"2 alfas para uno" vmin/kookmin

Cap:6

Sus padres habían partido temprano, listos para empezar sus noches de apareamiento, cosa que solo pasaba 2 veces al año. Dejando a los 2 menores, Jimin y sun princesa favorita, quien cumplía el año hoy. Al menos sus padres se lo festejaron ayer, alegando que era muy importante.

Lisa era una bebe muy mimada a sus 2 años, básicamente tenía todo lo que el anhelaba, el amor de su madre y su orgullo.

Al quedarse con la pequeña no pudo tomar clases, por lo que aviso lo más temprano que pudo.

Su mejor amigo era consciente de que tenía que faltar esos días, después de tanto tiempo justos, era lo normal que supiera algunos eventos especiales, en cambio sus alfas no, estaba seguro que estos estarían como locos buscando hasta debajo de las piedras.

La pequeña niña empezó a llorar, llamando la atención de su hermano, ya de 16 años.

-Cielo, ¿por que lloras?, tu hermano esta aquí

La tomó en brazos, acurrucando su pequeño cuerpo contra el. Como forma de calmante, traía puesta una blusa con el olor a chocolate blanco y galletas de su padre.

-Ya, vamos a desayunar, ¿te apetece fruta y algo sencillo?

La niña negó, haciendo cara de asco, con su pequeña mano señaló las galletas que chispas al lado de la estufa.

-Galletas... -Susurro en afirmación para el mismo- no, definitivamente no

El pequeño labio de la niña tembló, sus ojos se llenaron de lágrimas y su las comisuras de sus labios se hicieron para abajo, con molestia miró a su hermano.

-No Park Lisa... -llevó una de sus manos a su barbilla- tu nombre suena mal, Park... Lisa, considerando tu forma de ser deberías ser Park Berrinches o Park Mocos, ¿No crees?

Y fue ahí que el llanto salió a flote, alertando al hermano mayor.

-Calma linda, solo era una broma, tu nombre es muy bonito Lisa.

La niña volvió a exigir galletas, señalando el jarrón. Si no fuera su hermana, Jimin estaba seguro que la aventaría por la ventana.

-No, haré algo más sano... papá me dejo una lista de alimentos, hay varios que tienen buena pinta princesa.

Lisa aplaudió, jugando con la blusa de Jimin.

-Papdá

-¡Bien!, te pondré en tu silla, ¿si?

El resto del desayuno fue tranquilo, aveces se ponían a "hablar", bueno Lisa a balbucear, aveces soltaba una palabra entendible y Jimin... el solo le decía, "Ajá", "¿Enserio?", "No lo puedo creer, ese chico es malo bebé", "¿yo?, te recomiendo alejarte", incluso la bebé asentía, como si se entendieran.

En la tarde el timbre sonó con desesperación.

-Espera aquí, revisaré quien osa interrumpir nuestra hora de sueño.

Lisa lo miró, lamiendo su galleta.

-Tu si que sabes disfrutarla, ¿eh?

-Gagushjka bachju chibañkdo gaeta

-Si, ya sabes como son, esos niños no saben disfrutar la comida y se la meten de un bocado.

La niña se carcajeó con fuerza.

-voy a ver, quédate ahí.

-Chimchim

-Shh

Siquiera antes de llegar al umbral de su hogar, su combinación favorita de olores lo golpeó.

Lentamente abrió la puerta, dejando ver su cabellera negra, luego sus ojos y por último su cuerpo.

-¿Que hacen aquí?

Los chicos soltaron el aire, aliviados de no ver a la líder en casa. Casi venían rezando todo el camino, rogando a la madre luna que se apiadara de sus almas, pero, la preocupación por su pareja les carcomía con fuerza, era necesario que supieran su estado. No era normal que Park Jimin faltará, por lo general era por su madre, quien lo llevaba de supervisión, alegando que su papel como alfa era y sería el mantener segura a su manada. Era una hipócrita, ni a su propio cachorro mantenía seguro de ella misma, como esperaba que la manada estuviera segura.

-Nos preocupamos Jimin, es todo... no llegaste a clase, temidos que tu madre te tocara.

-Créeme que Jeon venía muriéndose del miedo... le dije que debía comportarse y...

Un buen golpe hizo callar al alfa castaño.

-Perro, estabas igual o peor que yo, pensé que mojarías los pantalones.

Jimin los miraba con una mueca, sus alfas eran un caso perdido.

El chillido de una bebé llamó la atención de los 3. Instantáneamente los intrusos corrieron dentro de casa, buscando algún olor desconocido, encontrando nada más y nada menos que el olor a leche caliente.

-¿Puedo comerme a la bebé?, solo le ponemos plátano y sería perfecta.

Jimin tomó a la pequeña en sus brazos, besando sus cachetitos.

-Es tu herma, ¿verdad?

El menor asintió, sonriendo orgulloso.

-Es la primer dueña de mi corazón

Jeon bufo, sonriéndole coqueto a su "omega".

-Deja que lleves a mi cachorros Jimin, serán los primeros en tu corazón.

-Nuestros Jeon

Hablo Taehyung.

Jimin estaba que se moria de la vergüenza, nunca pensó verse embarazado o algo así, se había hecho la idea de que el sería quien depositara la semilla.

-Bueno, la luna da sorpresas kook, puede que mi rango no sea omega

Los mayores rieron.

-¿Alfa?, ya somos 2, omega es lo más probable, o beta... entonces adoptaremos.

Jimin sonrió, orgulloso de que sin importar su rango, sus alfas lo amarían.

-Los quiero alfas

-Nosotros a ti Mochi

De nuevo, el golpeteo en la puerta los saco de su burbuja de amor.

-Carga a Lisa, alfa Tete

Camino a paso rápido, preguntando quién era, gran sorpresa la que se llevó al escuchar a su progenitora. Al abrir la puerta, esta lo miraba herida, sus ojos rojos brillando...

Esa no era su parte humana, era su lobo.

Unos segundos fueron los que tardaron en reaccionar, no tenían idea de que decir realmente y el hecho de que 2 alfas estuvieran presente, intimidaba a Jimin.

Cuando por fin la señora Park empezó a hablar,  una bebé salió caminando de una forma graciosa.

Un sollozo salió de los labios de la prominente mujer, alertando a todos. ¿Acaso la alfa líder estaba llorando?, efectivamente.

-Per-Perdón cielo

Jimin miró a su madre tomar a la pequeña bola de carne. Su madre sonaba sincera, pero no era ella quien debía pedir perdón.

-¿Madre?

Ella levantó la mirada, mostrando una mueca de arrepentimiento.

-No eres tu quien debería pedir perdón, tu no puedes controlarla, ¿lo sabes? - Ella asintió - No te culpes por sus errores, aunque me alegra que te disculpes y no tengas las mismas intenciones que ella.

Soyeon acuno a sus dos hijo, transmitiendo todo el amor que pudiera, sintiéndose más tranquila al saber que su cachorro no la odiaba.

-Te lo juro Jimin, encontrare la manera de volver a ser la madre que mereces-