The Real Enmity (Omegaverse GL)

IV

“Pero hoy no, hoy no. Ahí va ella, delante de mí, toma mi vida y me libera de nuevo. Haremos de ello un recuerdo”

Not Today-Imagine Dragons

...

Sus ojos grises seguían de cerca el movimiento de las piernas y los brazos exaltados de Bastean, el castaño solo miraba de reojo a su pequeña hermana y volvía a refunfuñar. Estaba exasperado, enojado y colérico; esas emociones se acoplaban con el increíble sobresalto que se llevó ante la noticia del nombramiento de la pareja eterna de Gadea, que resultó ser la oportuna Alfa que evitaría una desgracia.

Ella seguía observándolo desde su posición en la fuente del centro, en la que se encontraba plácidamente sentada, meneaba sus piernas como quien no ha tenido responsabilidades en el día, tarareaba una melodía y se imaginaba saboreando el gusto de una almendra. Tenía una sonrisa enamoradiza, las mejillas sonrosadas y los ojos brillando soñadores, no faltaba mucho para que empezara a bailar y saltar de alegría.

La había encontrado, la sensación fue mucho más electrizante de lo que creyó principalmente. Era como hundirte en agua, caer sin tocar el suelo, era como flotar, o eso decía ella.

Se levantó y tocó con calma el hombro de su hermano. El mayor al sentir el tacto volteó, la sonrisa que se extendía por el rostro armonioso de Gadea lo hizo aliviarse. Estaba molesto, lo estaba en contra de Dimitri y su asqueroso plan, ¿Cómo se atrevía a atentar con su casta y dulce hermanita? Ese Alfa... Se las vería con él al llegar y encontrarlo. Pero al ver la sonrisa que se ensanchaba por todo el rostro afable de Gadea siente que quien sea aquella persona se ha ganado su devoción.

—Bastean— el mencionado observó expectante a su hermana en espera de lo que tiene para decirle—, debo buscarla y, tú— lo señaló con la mano— me ayudarás, querido hermano— sus cejas se estrujaron mientras maquinaba algún plan que los metería en problemas a ambos.

—¿Qué? —preguntó atónito— Claro que no.— dijo meneando la cabeza con desesperación en señal desacuerdo.

—Oh claro que si— aseguró ella con confianza—, ya verás que vas a caer hermanito— le confirmó al momento que le daba golpecitos en el pecho al mayor.

—¡¿Estás loca?! Los preparativos de la mi coronación necesita que estemos presentes, ambos estamos bajo la atención de nuestros padres— asustado siguió negándose ante lo que sea estuviera pensando su pequeña, pero maquiavélica hermanita.

[...]

—¿Cómo terminé aquí? —le cuestionó al viento mientras escuchaba una risilla de Gadea resonar por todo el oscuro pasillo, la risa provenía delante de él.

—Porque amas a tu caprichuda hermana, y porque deseas conocer a tu futura cuñada— exclamó emocionada. La antorcha casi se sale de sus manos ante su gesto y apresurada la alcanza antes de quemarle la cara a Bastean. Aunque unos cuantos cabellos de su cabeza no se salvaron de la llamarada, la Omega sonríe apenada—. Lo siento— se disculpa ante el gesto enojado y horrorizado de su hermano al ver su delicado cabello chamuscado.

Gruñe molesto y se esfuerza por no dar la vuelta, salvar su pellejo es una de sus prioridades ahora. Ahora se escucha más tentadora la idea de que sus padres lo castiguen con mano dura por ayudar a escapar a su hermana, que morir quemado por esa misma energética Omega.

—¿Me puedes volver a repetir el plan? — le dice mientras se mantiene lo más alejado posible de la antorcha que sostiene la castaña.

—Es simple, debemos bajar al centro del reino y preguntar por una alta, guapa y tentadora Alfa de ojos azules y cabellera color ébano— se ríe como enamorada por la descripción.