¡Llama a Calú! (ONC 2021)

¡Llama a Calú!

—¿Y cómo nos llamaríamos?

—"Los fabulosos animadores Eduardo y Romina" —Le respondió Edu a Romina.

—Eso no es nada original, además, sería Romina y Eduardo, recuerda que fui yo quien comenzó todo.

—Pero fue mi idea.

—Se nos hubiera ocurrido tarde o temprano. —Dijo sosteniendo unas tarjetas con números telefónicos —Estas personas nos obligarían a eso.

—Engreída.

—No más que tú. —Dijo y le sacó la lengua.

Habían pasado de una idea loca a algo real, ya habían pensado en el diseño de sus tarjetas, flyers, iban a necesitar un logo y quizás hasta una página web, mentalmente ya estaban en el piso 16 y nadie los iba a bajar, iniciarían su empresa y sería un éxito, pero primero, necesitaban un nombre.

—Tal vez una combinación de nuestros nombres sería lo mejor que podemos hacer. —Dijo Romina.

—Roedu... Edumina... Roardo...

—Chicos —Intervino Laura— Deberían probar con sus segundos nombres.

—O sea, Carlos y...

—No lo digas. —Le cortó Romina.

—Luc..

—¡No lo digas!

—¡Lucrecia!

—¡Ahhg! ¡Cómo odio ese nombre!

Eduardo y Laura comenzaron a reírse y Romina les tiró una almohada a cada uno.

—¡Lo tengo! —dijo Edu.

—"Organizadores de eventos Calú", la tilde le da un toque especial.

—Sí, me gusta como suena, aunque hay un detalle...

Edu ignoró a Romina y comenzó a hablar como si estuviera en un spot publicitario "¿Tu fiesta está aburrida? ¡Llama a Calú! ¿Tu perrito necesita más invitados para su cumpleaños? ¡Llama a Calú! ¿Tu ex novio tiene una cita y quieres que sea un desastre? ¡Llama a Calú! ¿No sabes por qué llamar a Calú? ¡Solo llama a Calú".

—¡Estás loco! —Dijo Laura.

—Apoyó a Lau —Dijo Romina— ¿Y qué es eso del ex novio y el perrito?

—Ya que estamos en esto, no nos podemos estancar, yo soy un visionario y veo lo que se nos avecina. Tenemos el monopolio del mercado, no hay competencia y seremos muy solicitados. No somos simples animadores, nosotros cumpliremos misiones y muchas de ellas no serán sencillas.

Laura y Romina se miraron y se sonrieron, creían que su amigo estaba loco, pero ya estaban acostumbradas a sus locuras, lo que era muy extraño es que ahora Romina formara parte de una de ellas.

—Todavía está ese detalle de "Organizadores de eventos" —Dijo Romina —Los organizadores se encargan de presupuesto, logística, etc... No hacemos eso.

—Lo sé, pero esa será nuestra fachada, nadie nos buscará por ser organizadores, pero es lo que dirá nuestra tarjeta.

—No entiendo.

—Si queremos durar en el negocio no podemos ser tan obvios, debemos permanecer de incógnito. Si alguien solicita a unos organizadores, les diremos que tenemos la agenda llena, ahhhh, pero si piden el "Paquete especial Calú", sabemos que tenemos un cliente.

Romina se tiró al sillón y se quejó, Laura se acercó y le acarició la cabeza como a un cachorrito.

—Pobre criatura, no sabías dónde te estabas metiendo. —Le dijo.

Eduardo puso un gesto de disgusto y se fue a la cocina, regresó con tres botellas de smirnoof.

—¡No más alcohol! —Se quejó Romina, pero de igual modo recibió la botella.

—¡Por el comienzo de esta exitosa empresa! —Dijo Eduardo y los tres bebieron.