V.e.i.n.t.i.c.i.n.c.o

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Además de que volví quise borrar algo y borre dos capas sin querer uwu sorry.

Bex.

Había llegado a la casa del papá de Kiana, mi hija vivía con su padre, yo venía todo el tiempo a estar con ella no es que fuera una mala madre de la cual se olvidaba de su bebé. Siempre venía a verla y siempre estuve y estoy presente en su vida.

Toque la puerta esperando a que me abran, Khea abrió y me sonrió mientras me abrazaba.

-Hola negra, pasa- entre a la casa de Khea sintiéndome bienvenida, pase gran parte de tiempo en esta casa y la sentía un hogar.

La verdad es que Khea y yo nos conocimos una noche en uno de sus shows, dos borrachos calientes y a III n forros dieron un mal resultado, un embarazo a temprana edad. Ninguno de los dos estaba listo para esto pero fue problema de ambos y los dos nos hicimos cargo de eso, no íbamos a dejar que nuestra beba tenga una vida sin alguno de sus dos padres.

Caminé hasta el living y dejé mi bolso en un sillón, me senté cansada por todo lo que estaba pasando últimamente.

-La princesa está dormida, pása a verla- me dijo mientras ponía la pava para tomar unos mates.

Estuvimos hablando un poco, siempre tuvimos esa confianza el uno al otro y se sentía lindo, además de H el era la segunda persona en el mundo en la que realmente confiaba.

-Ya no aguanto más, no quiero seguir más asi- dijo pasando sus manos por su cara.
Yo sabía que nuestra bebé nos mantuvo unidos en todo este transcurso juntos, una conexión única que tenía con Khea conmigo que solo era compartido por nuestra hija, pero yo no sentía lo mismo que hace tiempo atrás, yo amaba a alguien más.

-Ya sabes que nosotr...- quise continuar pero el no me dejó terminar.

-Sobre nosotros no Bex- tomo un mate y continuó -Hablo de nuestra hija, ya no puedo ocultarlo mas, no está bien esto que hacemos, son nuestros amigos- termino.

Sabía que no estaba bien, pero ambos cuando nos enteramos de mi embarazó recién estábamos comenzando nuestra carrera, el de cantante y yo de DJ, no estaba bien pero con todo eso mejor era mantenerlo en secreto.

-Se que no, pero estoy teniendo problema con Andres- recordé todo lo que está pasando y no es el mejor momento para contarle a nuestros amigos que teníamos una hija en común -Cuando lo resuelva lo hacemos- el me sonrió y me abrazo.

Hablamos un poco más, le conté todo lo que pasó en el boliche con Tomas y Andres, le conté todo, no tenía secretos con el y eso me gustaba, el también me contó que estaba en algo con alguien pero no me dijo quien es porque también estaba en pareja, no lo juzgue, claro que no.

Solo mi celular y era un mensaje de H diciendo que Tomas iba a pasar la noche conmigo por si Andres aparecía, no pude contestar que escuche como golpearon la puerta.

-¿Y vos qué carajos haces acá?- escuche la voz de Tomás, fui hasta la puerta, no estaba lista para todo esto aún.

-Tomas, te puedo expl...- lloriqueos me sacaron de mi burbuja -Ya vuelvo-

Fui hasta la pieza de Kiana, ya conocía esta casa como la palma de mi mano, cuando entro a la pieza de mi beba ya me estaba esperando en la cuna parada, cuando me ve me sonríe de oreja a oreja, la cargo en mis brazos y la empieza a mover para todos lados haciéndole avioncito.

-ma-ma- me dijo con su boquita linda, la miro y no podía creer lo grande que estaba, lo linda que era, la sostuve en mis brazos no sé cuánto tiempo, mirándola, si me dieran a elegir en tenerla o no, no cambiaría nada de esto, es lo mejor que me pasó en la vida. Se quedó dormida en mis brazos así que la deje en la cuna.

En la puerta estaba Tomás mirándome con los brazos cruzados, caminé a donde estaba el y cerré la puerta de mi bebé.

-Te voy a explicar todo, pero antes quiero un porro.

•Antes• C.R.ODonde viven las historias. Descúbrelo ahora