This is Not the End ( traducido al español)

capitulo 10

POV Clarke.

Clarke sintió como si estuviera viviendo en un sueño. Ella había hecho su único propósito ayudar a Lexa a sanar y estar allí cuando la necesitara, lo que sorprendentemente no fue mucho en los últimos días. Lexa apenas pidió ayuda y fue terca cuando la necesitó. Sin embargo, a Clarke le gustaba pensar que había ablandado a Lexa durante su tiempo juntas. Incluso si fuera solo en la privacidad de su habitación. Sabía que tan pronto como Lexa pusiera un pie fuera de sus habitaciones, volvería a ser lo que era antes, endurecida y fría. Pero el tiempo que habían pasado juntas fue más de lo que Clarke podría haber esperado con la Comandante. La Lexa que había llegado a conocer era tan gentil, tan cariñosa, tan tímida y suave, y tan diferente a cualquiera que hubiera conocido antes. Una Lexa que probablemente nunca habría conocido si el destino no hubiera intervenido en forma de bala perdida. Apreciaba cada segundo que tenían y secretamente deseaba que no terminara. Por desgracia, sabía que ambas tenían deberes que atender y que no podían ser ignorados porque habían sido apartados durante demasiado tiempo. Clarke ni siquiera quería pensar en lo que podría estar pasando en Arkadia.

Los Terrestres se estaban volviendo cada vez más inquietos, queriendo vengarse del hombre que casi le roba la vida a su Comandante. Lexa había intentado aguantar el mayor tiempo posible para que supieran de su estado, pero la gente empezó a preguntar. Nadie había visto a la Comandante durante días, y la mayoría estaba acostumbrada a verla casi todos los días, al menos alrededor de la torre. Cuando tuvo que cancelar una reunión con los embajadores de los clanes, todos sabían que algo estaba pasando. Los Grounder no solo estaban inquietos por sus circunstancias, sino que también estaban ansiosos por dirección, por liderazgo. Tenían que ocuparse de sus deberes diarios, pero normalmente la Comandante les asignaba otras tareas. La noticia de la masacre a manos de la Gente del Cielo y su amenaza actual también viajaba rápidamente por toda Polis. Se necesitaba la presencia de Lexa.

Habían pasado unas dos semanas y Clarke finalmente le había dado a Lexa el visto bueno para reanudar sus funciones. Temía que si no se rendía pronto, Lexa se volvería loca o intentaría algo igualmente peligroso para escapar de los confines de su dormitorio. Lexa no estaba completamente curada, pero Clarke sabía que ambas nunca durarían hasta que ella lo estuviera, por lo que aceptó de mala gana. Tendría que vigilarla de cerca. Los puntos se acababan de quitar sin problema hace un día y Lexa estaba lo suficientemente curada en opinión de Clarke. Sin mencionar que parecía que se estaba volviendo exponencialmente más fuerte cada día, más rápido que cualquiera que hubiera visto. Se preguntó si tendría algo que ver con la sangre de la noche, o si era solo Lexa. Pero Clarke se aseguró de darle a Lexa instrucciones estrictas para que no participara en actividades extenuantes, incluidas las peleas. Sin embargo, si Lexa obedecía era una historia diferente.

Las dos estaban sentadas en el dormitorio de Lexa, Clarke ayudando a Lexa con las últimas piezas de su armadura. Sólo cuando estaban solas Lexa permitiría que Clarke la ayudara. Clarke se sintió honrada de que se le permitiera esta responsabilidad. Revisó la herida una vez más para asegurarse de que no mostrara signos de infección o reapertura. Ella sonrió con orgullo. Tuvo que admitir que estaba muy satisfecha con la forma en que se estaba curando.

"¿Estás segura de que tienes que ponerte todo esto ahora mismo?" Clarke preguntó mientras levantaba la pieza de hombro sorprendentemente pesada de su lugar en el armario de Lexa. Ella entendió el significado de la pieza, con su elegante faja roja que caía en cascada al piso, pero no lo creía necesario en este momento, especialmente porque solo colocaría un peso innecesario sobre su herida.

Lexa suspiró. "la Comandante debe usar esto en todo momento cuando esté a la vista del público. Se consideraría un signo de debilidad si apareciera sin él, sin mencionar una señal de falta de respeto".