¡No me llames Nymphadora! ❀ Remus&Tonks

Capítulo 21: Bondad

"¿Irías?" Tonks murmuró, trazando los patrones en el jersey de Remus con su dedo índice.

"¿Te gustaría que fuera?" Gentilmente tomó su mano, su pulgar acariciando sus dedos suavemente presionando un beso en el dorso de su mano.

"Si quieres". Respondió ella, sin querer darle la presión innecesaria. Eso era lo último que no necesitaba. Las líneas prematuras de su rostro se hacían más profundas a medida que se acercaba la luna llena. Tonks miró hacia arriba para verlo considerandolo con una leve sonrisa en su rostro.

"Sí, quiero ir". Decidió Remus, su suave mirada fija en ella. Ella sonrió y asintió con la cabeza. Su pecho tembló mientras se reía. Una sesión de lectura se convirtió en una excusa para que Tonks lo abrazara. Estaba caliente y su brazo libre estaba alrededor de su hombro, ella encajaba cómodamente en el hueco de su brazo. Le dió sueño, pero no pudo dormir. Si se quedaba dormida, se perdería la reunión sobre la que Voldemort le había pedido a Snape que le informara.

Presionó la oreja contra su pecho, escuchando los fuertes latidos de su corazón. Tonks suspiró. Ella podría escuchar eso por la eternidad; y eso es lo que pretendía hacer por el resto de su vida si la vida misma se lo permitía.

"¿Nymphadora?" Remus habló en voz baja, su voz salió profundamente de su pecho. Le encantaba la forma en que su espantoso nombre reverberaba en su pecho.

"¿Mmm?" Ella respondio; sus ojos felizmente cerrados. Cuando él no respondió, abrió los ojos y miró con curiosidad. Lentamente, Remus bajó la cabeza, presionando sus labios contra los de ella.

[...]

La mansión estaba en silencio. Eso fue lo primero que registró Tonks. Aparte de los Mortífagos de guardia, no había nadie más. Entró y cuanto más se acercaba, se dió cuenta de que ella era la única allí.

Abrió la puerta y entró con la cabeza en alto. Voldemort le siseaba a Nagini en otro idioma. Supuso que era pársel; el 'lenguaje de la serpiente'. Algo que solo Harry Potter y el Señor Oscuro podían hacer.

En el momento en que se abrió la puerta, tanto el amo cómo la mascota se volvieron hacia ella; Nagini arqueando la espalda y siseando.

"Nymphadora, ven". Le hizo una seña con la barbilla inclinada. "He descuidado nuestro entrenamiento juntos".

"No mi señor, nada es más importante que la misión ahora". Tonks se inclinó mientras se acercaba.

"Siempre encontré tu lealtad... admirable".

Tonks asintió con humildad.

"Pero en los últimos días". Pasó junto a ella. "No puedo evitar preguntarme si tu lealtad está donde pertenece".

"¿Mi señor?" Ella habló, su tono confuso.

"La Marca Tenebrosa, Nymphadora." Siseó Voldemort con impaciencia. Ella se congeló. Tonks escuchó el viento moverse y se le erizaron los pelos de la nuca, pero se obligó a permanecer inmóvil.

Su cuerpo se prendió en llamas calientes, corriendo por su columna. La envió desplomándose al suelo, retorciéndose de agonía, gritando con la garganta ronca.

Tan abruptamente cómo comenzó, se detuvo para dejar un dolor sordo pero fuerte en su cuerpo. Sintió unos dedos fríos envolver su muñeca, tirándola hacia arriba. El fuerte tirón casi le arranca el brazo de la cuenca, Tonks estaba segura, pero lo siguió sin fuerzas, todavía convulsionando levemente por el dolor. Su manga fue empujada hacia atrás con brusquedad para revelar una suave piel de marfil.

Él siseó y ella sintió su varita presionar su piel. Tonks quería luchar. ¡Ella no podía ser marcada ahora! ¿Qué pensaría su madre? ¿Qué pensaría Remus? ¡No, no estoy lista!