Sintiéndose abrumado por la cantidad de murmullos que llegaban a sus oídos, el rubio se giró infinidad de veces en el sofá buscando una posición cómoda para nuevamente conciliar el sueño, sin embargo, entre el calor del hogar, aquellas personas desconocidas hablando y taladrando su cabeza, agregando el terrible olor que su cuerpo desprendida, Taehyung despertó.
Rápidamente logro identificar donde se encontraba, entonces pensó que aquellas voces no debían ser de extraños, sino, más bien de su hermano Namjoon y su pareja Jin, pero ¿de quién era ese olor a café y canela? Había un alfa con ellos.
Poniéndose de pie y encaminándose al baño remojo su cara sacándose cualquier rastro de maquillaje corrido que pudo tener, además de tomar un poco de enjuague y lavar su boca. Se miró al espejo, estaba hecho un desastre, ¿Cómo había logrado terminar así? Se cuestionó antes de salir y mentalizarse el regaño que estaba a punto de llegar una vez que se encontrara con su hermano mayor.
Sin ni siquiera haberlo planificado, todos los ojos estaban puestos sobre él, pero curiosamente todos mantenían una distinta mirada. Taehyung podía jurar que su hermano estaba a nada de asesinarlo con la mirada, Jin lo miraba, como siempre, de manera reconfortante, y entonces dio con el dueño de aquel olor a cafetería. Mantenía unos ojos gatunos, grises debidos a las lentillas, apenas lograba descifrar que irradiaban, pero por su examinación a su persona desaliñada, el rubio supo que posiblemente era asco, y no lo culpaba; a su lado y tomándolo por la cintura se encontraba un omega, de hebras doradas y cara angelical, por la posición dedujo que eran pareja, lo cual poco le hubiese importado, si tan solo aquel omega no lo mirara con un brillo despampanante en sus iris.
-Yoongi, Jimin, él es mi hermano Taehyung.- menciono Namjoon rompiendo el incómodo silencio.- Tae, ellos son mis amigos.
-Un gusto, Taehyung.- saludo con una enorme sonrisa, quien supuso se trataba de Jimin.- Namjoon nos ha estado hablando de ti.
-El gusto es mío.
-Ven Tae, acompáñame.- dijo el alfa tomando a su hermano del brazo y llevándolo hacia la escalera.- Ve a darte un baño y vuelves, hay algo que debemos hablar.
-Sé que estas molesto y lo si-
-Estoy más que molesto, pero ésta vez no se trata de las tonterías que haces.
-¿Entonces?
-Tiene que ver con mis amigos, así que date prisa, no los hagas esperar demasiado o yo mismo les diré que no vales la pena.
Sin tener tiempo para defenderse, que ni siquiera planeaba intentarlo, debido que no había entendido su comentario, Taehyung subió escaleras arriba.
Una vez que el omega se miró al espejo comprobando que su atuendo era lo suficientemente decente, bajo con los demás. Muchas dudas pasaban por su mente, no entendía a que había hecho referencia Namjoon y por qué sus amigos lo necesitarían, en su vida los había visto, no encontraba una razón lógica y coherente para ser de ayuda a alguien más.
-Estoy aquí.- dejo salir Taehyung en un susurro, que realmente fue lo suficiente audible para todos.
-Toma asiento, te traeré algo de comer.- menciono Jin con una sonrisa.
Sentándose frente a la pareja, el rubio se sintió pequeño ante la mirada tan pesada de ambos alfas, pero al mismo tiempo dulce del omega, lo cuál lo confundía y frustraba aún más.
-Namjoon nos ha presentado, pero no está demás hacerlo por cuenta propia.- dijo el omega sin dejar esa hermosa sonrisa.- Mi nombre es Park Jimin, trabajo como psicólogo en un hospital infantil, y él es mi esposo, Min Yoongi, es productor.
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Omega de alquiler |Yoonmin/Yoontae|
Teen FictionTaehyung tenía una sencilla y única tarea, cargar en su vientre al cachorro de Park Jimin y Min Yoongi, una pareja que le había propuesto alquilar su vientre a cambio de una jugosa cantidad de dinero, a la cuál el omega no se había logrado resistir...