Boku No Soldier: Modern Warfare

El comienzo de todo...

La guerra es un castigo tanto para el que la infringe como para el que la sufre.

Thomas Jefferson
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¿Que sucedería si todas las personas que ayudaste en alguna ocasión, te dieran la espalda así como así?

Esa era la incógnita que vagaba en la cabeza de Midoriya Izuku, quién corría a todo lo que podía entre lágrimas, dolor, sufrimiento emocional y traición. ¿Traición? ¿Hacia chico de corazón puro y más amable de su clase? Sin duda alguna era algo que jamás se había esperado en toda su estancia en la academia UA. El camino hacia ser el héroe número uno, había sido completamente destruido, por un vídeo elaborado por la liga de villanos para sacarlo de la jugada. Ese estúpido vídeo, arruinó su sueño completamente de ser el más grande. De alguna forma, muchos héroes de la academia, se lo creyeron sin siquiera tomarse la molestia de analizarlo. Otros lo analizaron, pero estaban neutrales. Mientras que la gran minoría de héroes, pensaba que era imposible que el niño de más puro corazón, los traicionara de esa forma. Maldita sea la liga de villanos.

Pero eso ya no importaba, pues ahora, un horda de alumnos que lo veían con ojos que irradian furia, estaban detrás de él, con el único objetivo de darle una "lección" al supuesto traidor. Indiscutiblemente, se habían olvidado de todas las buenas acciones cometidas por el. Ahora eso no valía nada. Absolutamente nada.

Volviendo al presente, Midoriya corría fuera de la UA, intentando escapar de aquellos alumnos, claro que había recibido ayuda por parte de sus amigos de clase, entre ellos Todoroki, Yaoyorozu, y Kirishima. De no ser por ellos, ya habría sido acorralado. Pero no fue así. El héroe "Deku" ya estaba muy cerca de salir de los territorios de la academia, pero justo antes de salir...

-¡¡¡SHINEEEE!!!-

Una explosión Impacto en sus espalda, derribandolo en el suelo. Fue tal magnitud de la explosión, que había herido lo suficiente a Izuku como para no poder levantarse.
La irá que sentía Katsuki por Deku, era enorme. Ahora, el haberse creído que era un traidor, se multiplicó al triple, por lo que la explosión si o si la haría más grande y potente.

Derribado, Izuku intentaba levantarse, sin conseguirlo, pero no sé rindió.
Entonces comenzó a arrastrarse por el suelo, tratando de escapar, avanzando 2 metros solamente.

Pero un pie fue colocado en la espalda de Izuku, aplicando presión que lo lastimaría, por lo que empezó a gritar de dolor.

-Eres un maldito traidor imbécil, Deku. Una escoria como tú, merece morir.-
Diría Katsuki, para después colocar sus manos en posición de explotar la cabeza de Midoriya. Pero aquel rubio explosivo, quería que el traidor presencíara su muerta, por lo que lo colocó boca arriba.
El musulmán empezó a cargar una pequeña explosión, que iría aumentando su intensidad, produciendo un brillo naranja.

Sabiendo que está sería su último día, Izuku cerró los ojos, esperando a que descargaran la explosión sobre su rostro. ¿Qué más daba?
Solo el mismo sabía su inocencia, y a pesar de tratar de explicar, nadie le prestó atención. Solo le quedaba esperar su explosión. Estaba listo para afrontar su destino.

Bakugo alzó su mano para estallar el rostro de Izuku. Para después:
-¡¡¡SHINEE...-

La acción de Bakugo se vio interrumpida por un objeto que impacto en su hombro. Fue tal golpe que cayó derribado de espaldas, mientras que se quejaba del dolor...

Bbwhuop
Bbwhuop
Bbwhuop
Bbwhuop
Bbwhuop
Bbwhuop
Bbwhuop

Era lo que escuchaba Izuku, casi inconsciente.

Hasta que una luz blanca muy potente apunto hacia el.

- Lo encontramos. Esta en mal estado, requiere atención médica inmediata.-

Entonces siente como unas manos lo levantan por la espalda, siendo cargado hacia algún lugar. Pero, ¿Hacia donde lo llevaban?

Fue depositado en el suelo, acostado. Dónde su vista se nublaba poco a poco, aunque de por sí, no podía distinguir nada, lo único que notó, fue que en donde se encontraba parecía una especial de cabina vehicular.

- Signos vitales débiles. Inyectando hermostatico.-

Entonces una de esas personas que lo habían recogido, le inyectó algo que lo tranquilizó, pero le estaba quedando inconsciente. Lo último que logro escuchar fue:

- Overlord, Aquí Price Bravo-6, hemos extraído el objetivo. Repito, objetivo asegurado

1 hora Después

POV Izuku

Abrí los ojos, después de estar un rato inconsciente. Lo que pude distinguir, fue una helicóptero, el cual rotaba su hélice. No hacía falta ser un genio para saber que habían aterrizado.

Pero fijé la vista en unos soldados que bajaron del helicóptero. Los cuales, sujetaron la camilla en donde me entraba, para movilizarla hacia no se dónde.

Mientras me llegaban recuerdos de cuando estaba en la academia, justo después de haber sido acusado de traídor, en especial las palabras de todos los alumnos en la academia:

Escoria
Maldito traidor
Te pudrirás en prisión
Maldito villano

Fui sacado de mis pensamientos al notar que mi visión se tornaba de un color rojo ligero. Alzé la mirada y vi que mi uniforme estaba todo teñido de rojo. Un sangrado. Ese era el motivo de que mi visión se tornará roja y se nublara poco a poco.

- Rápido, Nikolai, hay que llevarlo a la enfermería. No aguantará mucho.- Diría un soldado con un sombrero de camuflaje. Además de tener un bigote grande. Y muy notado

- Está aquí adelante, ya casi llegamos- Diría el soldado, ahora conocido como Nikolai, para después dirigir la vista hacia la mía y decir -Resiste chico.-

Más pensamientos invadieron mi mente. Pero ahora de mis amigos. Amigos reales. Entre ellos, Todoroki, Yaoyorozu y Kirishima. Digo, ¿Quien desafía a casi toda la academia, con tal de proteger a su amigo acusado de traición? Solo ellos tres, lo hicieron, esos eran Amigos que si valen la pena.
Pero el que pensamiento que más impacto tuvo, fue sobre mi madre. Cómo se enteraría de que su hijo, un verdadero héroe, fuera acusado de traición. Algo que sin duda alguna le partiría el corazón en mil pedazos.

De nuevo se interrumpieron mis pensamientos, al abrir los ojos y notar mi visión totalmente rojiza. Pero ahora, estaba jadeando. Jadeos de dolor.

Hasta que entramos a una sala, totalmente iluminada, en donde había varios instrumentos médicos.
Posicionaron la camilla al lado de del médico, quién me examinó visualmente.
Acto seguido, tomo una jeringa, la cual me clavo en el abdomen.

Note que mi vista se nublaba de nuevo, pero ahora lo hacía rápido. Debieron insertarme una anestesia, o algo parecido. Pero estaba quedando inconsciente. No estaba seguro de salir vivo de está.

Pero algo me quedo claro.

Después de ver a estos soldados luchar por salvar mi vida y apoyarme, algo que los de la academia no hicieron por mi, ya no seré un héroe.

Seré... Un soldado.