Todo el alumnado de Hogwarts caminaba ya hacia la primera clase del día. En un día normal, la gente tendría una actitud bastante decaída pero este no era el caso, el hecho de ser viernes ya ayudaba a sobrellevar el día un poco más de lo habitual, pero además todo el mundo estaba expectante ante el partido del día siguiente, Gryffindor vs Ravenclaw, uno de los grandes duelos de Hogwarts y sobretodo, uno de los últimos partidos de Harry Potter, el buscador más joven del siglo que al terminar sus estudios probablemente no volvería a disputar ninguno más.
Entre todo el meollo Neville se acercó a Harry de nuevo antes de llegar a clase.
-Ha... Harry!
El azabache se giró con curiosidad.
-Dime, Neville ¿Qué pasa ahora?
-He estado pensando y no me veo capaz de pedirle a Luna que venga conmigo al partido, podrías... bueno ya sabes ¿Pedírselo tú por mí?
Harry suspiró cansado del mismo tema y se dispuso a contestar lo mismo de siempre para quitarle importancia pero su amigo se adelantó.
-¡Te prometo que es la última vez que te pido algo relacionado con Luna!
El ojiverde volvió a suspirar y sonrió ante la solemnidad de su amigo que estaba con las manos juntas rogando su ayuda.
-Vale Neville, yo me encargo de hacérselo llegar a Luna pero después de eso vas a tener que dar la cara tú siempre ¿Entendido?
El rostro de Neville se convirtió en una mezcla de vergüenza y gratitud, el chico asintió rápidamente y se marchó.
Harry comenzó a repasar cansado todo lo que tenía pendiente, aún tenía que hablar con Ginny en menos de 3 días, preguntar a Dean sobre Seamus y pedirle a Luna una cita en nombre de Neville, todo esto sumado a que al día siguiente tendría todos los ojos del colegio clavados en su escoba en el partido contra Ravenclaw.
El azabache por un momento se notó presionado pero todo eso no era nada comparado a las cosas que había tenido que vivir durante toda su vida así que se dejó de tonterías y comenzó a buscar a Ginny antes de que entrara en clase.
Unos minutos después Harry vio como la pelirroja acababa de separarse de Hermione y marchaba hacia su clase sola y algo cansada, la alcanzó y le tocó en el hombro.
-¡Eh, Ginny!
La chica se giró y al verle se quedó algo cortada, hacía días que no hablaba con él y parece que estaba a punto de saber el porqué.
-Dime Harry.
El chico cogió aire y se dispuso a contarle todo a Ginny mientras la gente seguía pasando por su lado para ir a clase. Aunque al final no había pensado ni la forma ni lo que le iba a decir así que tuvo que improvisar mientras lo iba contando.
-Verás Gin, quería hablarte sobre Demelza.
A la pelirroja se le apagó la mirada de repente pero mantuvo la compostura.
-¿Sobre Demelza? -Preguntó todo lo seria que pudo.
-Si, bueno y sobre Dean, Seamus e incluso Neville. -Contestó el ojiverde intentando quitarle hierro al asunto.
Ginny cruzó los brazos y arqueó la ceja esperando a que Harry continuara.
-Verás, el otro día en los vestuarios Dean me pidió que hablara con Demelza por un... "pequeño" problema que habían tenido entre ellos y desde entonces tengo la sensación de que ya no os habláis entre vosotras ni con Dean.
La pelirroja suspiró.
-Mira Harry, de verdad que no me tienes que dar explicaciones de con quién estás o no y tampoco tienes porqué involucrar a Dean ni a nadie más. -Contestó la chica calmada pero decaída.
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Harry y Ginny
FanfictionEl universo y todos los personajes de esta historia pertenecen a J.K Rowling. La historia está ambientada en el séptimo año de Harry en Hogwarts pero en el sexto año Snape ayuda a Dumbledore que se sacrifica para acabar con Voldemort así que nunca s...
