Capitulo 2: Entrenamiento

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"¡Esto no es un juego! ¡Nunca aprenderás nada si no aprendes a tomarte esto en serio!"

A Tonks ya le dolía mucho la cabeza, debido a un hechizo deslumbrante que le había disparado y golpeado en la nuca, y sumandole a los gritos de Ojoloco que no ayudaban mucho. Ojoloco le ladró con dureza mientras ella corría y esquivaba los hechizos que le estaba lanzando a una velocidad increíble.

"¡No pelearás conmigo cuando estés ahí afuera y estarás muerta cada vez que te golpeen!" Ojoloco le disparó a otro, rozando su mejilla y quemándola. Hizo una mueca, estremeciéndose por un momento antes de agacharse para esquivar un hechizo que le pasó como un rayo.

Jadeó y tomó la abertura para lanzar otro hechizo a su mentor. Se volvió loco y golpeó su bastón, enviándolo a la pared detrás de él.

"Merlín-" Tonks gritó mientras tropezaba con su propio pie, tratando de saltar fuera del camino de uno de los hechizos de Ojoloco.

Escuchó un bufido y por un momento, mientras alcanzaba su varita que estaba abandonada a su lado, los hechizos se detuvieron. Se arriesgó a mirar a su antiguo Mentor para ver su mirada normal y común de 'Quiero-matarte-porque-te-tropezaste'. Al instante, se puso de pie. En el momento en que estuvo de pie, un hechizo zumbó hacia ella, rozando su brazo mientras se inclinaba hacia atrás.

"¡Estupefacto!" Tonks apuntó a su mentor, quien aún no había dado más de cinco pasos desde que comenzó su entrenamiento, pero había logrado hacerla correr casi un centenar de círculos mientras intentaba evitar sus hechizos.

"Buen intento" Escuchó gruñir a Ojoloco mientras él prácticamente rechazaba su hechizo débil pero bien dirigido antes de lanzar el suyo.

Vió un chorro de luz roja acercándose rápidamente e intentó agacharse pero la golpeó en el hombro, enviándola hacia atrás y al suelo.

Tonks luchó por superar el dolor de cabeza y el hombro palpitante para levantarse, pero antes de darse cuenta, Ojoloco Moody ya estaba sobre ella con la punta de su varita en su rostro, apuntando justo entre sus ojos.

Ella miró con incredulidad entre él y su bastón recuperado. Asumiría que al menos lo había inmovilizado al deshacerse de su bastón, pero aparentemente no...

"Necesitas trabajar más" Dijo Moody, manteniendo su varita en la mano incluso mientras se giraba, su ojo mágico azul eléctrico girando alrededor mientras inspeccionaba la habitación.

Tonks se levantó, frotándose el trasero mientras le dolían las dos caídas. "Sí señor..." respondió ella, suspirando.

Ella ya estaba en dos meses en el Entrenamiento de Aurores. Habiendo perdido el primer mes esperando un mentor apropiado para ella; que era Alastor 'Ojoloco' Moody, a quien había escuchado que acababa de regresar manejando un caso con uno de los mortífagos. Durante ese tiempo esperando, había recibido entrenamiento de más de unos pocos Aurores, pocos de los cuales podían compararse con el intenso entrenamiento que había estado recibiendo de Moody.

Ella recibiría una pequeña nota de Scrimgeour de que estaría unida a Moody ya que él estaba "disponible" y ahora aquí estaba, con la espalda y la cabeza dolorida. Charlie prácticamente le había enviado sus felicitaciones y sus más profundas condolencias en el momento en el que se enteró de la noticia de su última carta, Bill había mantenido la calma, y su mamá y su papá no podrían haber estado más orgullosos de su hija.

Moody gruñó y cojeó, apresuradamente, hacia la puerta. Tonks lo siguió; el tintineo de su pierna de palo resonó a su alrededor cómo si fuera la marca presencia de su malhumorado mentor. Ella trotó para unirse a él a través de la habitación, guardando su varita en su túnica.

¡No me llames Nymphadora! ❀ Remus&TonksDonde viven las historias. Descúbrelo ahora