Este inquietante aroma me transporta a un paraíso tan celestial,
no podría encontrar las palabras perfectas para describirlo.
Tengo que hacer que esto funcione, que esta historia comienza en un nuevo capítulo.
Tomé la guitarra y salió enero, luego febrero. Pero me hubiera gustado que surgiera en el mismo día en que nos besamos bajo la luna.
Decias:
-Quiero que el mar sea solo para ti y para mi-
El dolor era que ya no éramos niños para creer en cuentos de hadas,
Lo hiciste a tu manera,
hiciste tu historia,
hicimos el mar.
Pero cariño, nada es fácil. Ni tu historia. Ni mi historia. Ni la del resto de las personas.
Me diste tu juventud a cambio de mi corazón,
y eso no estaba escrito.
Tu padre desde donde está, ¿Se enteró de la canción?.
Tu madre que te abraza, ¿Sabe quien eres en realidad?.
No me amaste como decías,
y yo tampoco lo hice.
Fui un animal contigo y lo admito.
Me veías como un ángel cuando yo te enseñe en medio de la oscuridad los demonios de mi mente.
Pero los días pasan como olas volando a la deriva.
Y si los mismos dioses te traen de nuevo a mi,
dejaré la luz encendida,
por si el camino te es difícil de encontrar.
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Cuando Un Eclipse Te Alcanza
PoetryEste no es un libro. Estas son palabras en forma de estrellas fugaces. Porque a veces para escribir hay que tener roto el corazón, y eso implica ver más allá de lo que otras personas temen a ver y sentir, o el simple hecho de volver a ser tu mismo/a...
