Inquietudes

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Tal y como hablamos, lo cumplimos, sin darnos cuenta de las inquietudes que generabamos no sólo en nosotros.

Pronto el reloj marcó las dos y treinta minutos, poco a poco los adultos iban por sus niños.

-¡Jemima ya vinieron por ti!- una de las encargadas llamó a la pequeña que venía acompañada de otra mujer- aquí está, adiós.

Mientras que la menor solo se despedía con la mano.

-¿cómo te fue? ¿Te divertiste?- mientras que la morena asintió contenta- que bueno ¿aún no tienes hambre verdad? Recién voy a hacer el almuerzo- mientras que ella solo negó, aliviandome.

Habían pasado unos meses desde lo ocurrido, mis tardes estaban un tanto ocupadas, pero pude entender mejor la mente de un niño y ayudado a Ray, solo siento que descuide otras cosas. Es esa sensación de sentirte bien haciendo algo pero haciendo daño a otro en el proceso.

-hmm- apretó el agarre de mi mano, algunas veces decían que los niños podían sentir lo que tu sentías.

-esta bien- sonreí tratando de calmarla.

Cuando llegamos al hogar de ella y Ray, abrí la puerta con una copia de la llave que el azabache me dio, me apresure a hacer el almuerzo mientras Jemima guardaba sus cosas y se ponía a jugar con sus juguetes.

De repente escuché mi celular sonar.

-¿hola?- respondí mientras me encargaba de la cocina.

-Anna ¿dónde estas?- me preguntó mi pareja.

-oh, estoy en la casa de Ray con Jemima- le respondí y el solo suspiró.

-¿aún sigues investigando la mente de un niño?- escuche del otro lado de la línea.

-y ayudando a un amigo cariño no lo olvides- reí y el me acompañó.

-Anna... Hace tiempo que no te veo- y pare de hacer lo que hacía, era esto lo que sentía.

-lo sé... ¿Y si vienes? Tal vez me puedas ayudar- trate de convencerlo.

-¿estas segura de que vaya?- y yo solo afirme, luego de un rato de conversación colgó y escuché el timbre, yendo a atender.

-¡Nat!- lo abrace al verlo y lo dejé pasar- los presento, ella es Jemima, Jemima el es Nat- los presente al estar los dos frente a frente.

-hola Jemima- se agachó a su altura y ella se escondió detrás de mí saludándolo con su mano- es bastante tierna.

-lo es, ven, ayúdame con esto- tome su mano y lo lleve a la cocina, entre bromas y comida terminamos de hacer el almuerzo y de limpiar el lugar.

Cuando al cabo de un rato escuchamos a Ray volver a casa.

-ya llegué- aviso su llegada a lo que Jemima que estaba en la sala viendo tele esperándolo corrió a abrazarlo.

-papá- y él en respuesta la cargó.

-Ray ¿te sirvo la cena?- pregunté aún sentada en el sillón donde antes estaba la morena.

-no, yo me sirvo tranquila- bajo a la menor y fue a la cocina, mientras que del baño salía Nat encontrándose en el pasillo con el azabache-... ¿Tu quién eres?

-soy Nat, el novio de Anna ¿qué tal?- sonrió de forma altanera.

-oh, ya se vieron, Ray el es mi novio ¿no te molesta que estuviera aquí, verdad?- estaba preocupada de que eso lo molestara.

-no, para nada, solo que... Me sorprendió- vio a Nat un momento- no sabía que tenías novio.

-si, lo tiene- el pelirrojo me tomo de los hombros como presumiendo a lo que solo reí nerviosa.

-b-bueno, creo que ya es hora de irnos, antes de que se haga más tarde ¿verdad, Nat?- lo mire y luego de un rato reaccionó.

-ah, claro claro, nos vemos otro día Ray- se despidió y seguido de eso nos fuimos no sin antes despedirme de Jemima y Ray.

-¿estamos apurados?- me preguntó ya al haber salido del departamento.

-no se si te diste cuenta, pero estabas despertando a la bestia- recordé la cara ensombrecida de Ray al ver a Nat tan confiado conmigo, después de todo él desde niños me trataba como una hermana pequeña, si lo veo desde la perspectiva de hermano mayor supongo que estaría igual.

-¿ok...?- respondió confundido.

Continuará...

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(^o^)

Ok al principio pensaba hacer un pj OC como novio de Anna, pero le quitaba emoción al asunto, con un OC que aparece dos caps no se empatiza, pero si es un pj de de la serie si, así que pense en Zack, pero no sentía que llevaba el mismo peso que Nat, así que me quedé con él.

HeatherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora