Capitulo 6

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Unos cuantos coches más se estrellaron contra nosotros. Uno pasó volando por el lado, !BAM! Alguien gritó. Volví la cabeza, pero el dolor era tan infernal que apenas pude distinguir el pequeño cuerpo que temblaba en agonía en su propia sangre, las siguientes imágenes pasaron frente a mi como una pesadilla. Grité y me estiré hacia Samuel, que estaba inclinado, también herido, sobre la niña. Addimus de repente me cogió y me llevó lejos de la multitud, yo estaba llorando indignada.

-Te lo dije, estaba destinada a morir- dijo Adi acercándose sin ningún remordimiento.

-Pues entonces, los ángeles estaban destinados a ganar

-¡Para nosotros, el destino no está escrito!- Adi estaba enojado y probablemente con razón, pero yo había echo lo que me salió del corazón.-¡Tenía una razón, una tarea! ¿¡Crees que lo has echo bien!?

-¡Pues si lo creo!- no iba a dejar que me hablase así

-¡Todavía tienes ideas limitadas sobre lo que está bien y lo que está mal! ¡Ni siquiera tienes boto!- Adi se me encaró pero Addimus lo empujó

-¡Ha echo lo que cualquier ángel haría, ni se te ocurra tocarla!- Adi empujó a Addimus y se alejó indignado.

-Has echo lo correcto Lorianne, ella está en un lugar mejor ahora, ya lo sabes con seguridad.- unas lágrimas involuntarias empezaron a rodar sobre mis mejillas y Addimus me abrazó, supongo que ahora no era momento de reprocharle lo que sucedió el otro día.

-Ei- Sami se acercó y me abrazó.- Adi aveces es idiota Lorianne- me besó en lo alto de la cabeza- No te preocupes.- Los dos chicos se miraron.- Es hora de volver. - Miramos al cielo y las nubes empezaron a juntarse formando el remolino, mis piernas empezaron a elevarse y ya no notaba el suelo, el remolino nos capturó en su torbellino. Addimus y Sami apenas se veían a lo lejos, a mí me costaba más llegar. A punto de llegar, sentí algo, me acordé de la carta de la policía. La llevaba conmigo a todas partes, como si me gustara que me atormentase con mi pasado. Saqué la carta del bolsillo, pero una ráfaga de viento me la quitó de las manos y la arrastró por el remolino.

-No!- extendí la mano intentando pillarla pero me congelé al ver que alguien la había pillado y la apretaba en su puño. Lucifer también regresaba de su tarea y ahora miraba con interés el hallazgo.-¡Devuélvemela!- pero cuando estaba a punto de alcanzarlo, el remolino me escupió. Aparecí en la comisaría de policía y me eché a correr hacia dentro temiendo que el remolino me atrapase de nuevo.-Imbécil- 'Ojalá se atragante con la carta'. Respiré hondo y miré a mi alrededor. Parece que el remolino leyó mis pensamientos y decidió que debía llegar aquí.

-Disculpe, ¿Puedo ayudarla?- un policía estaba sentado detrás de una pila de papeles rellenando unos informes.

-Ee.. Si! Verás, yo.. me gustaría saber sobre el caso Walker.- el policía dejó de rellenar papeles y me miró con atención

-¿Y quien es usted?- 'mierda'

-Yo.. simplemente estoy interesada.

-Si es posible, necesitaría más detalles.

-Escúcheme..- me acerque a él un poco mas y me recoloqué un mechón de pelo coqueta. 'A juzgar por Mimi, si queremos hacerlo, tenemos un encanto inhumano.- Podríamos sernos útiles el uno al otro..- me lamí los labios y me alisé el vestido ceñido que me iba perfecto para la ocasión mostrando un poco mas de pecho.

-¿Sobre que está hablando señorita?

-Creo que lo entiende muy bien- me acerqué aún más y entrelacé mis dedos con los suyos en un intento de llevarlo conmigo hacia quien sabe donde, pero él apartó bruscamente la mano.

El secreto del cieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora