╔║[ ᴍᴄsᴍ: ᴇʟ ᴏʀɪɢᴇɴ ᴅᴇ ᴜɴ ɢʀᴀɴ ʜᴇ́ʀᴏᴇ ]║╗

19. Eʟ ᴇɴғʀᴇɴᴛᴀᴍɪᴇɴᴛᴏ ᴘᴏʀ ʟᴀ ᴄᴏʀᴏɴᴀ

  A cánticos revolucionarios, y con cientos de instrumentos de percusión, se le daba la bienvenida al glorioso día de la confrontación.

Justo como se había planificado hace más de dos siglos atrás, el evento se llevaría a cabo en el centro de la nación; ubicado nada más y nada menos que en el inmenso zócalo empedrado. A diferencia de la ocasión pasada, el lugar contaba con dos enormes gradas de ladrillos grises, cubriendo toda la circunferencia de la arena, a excepción de dos lados que permitían el paso.

El horario de la justa sería por la noche, casi después de que el sol se hubiera ocultado. Por aquellos instantes, el sitio se encontraba tenuemente iluminado con faroles, focos, y antorchas en sus alrededores, los cuales proporcionaban la iluminación ideal una vez que se oscureciera por completo.

Varios de los familiares acudieron emocionados a la hora precisa del evento; más que listos y preparados para ver el salvaje encuentro que tendrían los hermanos sobre aquella área.  Bastantes de ellos asistieron con mucho gozo, manteniendo firme la esperanza, otros tantos, llevaban consigo la intriga de saber quién sería el vencedor definitivo; muy independiente de a cuál de los mellizos apoyaban. Parecían llevarse bien en aquellos instantes de breve encuentro, en los que apenas se daban sitio para contemplar el show, aunque eso cambiaría una vez que la ronda llegase a su fin.

En una torre elaborada de madera, no tan lejano a la zona, se encontraban dos comentaristas que recién preparaban sus diálogos para el espectáculo; ambos llevaban por nombre Rider y Varsity, quienes eran dos amigos pertenecientes a una variante navideña deslindada del paquete original (si es que los han revisado en la tienda del juego). Pese a ser muy diferentes a sus predecesores festivos, compartían el mismo espíritu navideño, al igual que la actitud positiva y los buenos deseos para año nuevo.

En cuanto ambos personajes estuvieron listos con sus líneas, dieron comienzo a la tan esperada ceremonia milenaria.

—¡Damas y caballeros de la prestigiosa familia de los Mojang! —anunció River animadamente — ¡Bienvenidos sean al primer enfrentamiento intrafamiliar por el derecho legítimo de la Corona Real!

—¡Un evento único en su clase en el que hemos sido prodigiosos de ser sus testigos, y del cual podremos ver casi en primera fila! —acompañó Varsity con el mismo ambiente animador.

—¡Así es, mi estimado amigo! —opinó su compañera con agrado —, sólo esperemos salir ilesos de lo que vendremos viendo dentro de unos minutos.

—Jajajaja, esperemos —afirmó el otro entre risas—, ya que esto se pondrá demasiado violento.

—Demasiado para ser verdad, justo como en aquellos tiempos en los que todo era monte.

—Y donde casi no existía nadie.

—Así es, mi amigo, así es — asintió con ánimo —. Justo está lucha nos regresará a los milenarios años donde éramos hombres y mujeres de almas salvajes y espíritus libres, luchando día y noche por tal de mantenernos vivos.