Capítulo 13

344 24 1
                                    

Había pasado unos días en el hospital, unos horribles días a mi parecer, lo bueno era que ya casi me daban de alta, Sakura siempre explotaba con Naruto, lo que daba risa, ver a Sai leer libros sobre como hacer amigos daba ternura y después estaba yo, perdida en que todo podría pasar en unos cuantos meses.

-Hola chicos- era mi padre, fijé mi vista en él y sonreí- Hola, pequeña- se acercó a mí- ¿Qué pasa aquí? – me dijo al oído.

-Ya sabes, lo de siempre- alcé los hombros sin darle mucha importancia.

-Ya me enteré de todo lo que hicieron mientras yo no estaba en la aldea- alcé una ceja ofendida, porque no podía regañarnos, la aldea solo sufrió una ligera destrucción, ¿No?

-Hablando de eso, ¿En dónde estaba, Kakashi-sensei? – si a mí me lo preguntan, fue a investigar sobre Akatsuki.

-Por aquí por allá- entorné los ojos y noté que mentía, Asuma entró a la habitación donde estábamos.

-Kakashi, quisiera hablar contigo- pidió- Ah Naruto, Sai, ______ les traje un regalo- agradecí y el rubio solo negó. Los adultos salieron a hablar y ahora que me acuerdo, yo tenía una plática pendiente con Kakashi, después Naruto y yo empezamos a desvendarnos.

- ¿Qué creen que hacen? – nos preguntó la pelirrosa.

-No tengo tiempo para estar tirado en una cama de hospital- comenzamos a decir los dos- Tengo que volver al entrenamiento, el tiempo vuela- aclaramos.

-Además ya me siento bien- aclaré quitándome todo el vendaje y ayudé a Naruto.

-Tal vez, pero aún están...- dejó las palabras en el aire.

-Ni que lo digas, todavía somos muy débiles- aseguramos- Ese es nuestro punto- ahora solo el rubio hablaba- Por eso tenemos que entrenar, tenemos que hacernos más fuerte, perfeccionar el poder de mi técnica- ah era verdad ellos aún no sabían que yo también estaba haciendo un jutsu nuevo- Para que pueda usarla para proteger a la gente y no lastimarla- revolví su cabello con cariño.

-Tranquilo niño- vaya que la charla había durado muy poco- Tú igual pequeña- inflé mis cachetes- Ahora lo que deben hacer es recuperarse- giré los ojos en forma de desaprobación- Dije que descansaras, no que hicieras huevos cocidos- volteé mi cara con molestia, porque no había tiempo para descansar- Escucha y pon atención- en eso vi un cuervo en la ventana de afuera.

-Padre, perdón pero me cansé de estar aquí, prometo que descansaré en casa, no seguiré el entrenamiento, sin embargo; me iré- dije muy rápido- Sakura-imooto- la llamé- Te encargo a estos dos- ella asintió y yo me fui a la cascada.

- ¿Ahora qué demonios te pasó? – nunca había escuchado eso de Itachi, tal vez estaba fastidiado- Debes descansar, me enteré que casi mueres por ser tan impulsiva- me regañó y golpeé mi frente- Así que más te vale descansar porque lo que sigue para tu entrenamiento será lo más duro para ti, así que si no te recuperas por completo, tal vez mueras- abrí los ojos con miedo por eso- Ahora, ve y descansa, pensé que estarías mejor, pero no es momento, te vendré a buscar en unos días, no puedes excederte- suspiré con cansancio.

-Gracias por venir- sonreí e iba a acabar los sellos cuando siento unos brazos rodeándome, alcé la vista y era Itachi.

-No quiero perderte, Mini Uchiha- correspondí el abrazo.

-No te desharás de mí tan fácil- aseguré- Es hora de irme, ven dentro de tres días- indiqué y me fui.

*______ tienes razones muy grandes para seguir viviendo y una de esas es salvar a Sasuke* pensó el azabache.

Ya habían pasado unos días en casa, así que ya era hora de ir a entrenar con Itachi, iba saliendo de mi casa, hoy gracias al cielo tenía tiempo de caminar y así pensar con claridad, cuando vi a mi padre.

No Te Esperaba II// Gaara y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora