Lan Zhan siempre a amado las cosas tiernas y frágiles, le gusta el sentimiento de dependencia.
Por eso cuando su fuente de amor es el omega Jiang Cheng, alguien hermoso pero nada frágil, su mundo da un giro radical.
- Lo admiro mucho Lan Wangji...
¿Como están? Yo aquí muriendo de sueño porque las tareas y el trabajo me tienen hasta el desmayo
Literal, en medio de la reunión semanal en mi trabajo mi cabeza comenzó a dolerme y casi me desmayo y me mandaron a descansar ʕ'• ᴥ•̥'ʔ
El descanso es importante, no lo olviden como yo.
Ahora no los molesto más y disfruten
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Wei Wuxian había derribado alrededor de diez árboles y ya un tanto más calmado decidió volver a su habitación. Claro que no esperaba encontrarse con Lan Wangji.
—¿Y ahora que quieres? —su mirada delataba la ira que sentía
—Dónde está A-Cheng
—Eso no te interesa
—Es mi omega — frunció el ceño
—Escucha Lan Wangji —se le acercó y trato de no golpearlo—. Mi shidi no es ninguna propiedad, el que lo hayas marcado contra su voluntad no te hace su alfa y no pienso dejarlo contigo
— Devuélveme a A-Cheng, Wei Ying. Somos pareja y debemos estar juntos
—Eso ya lo veremos. Ahora quiero ir a descansar y deja de llamarlo así, no lo mereces
Wei Ying paso al lado del alfa golpeando sus hombros a propósito y camino a su cuarto, donde encontró a su pequeño hermano envuelto en las sábanas y durmiendo tranquilamente.
Se dio una ducha rápida y se acosto en la otra cama para no molestar a su shidi. Mañana mismo se irían, el campo de batalla no era una opción... quizás si mandaba una carta a la abuela de Jiang Cheng ella lo dejaría quedarse, pero la anciana haría demasiadas preguntas.
Cuando abrió los ojos la luz de la mañana se filtraba por la ventana, además de notar que un pequeño cuerpo estaba a su lado. Miro la cama vacía donde ayer su shidi estaba, Jiang Cheng se cambió de cama durante la noche para estar a su lado abrazándolo.
—No quiero —apreto su agarre en el alfa— quédate Wei Wuxian, tengo sueño
—¿Desde cuándo mi shidi es tan mimoso y lindo? — rió
Wei Wuxian sabía que era por su celo. Siempre que Jiang Cheng terminaba su ciclo se volvía mimoso, quería que lo abrazaran y alimentaran como un niño, mentiría si dijera que no le causaba ternura. Pero debían desayunar y con todo el peso del mundo se separó de su hermano, quien hizo un lindo puchero.
—Debes comer A-Cheng — acarició el cabello del omega—. Espérame te traeré el desayuno ¿bien?
Jiang Cheng no parecía contento con la pérdida de calor en la cama. Antes Jiang Yanli le ayudaba con la comida y el debía mimar a Jiang Cheng.
