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Sus gemidos ahogados por el dolor podían escucharse en aquella habitación, suspiró cuando la navaja dejó su piel, pero el ardor de esta todavía seguía presente.

Jadeo al sentir la húmeda pero cálida lengua de Saeran pasar por su reciente cortada.

--Quien diría que tuvieses tal fetichismo....- Susurró mientras jalaba la correa que (nuevamente) le había puesto, se había acostumbrado a siempre verlo con esta.

--El raro eres tu por hacerlo....- Se defendió ante él, lo que provocó una carcajada de Saeran.

--¿Yo?, quién diría que me culparias por el hecho de que te excite esto.- Dijo mientras apretaba levemente la herida de Yoosung para que está saliera un poco aquel líquido rojizo.

--...No me excita...- Respondió con brevedad mientras se negaba a mirarlo.
Pero su rostro fue tomado por las manos de Saeran provocando que ambos se miraran fijamente.

En los labios de Saeran todavía se podía distinguir un poco su sangre, su mirada penetrante no dejaba que pudiera pensar con claridad.

--Sabes que me perteneces, Yoosung Kim, es mi obligación marcarte como mío.- Decía mientras lo acercaba hasta su rostro, sus labios estaban tan cercanos, que Yoosung comenzó a sentirse nervioso.

--Simplemente estas loco.- Susurró mientras notaba como este bajaba el cuello de la camisa hasta su hombro, dejando a relucir si piel blanca.

--Si te muerdo, ¿cuanto tiempo crees que dure la marca?.-

--. . .-

--No me gusta ver como tu piel parece tan fina y frágil como la porcelana, me molesta esta sensación de poder arruinar cada parte tuyo, quiero que seas mío, quiero corromperte.- La mano libre de Saeran recorrió el hombro de este, tocando con suavidad, mirando a Yoosung con detenimiento.

--. . .-

--Claro, pero primero debo divertirme, ¿no?.- Hablo mientras sonreía y luego volvía a la herida con su nombre escrito que se encontraba en el antebrazo de Yoosung.

La sangre caía lentamente al piso, dejando una que otra mancha. Yoosung no podía evitar sentir que, si no paraba la sangre, se desmayaría, más su nerviosismo paro cuando Saeran puso un paño blanco en la herida.

--Cuando termine de sangrar, veremos como queda.- Dijo mientras se alejaba de él.

No podía decir Yoosung que no lo odiaba, puesto a que todo lo que a hecho y el cómo lo a tratado a sido sumamente doloroso, pero, la soledad de ese lugar era peor del como a sido tratado.

Verlo irse, dejó a Yoosung con miedo a la soledad. ¿Y si se molestaba y lo dejaba sólo?

--¡Saeran!.- Gritó su nombre, deteniendo el andar del segundo, que giró levemente su cabeza para mirarlo sobre su hombro.

--...¿Que?...- Pregunto de cierta manera confundido, nunca antes le hablaba cuando se iba del lugar.

--...Regresaras...¿verdad?.- Esperar una respuesta positiva por parte del mayor no era sin lugar algo que esperase, pero quería al menos aferrarse a una idea vaga de que no lo abandonará.

No lo abandonará como la RFA.

Saeran sonríe mientras regresa a su caminata, respondiendo.

--¿Y perder la oportunidad de pasar tiempo contigo?, hmp, mañana lamentaras sin dudas mi presencia, Yoosung Kim.-

Y se marchó, el sonido de la puerta cerrándose fue lo último.

Ahora las gotas que caian del lavabo eran el único sonido en aquel lugar, Yoosung miro el paño y el cómo este ya había sido cubierto por su sangre.
Suspiró mientras se levantaba a enjuagarlo, había aprendido a que en algunas horas, el agua no funcionaba, y prefería mejor enjugar su herida con el jabón que tenía, antes de que el agua se fuera y no tuviera otra oportunidad, así mismo, "lavar" un poco el paño para secarlo y volverlo a poner en la herida.

Recordaba vagamente las palabras que su madre en algún momento le había dicho: "Mas vale estar sólo, que mal acompañado".

Sonrió con pesadez, entonces,¿porque su corazón anhelaba la compañía de aquel loco antes que la soledad que le proporcionaba aquel cuarto?.
Sin lugar a dudas, ya no lo sabía, y eso, le aterraba.

¿Acaso Saeran poco a poco estaba logrando su objetivo de dejarlo tan inestable que creía que su compañía era lo mejor?.
Negó rápido con la cabeza, mientras veía la herida que este mismo le había proporcionado.

--No caigas en sus juegos, sigue aferrandote a la esperanza.....
....
...
..
.

¿Cual esperanza debe aferrarse a mi corazón?


. . .

|| CORDURA ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora