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Ara ¿Cómo están? Ahora se viene lo chido jsjsjs

Bueno que me he emocionado con esto ≧ω≦  Aunque el final sea...

Hoy publicaré en esta historia y ya el otro domingo la otra.

Oh y subí nueva historia solo por les interesa (~_^)

¿Debería poner la advertencia? Según yo no XD pero por alguna ¿mente inocente por ahí? Lo haré

Contenido R-18, medio explícito y consentimiento dudoso

O lo que se puede decir explícito, todavía sigo aprendiendo sobre esto

Disfrútenlo

¿Cuánto tiempo deseo esto? ¿Cuántos sueños tuvo de este tipo? No lo recuerda, solo sabe que un día quiso tener a Jiang Wanyin debajo suyo, gimiendo y rogando porque lo penetrara más fuerte y profundo

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¿Cuánto tiempo deseo esto? ¿Cuántos sueños tuvo de este tipo? No lo recuerda, solo sabe que un día quiso tener a Jiang Wanyin debajo suyo, gimiendo y rogando porque lo penetrara más fuerte y profundo. Que le rogara que lo anude y que tuvieran un hijo. Uno que luego sería dos, tres o hasta cuatro.

Quería pequeños cachorros corriendo por su casa, una lejos de Cloud Recesses y lejos de las reglas. Deseaba poder ser el único que viera a su omega.

Jiang Cheng se presentó en su cuarto listo para ser usado a su voluntad y el no piensa desaprovechar. Con la poca calma quito la túnica interior que estaba empapada en sudor y comenzó a besar y morder el cuello blanquecino del omega, quien tenía ambas manos amarradas por su cinta escuchándolo gemir y jadear.

—Alfa más

No le hizo caso, quería dejar su huella en cada parte de su piel. Siguió mordiendo ahora con más fuerza su cuello y hombros, amando el suave estremecimiento del omega. Paso la lengua por la glándula de apareamiento y esperaba el momento correcto para morderla. Bajo más y mordió aquellos firmes pezones, jugo con la punta y tiro sacando más sonidos eróticos de aquella boca rosada, las manos del omega fueron a su cabeza y arqueo su espalda para que siguiera mordiendo esa zona.

—¡Mmmhh! ¡Más fuerte!

Oh que exigente podía llegar a ser. Sabía que Jiang Cheng tomaba supresores para evitar el celo y ahora que lo estaba experimentando era mucho más fuerte. Mordió la piel en su estómago y bajo más hasta que su cara estuvo frente al pene del omega. Sin pensarlo tanto se lo metió a la boca escuchando el chillido alto del omega y como aplicaba más fuerza al agarre en su cabello.

Como un ave enjaulada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora