Halloween Love

Capítulo 5

Fiesta de HalloweenMatthew

6 meses después

La música resuena en el salón del castillo, algunos monstruos y brujas están en la pista de baile enseñando sus mejores movimientos.

Toda la familia Wayne llegó hace unos días para celebrar la noche de brujas. Esta mañana finalmente Luke McKellen firmó el contrato aceptando ser socio con los Wayne. No solo estamos celebrando Halloween o el contrato, es la fiesta de mi compromiso con Emma. Como dije no iba a esperar demasiado hasta convertirla en mi esposa.

Esta mañana en la reunión con Luke le pedí la mano de su hija, parecía sorprendido, pero había escuchado la historia de mi familia desde que ellos aparecieron aquí, así que luego de unos instantes me dio su aprobación. Aunque si se negaba no hacia ninguna diferencia, con seguridad tomaría a Emma y nos casaríamos.

Después de la reunión regresé a mi habitación y encontré a Emma todavía en mi cama. La observé un momento hasta que despertó regalándome su mirada verde azul y una sonrisa perezosa.

«Cásate conmigo»

—Cásate conmigo —le dije, no podía esperar más. Estos meses habían sido los mejores de mi vida. Emma seguía en silencio y sus ojos demasiado abiertos como los de un búho—. Mierda, fue demasiado pronto.

Intente levantarme de la cama, pero su mano tomó mi brazo deteniéndome en mi lugar.

—No —dijo de inmediato con la voz ronca.

—¿No te quieres casar conmigo? O ¿es un no es demasiado pronto?

—No es demasiado pronto y si quiero ser tu esposa.

—¡Joder sí! —grité arrojándome sobre ella, besando su boca con pasión. Jadeo cuando introduje mi lengua y comencé un tango con la suya.

Habíamos pasado las mañanas juntos, pero por las noches ella se iba a casa de sus padres y yo a mi habitación. Sin embargo, anoche nos quedamos dormidos, nunca había dormido tan bien en mi vida.

Su ropa salió volando cayendo en algún lugar de la habitación, al igual que la mía. Mi necesidad de estar dentro de ella ardía en mi interior, me controle. Comencé un camino de besos hacia su cuello, me detuve un tiempo en la marca que le había dejado anoche, ya estaba desapareciendo. Volví a chupar hasta que su piel se puso rojiza. Satisfecho con mi trabajo de hombre de las cavernas continúe con mi camino hacia el sur. Amase sus pechos entre mis manos, provocando gemidos de Emma, observé el pecho derecho luego le di un pellizco al pezón duro y después lo llevé a mi boca. Hice lo mismo con el otro.

Bajando más ya podía oler la excitación de Emma, mi polla dura se agitó impaciente, aunque sabía que debía esperar, tenía que preparar a Emma ya que era su primera vez y no quería lastimarla.

Abrí sus muslos con mis hombros, miré una pequeña línea de risos rojizos en su centro, mi polla quería deslizarse sobre ellos. Bajé mi cabeza hasta su coño húmedo.

Emma elevó las caderas cuando mi lengua encontró su clítoris, mientras mi dedo se deslizaba entre sus labios resbaladizo. La escuché gritar, después sentí sus manos sobre mi cabello.

—Matt, por favor —suplicó cuando un segundo dedo entró en ella y mi lengua seguía trabajando en su clítoris. Mientras mi mano libre trabaja en sus tetas amasando y pellizcando sus puntas. Deslice mis dedos fuera de ella para cambiarlos por mi lengua. No había probado algo tan adictivo como el coño de Emma, lamo sus labios inferiores y bebo toda su crema. Mi lengua va a su nudo de nervios, provocando que sus caderas salgan disparadas del colchón, deslizó mis manos a su trasero para agarrarlo, sosteniéndolo hasta mi boca. Hundo mi lengua tratando de trabajar dentro de ella, pero solo puedo meter la punta.