-GÉMINIS-

CAPÍTULO 22

--- MÁS TORTURA ---

ARABIA SAUDITA, MEDINA

12 Días fuera de casa, 6 horas con la droga en el cuerpo, 288 horas sin vista al exterior y 32 horas después de la última comida

Adán Sawyer

Llevo rato esperando que la Ministra me atienda y hacer saber que tengo al mafioso bajo mis cuidado, el viaje es largo de regreso a Londres y me preocupa haber dejado a Aitana con el mafioso ese de mierda.

La polla erecta me duele, desde que subí al avión no he dejado de planear todo lo que hare cuando vuelva a Arabia con Aitana, fantaseo con las mil posiciones en la que le puedo romperle el culo, apretar sus tetas, cargarla de brazos o hasta follarla dormida en la cama del lugar donde escondemos al mafioso

Mi padre ahora sabrá lo que es ver a tu madre morir pero esta vez con su hijo, porque el mafioso es hijo de mi padre y tiene un año menos que yo, mi padre sabrá que es esperar que su hijo llegue pero en realidad su propio hermano lo ha secuestrado y lo está torturando, derramara lagrimas por su hijo mafioso y luego me rogara perdón cuando lo esté matando.

—Mi general solicito hablar con los Ministros de la IMSP-carraspeo.

—Ya no le queda bien el traje militar, teniente.-bromea —Claro que sí, está autorizado-me permite entrar a la sala de juntas.

Cuando entro aún no están los ministros pero si los del servicio acomodando sillas y verificando que el sistema esté en orden.

—Preparen el proyector que no quiero fallas-ordeno y por ser teniente reconocido me obedecen.

—Teniente lo dejo solo-se despide con un saludo militar Meyer.

—Si mi general-hablo con mi voz alta y demandante.

—Quiero que los aires estén a 19 Cº, -el ruido de las turbinas de aviones se escucha por dentro —activen el sistema de ventanas que aísla el ruido en el exterior-me acomodo en una silla con una tableta que me entregaron.

—Teniente Sawyer,  la Ministra Sienda Danbury ha llegado-la mujer de negro que entra por la puerta lo dice todo, atrás de ella una hermosa dama con un vestido azul marino pegado a su cuerpo que detalla sus caderas y su cintura, su porte fino y la manera en como camina hasta su lugar en la mesa, sus ojos azules y el acento franceses que se deja lucir al dar órdenes mientras se quita los guantes largos que trae en la mano.

—Apportez un café moka chargé de sucre dont j'ai besoin pour me réveiller-le indica a su escolta y ella sale acatando sus ordenes.

El francés es un idioma que aún no domino ya que se enreda mi lengua al momento de hablarlo por eso todos en esta central aprende el inglés que es la manera en cómo nos comunicamos.

—Bienvenida Señorita Danbury-la tomo de la mano y beso.

—Buenos días-dice ella aparta su mano.

—El señor Aaron Tanner-anuncia el escolta. Entra un señor con barba larga, moreno, atlético y con una elegancia al momento de caminar con el bastón de madera y jade en la punta.

—Bienvenido señor Tenner-dedico un saludo militar.

—Siéntese Teniente-demanda.

Acato la orden de buena manera pues a la IMSP que es la central mayor no se le responde ni muchos menos con malos gestos ante su presencia. Todos son sumamente estrictos cuando de misiones se trata o en estas reuniones donde no muestra ni una chispa de emociones, solo escuchan y anotan en sus hojas puntos claves para al finalizar dar una orden que se tiene que cumplir.