Halloween Love

Capítulo 3

Matthew Wayne

Permanecí en silencio al bajar a Charlotte, intenté conectar la mirada de nuevo con la pelirroja pero no obtuve éxito.

—Siento el espectáculo —dijo Lottie avergonzada.

—No te preocupes, además es agradable ver el acto cariñoso de tú caballero de brillante armadura —respondió la mujer castaña al lado del señor McKellen.

—No sé si podría llamarlo mi caballero de brillante armadura, a veces suele ser más un bufón que otra cosa. —Se río Charlotte, la mujer le dio una media sonrisa.

—Supongo que son Matthew y Charlotte Wayne —dijo el señor McKellen, ofreciendo su mano—. Soy Luke McKellen y ella es mi esposa Kate. —Señaló a la mujer castaña, apreté su mano al igual que lo hice con la de Luke. Esperaba que presentara a la pelirroja y finalmente poder tocarla—. Y mis dos hijos mayores Emma y Tyler.

El agarre de Tyler fue fuerte, y su mirada azul transmitía un enojo que no comprendía. Dejé su mano para tomar la de Emma pero su toque fue fugaz, como si mi mano fuera ácido, y ni siquiera me miró.

—Lo siento... Yo... yo... —tartamudeo Emma, su tono nervioso era adorable—. Yo olvide que recibiría un paquete importante —dijo ella dirigiéndose a sus padres—. Los veo más tarde.

No dejó que sus padres respondieran, simplemente se fue de prisa. Todo en mi gritaba que debería ir tras ella, no dejarla escapar y tomarla como un cavernícola sobre mi hombro mientras golpeaba mi pecho diciendo "Mia" una y otra vez. Pero solo permanecí en mi lugar viéndola partir.

—También debo irme si quiero llegar a tiempo para preparar mi caballo y el equipo e ir a explorar la nueva ruta —se excusó Tyler.

Al igual que su hermana se fue rápido, ambos dejando desconcertados a sus padres.

—¿Que acaba de pasar? —le preguntó Kate a su esposo, ambos mirando el camino donde sus hijos desaparecieron.

—Si no lo sabes tú, que te hace pensar que yo lo sé —susurró Luke, luego volvió la mirada a nosotros—. Disculpen.

Señaló las sillas libres, Charlotte tomó de inmediato asiento y yo hice lo mismo. A pesar de mi cuerpo tenso por querer ir tras Emma.

—¿Qué les puedo ofrecer de beber? —preguntó Kate, dejando atrás su desconcierto.

—Jugo de arándano —contestamos Charlotte y yo al mismo tiempo. Era nuestra bebida por elección después de un viaje largo.

—Vaya son esa clase de matrimonio —respondió Kate.

—No somos un matrimonio. —Los hombros de Charlotte se estremecieron al decir la palabra matrimonio.

—¿No lo son? —Kate elevó una ceja buscando respuestas—. Pero creí que...

—Olvidé mencionar que el matrimonio Wayne no vendría —explicó Luke a su mujer—. En su lugar vendría el hijo de Noah Wayne, Matthew y su compañera, además de prima, Charlotte Wayne. Lamento la confusión.

—No se preocupe —dijo Charlotte, después agregó—, si puede solo queremos que nos pongan en habitaciones diferentes. Quiero a mi primo, pero no de ese modo.

—Por supuesto, Sorcha se encargará de eso enseguida —dijo Luke, mientras Sorcha asentía y se retiraba.

—¿Recibió mi propuesta? —hable finalmente, debía concentrarme en esta reunión.

Más tarde podía actuar como un cavernícola reclamando a su mujer.

—Directo a los negocios, me recuerdas a mi marido antes de tener a Emma.

—Pero no soy tan bueno como este chico Kate. —Me señaló Luke —. Si, recibí tu propuesta, creo que nadie podría darme una oferta mejor.

—¿Pero? —interrumpió Charlotte.

—Pero no estoy vendiendo ni ahora ni en el futuro —declaró Luke.

La probabilidad de que esto sucediera era mayor que la opción de que él terminara por vender. Lo sabía y por esa razón tenía otro plan. Charlotte también estaba pensando lo mismo por la mirada que compartimos. Sacó su iPad de su bolso deslizando su dedo en él.

—Traemos otra oferta —dije serio. Lottie deslizó el iPad hacia Luke. Él subió una ceja aceptando el iPad, leyó detenidamente la pantalla—. Como puede ver queremos ser socios. Traer a nuestros clientes a Firefly como parte de nuestra ruta de viaje de Edimburgo-Escocia. Por supuesto Inverness como el mayor atractivo.

—No nos faltan clientes.

—Lo sabemos señor McKellen, así como también conocemos su trabajo sobre la crianza de pura sangre y las competencias que han ganado. —Charlotte sabía cómo ganar el interés de las personas sin sonar como una chupamedias—. También tenemos información que la Federación Ecuestre Internacional conocida como la FEI está buscando una nueva sede para organizar un Enduro Ecuestre.

—¿Y eso en que se relaciona con Firefly? —intervino Kate.

—Señora McKellen, ustedes tienen el terreno para un evento de esa categoría y los caballos, si también quieren participar —expliqué paciente llevándolos a donde queríamos.

—¿Qué te hace pensar que la FEI nos elegiría? —preguntó Luke.

Ahí estaba el pez tomando la carnada. Charlotte y yo compartimos una sonrisa tímida.

—Nos tendrán a nosotros.

—Fuimos asesores de países que ganaron la licitación de los campeonatos en años anteriores —agregó rápido Charlotte—. Sabemos cómo ganar.

Por supuesto que sabíamos cómo ganar esa licitación, trabajamos sin descansar en Hungría y España, fue parte de nuestra formación después de la universidad. Nuestros padres creían que deberíamos buscar un trabajo fuera de empresas Wayne y saber si realmente queríamos hacer esto. Así conocimos a Kylie, una mujer que se encargaba de asesoramiento a países que querían obtener la sede de los Juegos Olímpicos, el Mundial de Fútbol, Juegos de invierno, etcétera. Nos contrató y nuestro primer trabajo fue el asesoramiento para Hungría de la licitación del campeonato europeo FEI. No sabíamos nada del campeonato o de caballos, pero lo conseguimos y volvimos a obtenerlo el siguiente año para España. Después de ello teníamos claro que haríamos cosas grandes en Wayne Enterprise's.

—Somos su garantía Señor McKellen —aseguré.

El matrimonio tuvo una conversación silenciosa con una mirada. Charlotte y yo permanecimos tranquilos, pero ambos estábamos nerviosos.

—Lo vamos a pensar —Luke rompió el silencio.

Miré a Lottie, acabamos de cerrar el trato, ambos lo sabíamos.

—Perfecto, solo tengo una pregunta más—dijo Lottie—. ¿Suelen celebrar Halloween?

Y así obtuvimos el lugar perfecto para la fiesta de Halloween de los Wayne compartida con los McKellen. Mientras tomamos jugó de arándano Charlotte hablaba con Kate y Luke sobre la fiesta.

Me disculpé con ellos alegando cansancio, Lottie sabía que mentía, aunque no dijo nada cuando me retiré a mi habitación. Sin embargo, al llegar con Sorcha no pedí mi llave o cual era la dirección de mi suite.

—¿Dónde puedo encontrar a Emma McKellen?

Ya era hora de ir por ella y tenerla para siempre.