Entre dos tiempos / Nayeon [FANBOY]

Capítulo 9 / ¿Sueño o realidad? / Two world

No pude dormir durante toda la noche, mis pensamientos estaban llenos de duda. Aún no entiendo que hacía el primer ministro aquí, sobre todo parecía que él y mi padre son muy buenos amigos.

No podía quedarme de brazos cruzados y no hacer nada, iba a asegurarme de proteger el trono de toda traición.

Muy temprano en la mañana salí hacia el palacio, el entrenamiento iba a ser mucho más duro que nunca, tenía que asegurarme de que los hombres que voy a entrenar serían fieles al Rey.

-toda lucha es para proteger al Rey y a su pueblo -dije una vez estando frente a todos los futuros guerreros -El pueblo, sus familias, amigos y el Rey dependen de nosotros, cada vez que matan a un enemigo en la guerra, están protegiendo a su pueblo. Pero esto no significa que matarán a su gusto, sino solo cuando sea necesario.

-¡Si señor!

Caminé hacia el centro una vez se les ordenó agruparse -En este momento voy evaluar su capacidad de pelea, los que se sientan seguros de ganar, pasen adelante -dije preparándome.

El primero se levantó, lo conocía, hijo de uno de los ministros, en actitud egoísta y agresivo, no entendía porque estaba aquí.

Se acercó hacia una pared en donde están las armas y tomó una espada.

-Eres muy valiente -dije también dirigiéndome a tomar una.

-Quiero saber porque el Rey te eligió como líder de las tropas -dijo de forma seria.

-pues ya lo sabrás -dije poniéndome en posición

Se acercó a mí con mucha agresividad e ira y dirigió su espada hacia mí, error de novato, luchar con ira puede ser un punto débil. Dejó libre su vientre, aproveché para agacharme a la altura de su vientre y con un giro le di un golpe en aquel lugar -Como primer consejo -grité para que me escucharan -nunca dejen sin defensa a su cuerpo, se verán atacados en ese punto y fácilmente los derribaran y serán asesinados, sobre todo si atacan con ira, estarán segados por eso y el enemigo acabara con ustedes fácilmente -dije mientras tenía la espada en su cuello -fue fácil derribarte, tu equilibrio se perdió en el primer ataque y por tanto terminaste así -dije después de quitar la espada de su cuello, me aleje dándole la espalda.

Escuché un grito de ira por parte de él, logró cortarme en el hombro del lado derecho, los guardias rápidamente lo sujetaron con fuerza.

-No, está bien suéltenlo -exclamé con dolor -es un error mío, en una batalla real nunca se le da la espalda al enemigo, de hecho en esto lo hizo muy bien -dije felicitándolo, me acerqué y alejé a todos -pero si vuelves a hacer algo como esto la próxima vez, créeme, lucharé en serio -susurré.

Es suficiente por hoy, pueden irse -ordené mientras caminaba hacia un cuarto en dónde no me vieran.

-¿Estás bien? -escuché que alguien me preguntó a penas después de sentarme en un banco.

-No tan bien -respondí al darme cuenta de quién era -¿La trajiste?

-Ella está fuera, le pedí que esperara un poco, al menos hasta que pudiera curar su herida.

Suspira -Esta bien déjala pasar, no hay nada más que pueda hacer, ya estoy acostumbrado a esto, además, no es tan grave.

-Aún así debería.....

-¿Señor cuánto más debo esperar? -se escuchó a alguien gritar desde fuera.

-Esta bien señorita puede pasar -Gritó.

Rápidamente me cubrí el torso apenas entró.

-¿Estás bien? -preguntó preocupada, se acercó aún más hacia mí revisando el lugar en dónde la espada había cortado.