela. Pero bueno, al menos ya estaba libre de esa mujer que asustaba por momentos con la rudeza en su manera de hablar.

Sasuke traía puesto el uniforme característico de la institución, el cual su mamá le había comprado hace unos pocos días, que se basaba en una clásica camisa blanca de manga larga con el escudo correspondiente luciéndose sobre su pecho del lado izquierdo, una corbata en tono bordó, y un pantalón liso gris que realzaba bastante bien su figura (aunque, sinceramente, al Uchiha le quedaba perfecto cualquier atuendo).

En su otra escuela usaba un uniforme similar a éste, sólo que era de menor calidad y no tenía la obligación de llevar corbata. Aún así, tampoco es que le molestara mucho usarla pese a que le gustara más el estilo informal.

Como sea, la vestimenta era lo de menos, más le perturbaba el hecho de tener que pasar por este cambio escolar tan innecesario, en su opinión.

Las últimas semanas de vacaciones habían pasado demasiado rápido, y, con mucho pesar, no le quedó más opción que iniciar su primer día en esa nueva preparatoria.

Vaya pesadilla.

O bueno, quizás exageraba, pero en serio que no le hacía ninguna gracia pasar por esto. Es que, si bien había podido entenderse mejor con sus dos hermanastros este tiempo, no significaba que fuera a sentirse entusiasmado por tener que arrancar de cero en una escuela donde claramente no conocía a nadie (a excepción de los Namikaze, quienes a su vez ya tenían sus respectivos grupos de amigos), y donde se sentiría más solo que nunca. Había que tener en cuenta que Sasuke no se caracterizaba precisamente por tener facilidad en las relaciones sociales, eso era más que sabido, y es lo que más inseguridad le causaba. Ya podía imaginarse sentado solo en clase o con la compañía de alguien que no le dirigiría la palabra, almorzando a solas en una esquina alejada de la cafetería (lugar exclusivo para asociales y perdedores), siendo ignorado por todos al momento de armar equipos de estudio para alguna tarea en particular, y demás situaciones deprimentes que sólo le iban quitando todo ánimo de arrancar su jornada académica.

Vaya que iría a extrañar a sus amigos...de hecho, ya los venía echando de menos desde los días previos. En serio esperaba que no fueran a olvidarse de él y, con el tiempo, a dejar de hablarle. Aunque no lo manifestara, es lo que más miedo le daba...

Tratando de quitar toda negatividad de su mente para no dejarse influenciar de más por ese tipo de cosas, empezó a caminar por el pasillo que lo dirigiría a su salón de clases. Claro que la primera hora ya había arrancado hace unos pocos minutos, pero la Directora lo había interceptado de improviso en la entrada del Instituto para pedirle que la acompañara un momento a su oficina. La idea de la mujer era darle la bienvenida oficialmente y terminar de comentarle las últimas pautas que debía seguir al formar parte de ese establecimiento. Tsunade sabía de sobra, gracias a la entrevista de la otra vez, que el Uchiha era muy distinto a los hermanos Namikaze, así que no debía preocuparse; sin embargo, nunca estaba de más recordarle las reglas y pedirle, ante todo, respeto por los docentes y por sus compañeros.

Sasuke había sentido que todo ese discurso había sido absolutamente innecesario, pero considerando lo bueno, al menos le sirvió para retrasar un poco más su asistencia al salón. Si bien estaba ingresando a comienzo de semestre y no en la mitad, estaba seguro de que todos sus compañeros le irían a mirar como si fuera un bicho raro o algo así. Porque, como se sabe, carecía de carisma y de habilidad para ganarse el afecto de otros. Quizás eran sus frías expresiones o postura desinteresada, pero, por experiencia de años, justamente amistades era lo que NO le sobraba. Tuvo suerte de que sus amigos de hoy en día le hubieran dado una oportunidad en su momento...