Capítulo 9

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Tyler McKellen

Días después...

Conseguir un transporte seguro para el traslado de Thor, mi nuevo semental, me llevó más tiempo del que tenía planeado. Pero pasar un tiempo en Londres me hizo reencontrarme con viejos colegas de la universidad. Ellos me contaron que Sabrina finalmente se casó con Phillip, ambos estaban establecidos en Francia y esperaban a su primer hijo. Al menos sabía que ella estaba con alguien que si la amaba y tenía su historia con final feliz. Eso me hizo pensar por alguna razón inexplicable en Charlotte, aunque todo el tiempo seguía pensando en ella. Nada parecía conseguir sacarla de mi cabeza.

Para mis trabajadores, Evan y en especial para mi madre, mi vuelo de regreso a Inverness llegaría mañana, al igual que Thor, pero de último momento decidí tomar un vuelo y volver hoy mismo sin avisarle a nadie. Mamá seguía enviándome mensajes sobre cuando regresaría, y muchos más mensajes del gran trabajo que estaba haciendo Leonor. Algo que también Evan me mencionaba cada vez que hablábamos de cómo iban las cosas en las caballerías de Firefly.

Comencé a pensar que mamá había convencido a Evan para que me hablara bien de ella, y así unir refuerzos para que aceptara tener una cita con Leonor.

Así que quería tener al menos unas horas libres lejos de mi madre y su insistencia.

¡Nada mejor que llegar a mi cabaña! Dejé mi maleta, me puse las botas de montaña y salí. Necesitaba un paseo y respirar de nuevo el aire de los campos verdes.

Caminé por los senderos privados de Firefly, de esa manera me aseguraba de no toparme con los turistas que seguro deambulaban por los alrededores. Quería llegar a nuestro viejo quiosco familiar a la orilla del lago, así que tomé la ruta que mis padres no frecuentaban. De esta manera si ellos estaban ahí, los podía ver y volver a mi cabaña sin ser detectado.

Casi al final del sendero pude ver a Emma en el quiosco, sonreí y apresuré mis pasos.

Quería asustar a mi hermana, como en los viejos tiempos cuando jugábamos al escondite.

Me detuve al llegar al primer escalón del quiosco. La sonrisa en mi rostro se desapareció, y mi visión se volvió roja.

Emma no estaba sola, el jodido Matthew Wayne estaba a su lado, pero no sólo eso, él la estaba besando.

Mis manos se volvieron puños, prácticamente tacleé al tipo y lo siguiente que pasó fue que mi puño estaba sobre su mandíbula.

—Hijo de perra —gruñí volviendo a levantar mi puño hacia su rostro, aunque no llegué a conectar porque el maldito me derribó golpeando mi nariz.

Eso no impidió que me lanzara de nuevo sobre él.

—Tyler, Matt ¡Basta! —escuché gritar a Emma y sentí sus manos sobre mis hombros. Aunque ella no tenía la fuerza suficiente para alejarme.

Todo lo que quería era matar a este tipo. La estaba engañando y con mi hermana.

—No te la mereces —dije golpeando sus costillas. Él se defendió esta vez golpeando mi mandíbula. Cambiamos de posición y su puño conectó de nuevo en mi rostro. No dejé que conectara el siguiente golpe, inmediatamente lo alejé gracias a un ligero impulso de mis brazos y piernas.

Él cayó unos pasos adelante, de inmediato se levantó al mismo tiempo que yo lo hacía.

—Maldito infiel —escupí llegando hasta él, dándole un gancho al hígado—. Charlotte merece a alguien que la ame.

Esta vez le di un puñetazo en el estómago que lo hizo doblarse de dolor. Iba a patear su cabeza como un balón de fútbol, cuando sentí un fuerte golpe en mi nuca y espalda.

Halloween LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora