Vigesimo quinta parte:

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Teen
Next
Door

Operación: M.A.L.O

Misterioso
Alumno
La
Observa

***

No sabía exactamente porque no lograba reconocerse en el espejo; por más que miraba a la chica en el reflejo no lograba hallar una conexión. La voz de padre le decía que se debía a la cantidad de trabajo escolar en el que estuvo laborando todo el verano, y a decir verdad sonaba lógico, aunque seguía sin saber el porqué.
Se limito a acomodar el uniforme y terminar de arreglar su peinado antes de salir del auto aparcado en el estacionamiento del instituto. Un grupo de chicas ya la esperaban, no recordaba porque eran sus amigas, solo sabía que lo eran y no lo cuestionó. Hablaban bajo entre ellas hasta que Kuki llegó a dónde se encontraban, fue entonces que terminó la conversación e inicio una nueva.

Te vez encantadora, Kuki, quisiera tener tus tiernas facciones asiáticas.- Dijo la chica del cabello trenzado.
Algo en su comentario la hizo sentir incomoda, pero nuevamente no sabía el porque.
Se limito a sonreír y liderar el camino del grupo hacia los jardines, algo en su mente se lo pedía aún si la situación no le agradaba.
La conversación que prosigio consistía en relación al baile próximo, las tareas estaban bien definidas, la principal preocupación era que iban a vestir y quienes las acompañarían. Cada palabra que salía de la boca de sus amigas parecía aburrida pero no podía apartar la atención de estás. Fue solo cuando el tema se centro en ella que una sensación de satisfacción la lleno ¿Siempre fue así?

Creo que tienes un nuevo admirador.- Dijo Lizzie en lo que podía ser un tono burlón o un fingido interés. La castaña señaló con un gesto al chico rubio al otro lado de los jardines, el cual llevaba varios minutos mirando en su dirección.

Con esa ropa de segunda mano no tiene oportunidad.- Las palabras salieron de su boca con naturalidad, la risa de sus amigas le daban la aprobación pero algo en su interior la hizo sentir profundamente mal por decir algo tan clasista, algo que además no sentía ni pensaba.
Quería remediarlo pero su voz solo causaba el mismo daño que el veneno.- Aunque tener a alguien como él a mis pies podría ser útil.

¿Para que? ¿Para mostrarte los lugares más asquerosos en los suburbios? Eres mejor que eso, linda.- Dijo Lizzie con una sonrisa fingida y un tono pasivo/agresivo.

Kuki rodó los ojos en fastidio antes de contestar.- Es alto, fuerte y es un cerebrito.- No estaba segura de lo último pero por alguna razón había imágenes (que parecían más un sueño que sus recuerdos) de él en un concurso académico y algo en su pecho la hacía quererlo cerca.- Podría intimidar a quien queramos fuera de nuestro camino, al mismo tiempo que hace nuestras tareas.

Lizzie, aún con su sonrisa fingida contesto.- No se si vale la pena, debe ser terriblemente vergonzoso ser vistas con alguien menos.- Hizo una pausa prejuiciosa y desagradable.- Afortunado.

Ustedes lxs nuevxs ricxs tienden a proyectar su inseguridades con tanta facilidad.- Contesto ahora Kuki con la misma reacción pasivo/agresiva de Lizzie.- No engañas a nadie, linda, todxs sabemos que saliste del mismo barrio que ese chico, tenerlo cerca no es lo que va a evidenciarte.- No tenía el control de nada de lo que salía de su boca y un sentimiento de orgullo la llenaba al punto de no querer retractarse.

Esto hizo enfadar a Lizzie, sus ojos parecían sacar llamas de irá pero no dijo nada, Kuki no debía agradarle, solo tenía que tolerarla para que el plan de Padre funcionará.

****

En el aula las cosas no fueron mejores, sentía sobre sus hombros la mirada de todos (aunque en realidad solo estaba captando la atención de tres personas en el fondo).

Su mirada no tardaría en encontrar la del joven rubio en los jardines, este parecía intentar analizarla o quizás solo juzgarla. Kuki respondió a ese grosero acto con una mirada retadora, invitándolo a acercarse y encararla pero en lugar de ello el chico sonrió divertido, desvío la mirada y durante el resto de la clase no volvió a mirarla. Esto fastidio a Kuki, pero su enfado solo incremento su deseo por mantenerlo cerca y usarlo a su favor. Podría llamarle conciencia a la pequeña voz que estaba inconforme con esta forma de pensar, pero en ese momento la influencia de padre sobre ella era más fuerte que la voluntad de su verdadera personalidad.

***

La clase terminaría pronto y lxs tres amigxs no perderían el tiempo. El resto del alumnado disfrutaba del descanso entre clases pero ellxs no; había algo más importante que atender esa mañana.

Se que acepte hacer esto pero aún no se cómo va a dar resultados.- Confesó Wally.

Ya lo he dicho, su condición actual nos da la ventaja.- Abby parecía estar tan segura de lo que hablaba que solo podía transmitir a número dos esperanza o una fé de lo más divertida en cualquier caso.

No va a funcionar, gustarle antes fue suerte, ahora será imposible. -Tal vez se debía a la serie de desafortunado eventos lo que mantenía al güero sumergido en pesimismo, aunque el grupo parecía no querer dejarlo ahí.

Eres el "chico malo" que toda adolescente busca.- Insistió Abby.

Pero con futuro y sin ser un idiota en realidad .- Agrego Hoagie.

Eres lindo y estás en el equipo de futbol, a mi parecer solo te hace falta una motocicleta.- Siguió Abby.

Wally negaba con la cabeza en incredulidad y una diversión nerviosa.- ¿De dónde sacas tus referencias adolescente? ¿De Wattpad?

Burlarte, pero se que funcionará, por lo menos habría que intentarlo.- Ambos se sostuvieron la mirada, uno tenía que acceder o admitir su error, y al final el perdedor fue Wally.

Pero cuando esto acabe me quedaré con la motocicleta. -

****
Fin de la transmisión...

TND: Nosotros y la vida a los 17Donde viven las historias. Descúbrelo ahora