TND: Nosotros y la vida a los 17

Vigesimo cuarta parte:

Teens
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Door

Operación: C.O.L.E.G.I.O
Parte dos

Cambios
Obligan
Lenta
Estrategia
Guiada
Inteligentemente a
Objetivo

***

Despertó con los primeros rayos del sol entrando por su ventana.
Cualquier otro adolescente protestaría por tener 5 minutos más de sueño, pero no él; parecía solo dormir de forma simbólica pues su rostro reflejaba los estragos del insomnio.

Wally se levantó de la cama; ese día volvería a ver a Kuki pero no sería la joven alegre que conocía, y no estaba seguro de estar preparado para ello.

Miro el frasco de pastillas vacío en la mesita a un lado de su cama, pero ya no eran prioridad. Sabía que no podía suspender su tratamiento pero eso ya no llenaba su mente.
Su cabeza se encontraba cubierta, cuadro por cuadro, por el deseo de salvar a Kuki.

Esa mañana, Patton, pasaría por él para llevarlo a la escuela.
Al principio Wally se había negado (pues le parecía innecesario), pero al ver que no haría cambiar de opinión al pelinegro dejo de intentar.
30 minutos después se encontraba listo y esperaba paciente en el porche. Ese día había optado por cubrirse con una chaqueta impermeable negra, pues la época de lluvias ya había comenzado.

Patton no tardó mucho en llegar, debían darse prisa pues una vez dejando a Wally en el nuevo colegio él debía conducir al otro lado de la ciudad para llegar a su preparatoria.

Parece que alguien no pudo descansar- Dijo a forma de saludo.

Lo sé, me veo del asco, pero fue lo mejor que pude hacer.- Dijo el güero mientras se sujetaba el cinturón de seguridad.

No comento más al respecto cuando puso el auto en marcha, pero si había algo que le preocupaba.- Güero ¿Tomaste tus pastillas está mañana?

Ya no importa si las tomo o no, tengo cosas más importantes en que pensar. -Al decir aquello no miro a su amigo, se limitaba a observar el camino fuera de su ventana.

Sin descuidar el volante, Patton le ofreció una frasco con tabletas, las cuales el chico reconoció de inmediato.

Cómo...?- Comenzó a decir sorprendido.

Rachel reviso tu expediente y me consiguió una receta.- Había cierta firmes en su voz, parecía un adulto a punto de dar un sermón.- Wally tu sabes mejor que yo lo que conlleva dejar de tomarlas, me sorprende y preocupa que estés descuidandote así.-Dejo salir un gran suspiro, como si decir aquello lo librará de un gran peso.- Mira, se que la estas pasando mal pero dejar de cuidarte no va a ser de más ayuda.

Wally sabía que lo que Patton decía era verdad por lo que en respuesta solo metió una de las pastillas a su boca y la dejo ir por su garganta a secas.

***

Abby fue la última en llegar de los tres. En los jardines del colegio dos y cuatro ya la esperaban. Se veían igual de fatigados que ella, habían sido semanas largas y lo más difícil estaba por llegar.
Wally miraba con atención al frente, donde un grupo de chicas platicaba, entre ellas Kuki y sabía que su mirada estaba específicamente sobre ella. Hogie apretaba el hombro derecho del chico como intentando darle consuelo, aunque por la expresión vacía del güero parecía que nada podía consolarlo en ese momento.

Abby optó por pararse frente a cuatro para bloquearle la vista a Kuki al tiempo que los saludaba, dando señales de su llegada.

Se que es complicado pero mirarla como acosadores no va a cambiar las cosas.- Su tono de voz era suave y empático, recordaba como ella solía mirar a su equipo cuando estos perdieron la memoria y esa experiencia ahora la hacía la más fuerte de los tres, al poder controlar sus emociones con el radical cambio de Kuki.
La alarma que advertía el inicio de clases no se hizo esperar, los tres habían sido asignados al grupo de Kuki. Los corredores y aulas eran totalmente diferentes a lo que estaban acostumbrados, todo en ese instituto era elegante, limpio y mejor equipado.
Antes de poder entrar al salón una chica del consejo estudiantil (a la que identificaron del grupo que acompañaba a Kuki) los interceptó.

Ustedes son nuevos ¿Verdad? Me llamo Lizzie Devine, organizo los eventos sociales de la institución.- Con una sonrisa enorme le entrego un folleto a cada uno.- Cada regreso a clases tenemos un baile, me ví en la obligación de informarles pues la venta de boletos es esta semana.

Cinco, cuatro y dos se miraron cómplices, no estaban de humor para eventos sociales, mucho menos bailes. Aunque no estaban cerrados a la idea de asistir, al fin y al cabo Kuki no faltaría siendo presidenta del consejo estudiantil. Agradecieron a la chica por la información y procedieron a entrar al aula.
Afortunadamente los asientos disponibles se encontraban al fondo, cerca uno de otro.

Wally debería invitar a Kuki al baile, sería una buena forma de acercarnos.- Dijo Hogie a forma de burla para aliviar el ambiente tan tenso entre ellos y la situación al otro lado del salón sentada de pies cruzados y maquillaje en las mejillas.

No es una mala idea, dos.- Dijo sorpresivamente, Abby.

No lo decía de verdad, no creo que funcione.- Defendió Dos algo avergonzado de proponerlo.

Piensenlo, Kuki cambio pero sigue siendo una adolescente y ¿Que mejor que un chico con finta de problemático? Si eso no llama la atención de la chica, entonces miles de libros y películas estaban en un error.- Cruzada de brazos y con una postura de orgullo ante su respuesta, Abby, termino por convencerlos.

Bien, lo haré.- Pudo decir Wally antes de que el profesor diera inicio a la clase.

***

Fin de la transmisión...