ENTRE TÚ Y YO (EN EDICIÓN)

33-FOGATA

-Estoy agotado...

Zhan se recostó sobre el gancho que sujetaba el carrito de compras y dejó salir un suspiro.

Habían estado practicando durante varios días y por fin tenían uno libre. El plan era acampar esa noche con una fogata y malvaviscos acompañados de su clásico chocolate caliente.

Pero, sus piernas y brazos le reclamaban el dolor del esfuerzo que prestaron a su dueño.

-Creo que necesito dormir un poco...

-¡Animos Zhan-ge! Será mi primera vez acampando después de tantos años-Yibo se acercó tomándolo de las caderas y le susurró con vos aterciopelada-...Y quiero hacerlo contigo en el pasto...

-Pervertido...

-¡No soy pervertido! He practicado bastante y mi cuerpo me pide que lo mime. Y que mejor mimo que tú estrechez

-¡Ahhh! ¡Ya deja de decir eso! ¡Pervertido!

-Hahaha... Zhan-ge avergonzado es lindo...-lo abrazo el castaño dándole un beso en la mejilla

-Mejor terminemos de comprar lo que falta...
.
.
.
.
.
.
-¿Encontraste lo que estabas buscando?

-Sí. Con esto ya sería todo...¿No crees que sería buena idea decirle a Zhan y a Yibo?-pregunto Yubin

-Naaaa..deja que ese par de idiotas disfruten está noche, ya mañana les diremos-respondió Jiang desde la cómoda cama de su habitación de hotel

-Bueno...Pero, mañana nos van a querer matar cuando sepan. ¿Le digo a Huaisang?

-No, ya deja de pensar en eso. Primero quiero hablar con ella para que nos ayude, y para eso necesito que terminemos este hechizo. Ya después les diremos...¿Por qué estás tan nervioso?

-La visión de hace unos días. Pasado mañana vendrán los dos hechiceros que se supone enfrentarán a Zhan, pero ahora está Ziyi también en China y eso complica la situación-Yubin se sentó a su lado y tomo una de las almohadas para abrazarla-Se perfectamente que ya no soy de su confianza, y por eso debo estar atento a las decisiones que tomen...

-Todo saldrá bien...Tenemos una aliada poderosa. Solo basta traerla con nosotros...

.
.
.
.
.
.
.

Xiao Zhan y Wang Yibo terminaron de armar la carpa y de preparar la fogata. Aún no había oscurecido lo suficientemente como para que el cielo los bañara de esa peculiar oscuridad acompañada de estrellas.

Se acomodaron en un tronco y se sentaron con solo el silencio del bosque rodeándolos con calma.

El castaño uso su fuego como Dragón y encendió la fogata causándole una sonrisa al mayor por su comportamiento infantil.

-¿Qué?

-Pareces un niño con nuevo juguete, no solo usas tú fuego para la cocina en la casa si no también ahora...

-No puedo evitarlo, no tienes idea de cuánto extrañaba la sensación de ser yo otra vez

-¿Puedo preguntarte algo?

-Dime

-¿Cómo fue? Digo...tu enfrentamiento con el Dragón Dorado

-Terrible, literalmente me mastico y escupió-solto una pequeña risa y se acercó para tomarlo de la mano acurrucandose-Es una criatura realmente fuerte...sin importar cuántas veces te enfrentas a él, siempre es más grande y no se debilita. Creí que moriría cuando intenté luchar, pero solo quede gravemente herido